[devocional-miercoles] 31 de agosto de 2005 – El encuentro de mi vida.

       ¿De todo lo que me aconteció, el suceso más importante sigue siendo el haber tomado conciencia de que Jesús vive. No es solamente una figura histórica del pasado, un hombre bueno, que luego murió y desapareció. Jesucristo es el Hijo de Dios, quien murió por todos nosotros y luego resucitó de entre los muertos.

       Di este paso de fe. Entonces Jesús ha dado un sentido concreto y sólido a mi existencia en la tierra. Por eso, más que cualquier otra cosa en el mundo, lo dejo conducir mi vida. Estar junto a Jesús cada día constituye la relación más liberadora que existe, porque él me comprende mejor que yo mismo.

       Si Jesús no viviese, yo no podría escribir como lo hago en este momento. Su amor me garantiza seguridad y esperanza en este mundo inestable y cambiante. Nada puede separarme de él. Vivir para él con la guía y ayuda de su Espíritu es para mí el más increíble desafío otorgado a los hombresí.

       ?Esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado? (Juan 17:3). ?Dijo entonces Jesús…: Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos; y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres. Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres? (Juan 8:31).