¿Dónde Está Él Gozo Del Señor?
“Regocijaos en el Señor siempre” (Filipenses 4:4)
Erma Bombeck comentó acerca de un niño pequeño que en la iglesia no paraba de sonreír a todo el mundo a su alrededor. No estaba escupiendo ni dando patadas ni destrozando nada, sólo estaba sonriendo. De pronto su madre le dio un tirón, le pegó y le dijo: “Para de sonreír, ¡estás en la iglesia!”. Y después, mientras las lágrimas le caían por las mejías, continuó: “Así está mejor”, y siguió con la alabanza. Erma prosiguió: “Se me pasó por la mente que el mundo entero está llorando y… quise abrazar a aquel niño tan triste y hablarle de mi Dios, el Dios sonriente, el Dios que debía tener mucho sentido del humor para haber creado a gente como nosotros. Después de todo, si no puedes sonreír en medio de la congregación, ¿qué otro sitio te queda?”.
Una vez, H. L. Mencken describía a un puritano como a una persona con un miedo obsesivo de que en algún lugar alguien fuera feliz. Desgraciadamente, lo mismo se puede decir de nosotros; tenemos miedo de festejar con el Señor por si acaso parecemos poco espirituales o frívolos. No es de sorprender que una niña oraba así: “Querido Dios, por favor, convierte a las personas malas en buenas – y a las buenas en ¡simpáticas!”. ¿Dónde está el gozo del Señor mencionado en Nehemías 8:10, o en textos como: “Servid al Señor con alegría; venid ante su Presencia con regocijo” (Salmo 100:2), “…se regocijen tus santos” (Salmos 132:9b), “Regocijaos en el Señor siempre” (Filipenses 4:4), “El corazón alegre es una buena medicina…” (Proverbios 17:22), “…en tu Presencia hay plenitud de gozo” (Salmos 16:11b)? Recuerda, siendo su discípulo, estás representando a Jesús. Así que, si eres feliz, muéstraselo a Dios y hazle un favor al mundo haciendo lo mismo. ¿De acuerdo?
¿Te gustó este artículo?
Suscríbete a nuestro canal de YouTube para ver videos sobre temas bíblicos.
Visita nuestros cursos bíblicos.
Se miembro de nuestro ministerio y obten todos los recursos.
Si en verdad ese Dios que nos ha cambiado; esa risa, y alegria tiene que brotar de nuestro interior. Porque dice que correran rios dentro de nosotros, los hijos dde Dios.
De acuerdo!! 😉