Hoy en dia la humanidad es cada vez menos dependiente de Dios y sus preceptos, pero no es algo nuevo. Desde siempre el hombre ha tratado de vivir sin Dios y aunque siempre los resultados son los mismos, vemos como fracaso tras fracaso el corazón del hombre natural sigue siendo terco y obstinado. Pero esto no nos sorprende ya que sabemos que Dios mismo es quién endurece sus corazones, lo que si me sorprende es como aquellos que nos denominamos HIJOS nos comportamos tan neciamente como aquellos cuya mente esta entenebrecida por el pecado.
El 19 de este mes cumplimos con mi esposa 5 meses de lo que es hasta ahora, y espero que siga siendo un feliz matrimonio, y en este tiempo “dependencia” es una palabra que toma cada vez más sentido para mi , la necesidad de estar con el otro y lo desastrosas que son las cosas cuándo el otro no está , o cuándo no tomo en cuenta el consejo de la persona que me ama de verdad, me ha llevado a pensar en lo dependiente que nos hacemos de ciertas personas o cosas y en lo cada vez más independiente que nos hacemos de Dios.
La biblia dice en Lucas 15:11-32 , que el reino de los cielos es como un hijo que fue dónde su padre , pidió lo que le correspondía , hizo su maleta y se fue lejos, así como muchos se alejan de la vida cristiana, se alejan de Dios y creen que incluso él está de acuerdo con lo que hacen. Viviendo una vida independiente del Padre, pero dependiente de otras cosas o personas. Mas el resultado es conocido, y es el mismo de siempre, el hombre alejado de Dios, el Hijo alejado del padre, de su amor , consejo, cuidados, alejado de su familia, termina deseando comer las algarrobas de los cerdos, es decir termina con absolutamente nada.
En febrero de este año un terremoto se hizo presente en gran parte de nuestro país, y cuándo un sismo de esas envergaduras se hace sentir, se corta la luz, el agua, las comunicaciones, a las bencineras se les acaba el combustible, no hay auto, no hay tren, no hay televisión, no hay Internet , se acaba la comida. Al final te quedas con absolutamente nada y el sentir que tu vida depende de algo que ya no está, de que aquellas cosas sobre las cuales construiste tu vida se han derrumbado, es realmente angustiante.
Dios demanda dependencia del Él en nuestras vidas.
La gran diferencia entre el hijo que tomó sus cosas y el que volvió es que éste último regresó sabiendo, pensando y viviendo que sin su padre la vida es un desastre, que necesitaba de una familia. Así como el cristiano necesita la comunión de los santo, que necesita comida, así como el cristiano necesita la palabra, que necesita guía, corrección, protección, sustento de todos los beneficios del Padre. ¡ Como hijos no estamos preparados para administrar nuestra vida alejados e independientes de Dios Padre!
La biblia habla de que la relación entre Cristo y la Iglesia es como la de un matrimonio, y si hay algo que he aprendido en mi corta vida matrimonial es “Dependencia”.
Dios nos ayude a depender de Él y solo de Él.
A Dios sea la gloria
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