¿Qué Es La Templanza Según La Biblia?

Hoy realice un rápido análisis de algunas palabras que de alguna manera son contrarias entre sí, cuyas actitudes y sentimientos que generan nos ayudan a mantener un equilibrio, me sorprendió lo que encontré.

No fui a demasiados detalles, simplemente busque las palabras con el buscador (valga la redundancia), de la Biblia que uso en mi computador, el resultado fue el siguiente:

Palabra Negativa	Repeticiones	Palabra Positiva	Repeticiones
Ira	346	Amor	238
Enojo	65	Sabiduría	262
Furor	115	Paciencia	49
Total	526	Total	549

Por supuesto pude haber incluido más, pero esto para mí fue suficiente, es impresionante el parecido de los números, el Señor se preocupo por mantener el equilibrio entre los detonadores de sentimientos y reacciones, con tal de que en nosotros existiera dicho equilibrio, pero también en las relaciones personales.

Pero hay algo que me llama la atención todavía más, la palabra templanza solo aparece una vez:

Gálatas 5:22-23 “Más el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley.”

El diccionario de la Real Academia Española tiene varias definiciones para la palabra templanza, pero hay una que me parece la más importante:

“Una de las cuatro virtudes cardinales, que consiste en moderar los apetitos y el uso excesivo de los sentidos, sujetándolos a la razón.”

Por otro lado, el vocablo griego del cual se traduce es enkráteia, que de acuerdo al diccionario Strong significa dominio propio y continencia además de templanza.

Por tanto encontramos que la templanza es el elemento regulador entre nuestros impulsos negativos y la razón, o más bien la que nos ayuda a controlar esos impulsos.

Pienso que existe por supuesto un equilibrio bastante claro en cuanto a la cantidad de sentimientos, deseos y pensamientos negativos que puede haber en el hombre y los opuestos, esto es los positivos, pero lo que nos va a permitir contener a los negativos es justamente el dominio propio, la templanza, de la cual somos plenamente dotados por el Señor, por ello dice:

2 Timoteo 1:7 “Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio.”

Por ello también la escritura dice:

Proverbios 16:32 “Mejor es el que tarda en airarse que el fuerte; y el que se enseñorea de su espíritu, que el que toma una ciudad.”

Proverbios 25:28 “Como ciudad derribada y sin muro es el hombre cuyo espíritu no tiene rienda.”

Dios les bendiga.