Como cambian las cosas de la vida

Pastor: Domingo Arias

En los tiempos de la ley, las gentes tenían conceptos muy diferentes a los que hoy día mantenemos, con las enseñanzas del Nuevo Testamento. Para los antiguos la salvación era algo físico, se trataba de la preservación de la vida material; no le era conocido el concepto de la salvación eterna y espiritual. La comunión con Dios era a través de cumplir los preceptos de la ley mosaica.

La amistad entre Jonathan y David se hizo más grande, así como el odio de Saúl para David se hizo más profundo.

Cuando David notó que su vida corría peligro, por los intentos de Saúl de hacerle daño, no le quedó más alternativa que salir huyendo del palacio del rey. Hizo esto por ser un hombre de principios sólidos a pesar de su juventud. El se había propuesto no hacerle daño a Saúl, y esto fue motivado por una sola razón “quería actuar siempre por respeto a Dios”

¿Una gran mentira o una via de escape?

Aquí es necesario recalcar, que eran los tiempos de la ley, aunque bien sabemos que la mentira es incorrecta, y como tal no era la voluntad de Dios que sus siervos la utilizaran, sin embargo; ellos la usaban en determinados momentos. Por otro lado en los diez mandamientos no aparece la prohibición de mentir, por eso creo que en los tiempos de la ley era considerada permitida, (aclaro) cuando no causaba un daño al prójimo; sino que se utilizaba con el único propósito de salvar la vida de alguien.
De camino a escaparse de Israel, David visitó al sacerdote Ahimelec, y este le preguntó ¿qué raro que vienes solo? David respondió que se trataba de un asunto secreto del rey. Le pidió al sacerdote lo que pudiera darle para alimentarse él y sus supuestos acompañantes. También le solicita al sacerdote algunas armas ¡Qué extraño que un hombre como David anduviera sin armas!
Verso 10: “Y levantándose David aquel día, huyó de la presencia de Saúl, y se fue a Aquis rey de Gat”



El loco David
¡Que peligro! David en territorio de los filisteos. Versos 11-12 “Y los siervos de Aquis le dijeron: ¿No es éste David, el rey de la tierra? ¿no es éste de quien cantaban en las danzas, diciendo: Hirió Saúl a sus miles, Y David a sus diez miles? Y David puso en su corazón estas palabras, y tuvo gran temor de Aquis rey de Gat” de esta ciudad era Goliat, el mismo que David había vencido años atrás.

David usó su sabiduría para producir un cambio radical en su vida. Verso 13 “Y cambió su manera de comportarse delante de ellos, y se fingió loco entre ellos, y escribía en las portadas de las puertas, y dejaba correr la saliva por su barba”

Su estrategia dio resultados, pues cuando lo llevaron delante del rey Aquis, éste lo declaró loco, y como tal inofensivo para su reino, su respuesta fue “Y dijo Aquis a sus siervos: He aquí, veis que este hombre es demente; ¿por qué lo habéis traído a mí? ¿Acaso me faltan locos, para que hayáis traído a éste que hiciese de loco delante de mí? ¿Había de entrar éste en mi casa?”

La vida nos enseña que debemos prepararnos para los cambios, y si no estamos preparados, entonces debemos adaptarnos a los mismos.