¿Quién Atiende los golpes De Su Puerta?

    «sabe el Señor librar de tentación a los piadosos» (2 Pedro 2:9).


    Una pequeña niña explicó como enfrentaba tentaciones al decir: «Cuando el demonio toca a mi puerta, pido a Jesus para ir atenderla.»

     

    ¿Y cómo hemos manejado con nuestras tentacionesí  ¿Cedemos a ellas, justificando qué somos flacosí  ¿Escondemonos con miedo del diablo?  ¿Decimos que ellas no nos alcanzan porque somos fuertes el suficiente para vencerlasí

     

    Solo hay una manera de enfrentar las tentaciones sin el peligro de sucumbir delante de ellas: dejar que Cristo pelee por nosotros.  Él es nuestro escudo y fortaleza, nuestro socorro en la hora de la angustia, nuestro auxilio cuando la fe nos falta, alguien en que podemos confiar plenamente.

     

    para que Jesus atienda la puerta cuando las tentaciones tocan es necesario que Él esté en nuestra casa.  Debe habitar en nuestros corazones, ser nuestro compañero de todas las jornadas, el amigo inseparable de todas las ocasiones.  No podemos dar un único paso sin sentirlo a nuestro lado, sin pedir Su orientación, sin oír sus consejos.

     

    ¿Y ha sido eso lo qué hacemosí  ¿Hemos dejado el Señor comandar nuestras vidasí  ¿Hemos buscado saber su voluntad antes de tomar nuestras decisionesí  ¿Hemos seguido confiantes cuando Él dice «sí» y parado inmediatamente cuando Él dice «no»?

     

    Cuando Cristo es el Salvador y Señor de nuestra vida, sentimonos guardados y protegidos, vivimos de manera abundante y nuestros días son siempre felices.  Todos los tipos de tentación podrán tocar a nuestra puerta, pero no nos preocuparemos y ni nos sentiremos estremecidos.  Al final, el Señor está con nosotros y nada temeremos.

     

    ¿Quién atiende a las toques de su puerta espiritual?

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