Como Crecer Como Líderes. Parte 2

0

crecer-liderazgoComo Crecer Como Líderes. Parte 2

«EXAMÍNAME, DIOS, Y CONOCE MI CORAZÓN; PRUÉBAME…» (Salmo 139:23)

Un famoso personaje de tebeo, decía: ‘Nos hemos encontrado con el enemigo; el enemigo somos nosotros.’ La persona más difícil de dirigir eres tú mismo. La naturaleza humana tiende a encontrar faltas en todos, excepto en uno mismo. Después de una victoria gloriosa ante Goliat, seguida de una experiencia devastadora de adulterio con Betsabé, David el salmista escribió: «Examíname, Dios, y conoce mi corazón; pruébame y conoce mis pensamientos. Ve si hay en mí camino de perversidad y guíame en el camino eterno» (Salmo 139:23-24).

Esa misma oración deberías hacerla a diario, porque todos adolecemos de dos problemas:

1) No nos vemos a nosotros mismos como los demás nos ven. Si no nos examinamos con transparencia y realismo, nunca entenderemos cuáles son nuestras debilidades. Y si no las entendemos, no podremos conducirnos debidamente. Se dice que el rey Federico el Grande de Prusia se encontró con un anciano que iba caminando, más tieso que un palo, en la dirección contraria. ‘¿Quién es usted?’ le preguntó Federico. ‘Soy un rey’, respondió el anciano. Federico se echó a reír. ‘¿Y sobre quién reina?’ Muy ufano, el anciano respondió: ‘Sobre mí mismo.’

2) Somos mucho más estrictos con los demás que con nosotros mismos. Juzgamos a otros por sus acciones, pero a nosotros por las intenciones. Cuando hacemos algo mal, lo justificamos porque estamos convencidos de que nuestros motivos eran correctos. El problema es que repetimos ese comportamiento una y otra vez, con lo cual nunca cambiaremos.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí