IV. NUESTRA RESPUESTA AL SUICIDIO EN LA BIBLIA

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IV. NUESTRA RESPUESTA

¿Qué deberíamos hacer después que evaluamos que estamos delante de una persona suicida y hemos concluido que hay un alto riesgo?

1. Si se esta tratando con una persona potencialmente suicida, hay que tomar acción inmediata. Por favor, todas las insinuaciones o tretas hay que tomarlas muy en serio. Algunas personas se quitan la vida por error; porque tan sólo intentaban con ello llamar la atención, por tratar de clamar por ayuda y nadie acudió a su llamado hasta que ya había ocurrido lo indeseable. Hay que tomarlos muy en serio. Trate todos los intentos suicidas como reales y dé una solución. Si la persona sólo esta tratando de llamar la atención, pronto aprenderá que esa no es la mejor forma de llamarla, e intentará hacer algo diferente la próxima vez. No hay nada de divertido en ir a parar a un hospital para que les hagan un lavado de estómago y luego ser llevados a un hospital psiquiátrico para una evaluación. Una persona que sólo trata de llamar la atención no intentará atreverse por eso nuevamente; por otro lado, la persona que verdaderamente esta intentando suicidarse tendrá su vida salvada.

2. Si la persona que se quiere suicidar tiene un plan que realmente funciona, tomar las siguientes medidas:

No dejarla a solas ni por períodos cortos, no dude en llevarlos a una clínica especializada para estos casos y hospitalizarla de ser necesario. Sabiendo que éstas clínicas para enfermos mentales no son nada divertidas, pero que pueden prevenir que la persona se quite la vida mientras uno puede aprovechar para llevar a esta persona a los pies de Cristo.

3. Lleve a la persona a Cristo. Explíqueles el evangelio y que todos somos pecadores separados de Dios, pero que Dios les ama y quiere tener una íntima relación con ellos, por eso mandó a su Hijo para que muriera en la cruz por ellos, llevando a cuestas el castigo que nosotros merecíamos, y que si creemos en Él, nuestros pecados son perdonados y Dios nos dará vida eterna.

4. Ore porque ellos puedan ser lleno del Espíritu Santo. Esta persona necesita del Espíritu Santo para resistir al enemigo y estar parado en Cristo, ore porque sea bautizado, sumergido en Él, lleno y ungido por el Espíritu de Dios.

5. Discipúlelos. Haga que las personas se involucren es estudios de Biblia y que apliquen la Biblia en su vida cotidiana. Por medio de la oración, comunión y estudio de la Biblia, motívelos a crecer cada día más en Cristo.

6. Escuchar. Regularmente estas personas cargan con un dolor muy profundo. Escúchelos cuidadosa, regular y cotidianamente. Luego, ore por ellos, lea lo que dice la Escritura y como se aplica a sus vidas en esa situación particular. La Biblia esta llena de promesas para las personas solitarias, los moribundos, aquellos que se sienten desesperanzados y aquellos necesitados de amor y perdón.

7. Anímelos a dejar de escuchar la música secular, los juegos ocultistas, la lectura o películas de fantasía o ciencia ficción, sus amigos mundanos y las ideas de la Nueva Era que alimentan la mentalidad suicida.

8. Hay que invertirles tiempo. Una persona suicida que lleva gran pena por dentro es un poco confusa, y esta necesitada de cariño, es vital que se relacione con alguien que los conozca y los ame y que camine consistentemente con Dios a través de su Hijo Jesucristo.

9. Ayude al individuo a que caiga en la cuenta de qué Dios que lo ama y tiene todo para él, aun lo que esta fuera de nuestro control. Ayúdelo a confiar y a descansar en su amor.

10. Muéstrele al individuo que no solo tiene derecho a vivir, sino que tiene la obligación de vivir para Cristo.

11. Muéstrele que el suicidio es un pecado contra Dios, que se le hace un daño terrible a la familia y a los amigos, que es una cobardía y que esta basado en un concepto erróneo de que el suicidio resuelve algo. En realidad es la mentira de Satanás que dice que con eso se acaban todos los problemas; y esto en realidad no resuelve nada porque la vida que viene es mucho peor que la que se está viviendo sin Cristo.

12. Hágale saber a la persona que esta bien que uno se enoje o este triste o confundido o con dolor, y que está bien manifestar estos sentimientos apropiadamente a través de consejo y oración.

13. Anime a los familiares y amigos a involucrarse, apoyar, motivar y orar por la persona suicida.

14. Utilice la ayuda profesional de los médicos, consejeros, pastores y el apoyo de grupos cristianos en su comunidad. Trabaje conjuntamente con otras personas para ayudar a la gente que está sufriendo.

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