Devocional – YO SOY la vid verdadera y mi Padre es el que la cultiva

Devocional – YO SOY la vid verdadera y mi Padre es el que la cultiva [Juan 15,1]

YO SOY la vid, y ustedes son las ramas. El que permanece unido a mí y yo unido a él, da mucho fruto, pues sin mí no pueden ustedes hacer nada [Juan 15,5]

¡Qué privilegio, qué desafío nos puso Jesús al comparar a los fieles con las ramas de la vid! Si bien es cierto que su palabra purifica el corazón [Juan 15,3], también nos pide algo a cambio: «Sigan unidos a mí» [Juan 15,4] ¿Cómo podemos «seguir unidos» a Jesúsí Seguir unidos o permanecer en Cristo es fundamentalmente una actitud del corazón, de corresponder a su amor de una manera personal y constante.

El Señor desea ser nuestro confidente y amigo más íntimo, la persona con quien compartimos todo lo bueno y lo hermoso, y también lo malo y lo feo, por así decirlo, de nuestra vida. Cuando abrimos honestamente el corazón delante de Dios, Él nos hace ver cuales motivaciones denotan egoísmo; nos consuela en las tribulaciones y en la tristeza y nos da a conocer todo aquello que no le agrada o le causa decepción. Jesús se alegra sobremanera cuando simplemente le contamos cómo ha sido nuestro día; se regocija de nuestras pequeñas victorias sobre el pecado y recibe con agrado nuestras expresiones de gratitud y alabanza. Todo esto es parte del «permanecer unidos» a Cristo.

Se requiere decisión día tras día para poner a los pies de Jesús todo lo que nos suceda, con la confianza de que Él puede y quiere proveer para nuestras necesidades y ayudarnos a discernir lo bueno y lo malo. Hasta cierto punto esto se facilita con el tiempo, pero jamás llega a realizarse sin esfuerzo alguno. El verdadero fruto de permanecer en Cristo es llegar a una comunión cada vez más profunda con Dios, y llegar al amor perfecto que todos podemos descubrir si permanecemos en Él.

¡¡¡Señor mío Jesucristo, quiero permanecer siempre unido a Tí. Quita de mí toda señal de autosuficiencia que me impida llegar a una profunda comunión contigo, y permite, Señor, que tu amor eche fuera todo temor, mientras se purifica mi corazón!!!

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí