Mira a Dios la fuente de tu provisión

2

Dios-proveedor«MI DIOS, PUES, SUPLIRÁ TODO LO QUE OS FALTA…» (Filipenses 4:19)

Mira a Dios según la Biblia

Hay una gran diferencia entre lo que quieres y lo que necesitas. Tus deseos provienen de fuentes muy diversas. Algunos vienen de tus amigos y compañeros, otros a causa de tu edad o de la etapa de la vida en que te encuentras. De hecho, algo tan inanimado como un televisor puede influir en lo que piensas que necesitas.

En medio de todas estas influencias, Dios no te va a dar todo lo que pidas. Un buen padre no da a sus hijos todos los caprichos. No, considera cuidadosamente lo que necesitan; luego decide:

(a) qué es lo mejor para ellos.

(b) cuándo están listos para recibirlo.

¡Eso es crecer! Significa entender y aceptar que si Dios no te lo concede es porque no lo necesitas, ¡al menos por ahora! Si fuera una necesidad auténtica, Él ya te la habría suplido. Cada vez que haya una discrepancia entre lo que crees que necesitas y lo que en realidad estás recibiendo, confía en Dios, y dale gracias por saber lo que es mejor para ti.

Recuerda: debes prosperar y tener buena salud, «…así como prospera tu alma» (3 Juan:2b). Si no estás creciendo espiritualmente, eso debería ser tu primera preocupación. Todas las demás provisiones fluirán «así como prospera tu alma.»

Por eso es tan importante mantener un corazón sano hacia Dios, porque ¿de qué te serviría ganar todo el mundo si pierdes tu alma? (Ver Marcos 8:36). No estés bajo presión por las cosas, ni te quemes por ellas, ni tengas envidia, ni luches por tenerlas. Mantén la mente en lo que es correcto. Busca primero su reino, y todas estas cosas – sean las que sean – te serán añadidas (Ver Mateo 6:33). ¡Dios lo garantiza!

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí