Se han abierto las puertas del hades y una horda de demonios han salido por el mundo con el propósito de destruir a la Iglesia del Señor, la esposa del Cordero. Esta jauría de lobos rapaces se auto denominan “apóstoles y profetas”, y marchan en manadas o “redes apostólicas”, como ellos mismo les denominan.El arrebatamiento de la Iglesia del Señor es inminente, “porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero. Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor” (1ª Ts. 4:16-17).
Sabiendo Satanás que se le acaba el tiempo, ha organizado a estos engendros de las tinieblas o “nuevos apóstoles” para echar los fundamentos de la pervertida iglesia apostata que está esperando la abominable aparición del “inicuo cuyo advenimiento es por obra de Satanás, con gran poder y señales y prodigios mentirosos” (2ª Ts. 2:9). Se dicen portadores de una “palabra fresca”, ya que según uno de los principales de ésta cáfila de hampones, Rony Chaves, “traen revelación a la iglesia, como en los días primeros”. Agrega, “ellos traerán la reforma apostólica del nuevo milenio”; incluso se adjudican la hereje autoridad de “establecer doctrinas”, y de ser “fundadores”; es decir, “ellos ponen el fundamento principal en la casa de Dios junto a los profetas del Altísimo”.
No son apóstoles de Jesucristo y sus secuaces, los auto denominados profetas, son hechiceros que, por medio del ocultismo, buscan engañar a los escogidos de Dios y arrastrar a los indoctos a las llamas del infierno.
Es increíble que miles de personas, que caminaban en la verdad, hoy sigan a estos pervertidos que después de dos mil años, traen una “nueva revelación”; que no es más que la vieja y asquerosa mentira que la serpiente antigua introdujo en el paraíso. Y así como la “nueva revelación” que Satanás trajo a Eva hundió a la humanidad en el pecado y en la más horrenda de las tinieblas, así estos engendros siembran la repulsiva cizaña, que produce harina venenosa, en la casa de Dios, con la finalidad de arrastrar a la humanidad a la condenación eterna.
Estos “apóstoles reformadores” establecerán con gran poder y milagros mentirosos, en el nuevo milenio, el culto a las tinieblas, la adoración a Satanás mediante el establecimiento de “doctrinas de demonios”; como dicen las Sagradas Escrituras: “Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios” (1ª Ti. 4:1). Pero estos esbirros de la oscuridad quieren echar los fundamentos “sobre” la Casa de Dios. Hablan de “conquista” cuando lo único que persiguen es “usurpar” y sembrar su veneno en terreno ajeno.
Más, un verdadero apóstol (Pablo), dice: “Y de esta manera me esforcé a predicar el evangelio, no donde Cristo ya hubiese sido nombrado, para no edificar sobre fundamento ajeno” (Ro. 15:20). Y de ésta manera, vemos a estos farsantes “innovadores”, “reformistas”, que con su nueva revelación, quieren establecer “nuevas doctrinas” y colocar “nuevos fundamentos”… ¡Abominables! Lo que están echando es el fundamento de la gran ramera, la madre de todas las abominaciones.
Dice el Espíritu Santo: “Así que ya no sois extranjeros ni advenedizos, sino conciudadanos de los santos, y miembros de la familia de Dios, edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo la principal piedra del ángulo Jesucristo mismo, en quien todo el edificio, bien coordinado, va creciendo para ser un templo santo en el Señor; en quien vosotros también sois juntamente edificados para morada de Dios en el Espíritu”.
Sin embargo, estos obreros fraudulentos ahora, después de dos mil años, recién echarán los fundamentos. El solo pensamiento es ¡ridículo!. La Iglesia de Dios está a punto de ser arrebatada como obra consumada, terminada y perfecta, lavada y redimida por la preciosísima Sangre del Cordero de Dios, y edificada sobre el fundamento de apóstoles y profetas, a saber LA SANTA BIBLIA.
Hermanos en el Señor Jesucristo, estos “apóstoles fundadores”, sin lugar a dudas echaran las bases de la Sinagoga del Diablo, y como pregoneros del anticristo, quieren contaminar a la verdadera Iglesia del Señor con esta asquerosa seudo “nueva” revelación, buscando “reformar” nuestras formas de cultos introduciendo lo “mejor” del apostata (bailes, payasos, mimos, teatro, festivales, conciertos, “seudo ministros de alabanza”, “seudo salmistas” y otras artes compuestas); y, lo mas nauseabundo, establecer “nuevas doctrinas” que son doctrinas de demonios (restauración del ministerio de la mujer (¿?), positivismo, pragmatismo, dominionismo, visualización, la fe en la fe, psicología secular, prosperidad material, pactos para obtener dinero, y otras basuras similares) que se contradicen con las doctrinas Bíblicas establecidas por el Espíritu Santo en el canon bíblico.
Tal es su osadía que los mayores “líderes” de esta corriente satánica han declarado “abierto” el canon, ignorando voluntariamente lo prescrito por Dios, que dice: “Yo testifico a todo aquel que oye las palabras de la profecía de este libro: Si alguno añadiere a estas cosas, Dios traerá sobre él las plagas que están escritas en este libro. Y si alguno quitare de las palabras del libro de esta profecía, Dios quitará su parte del libro de la vida, y de la santa ciudad y de las cosas que están escritas en este libro” (Ap. 22:18-19)
“¡Ay de ellos! porque han seguido el camino de Caín, y se lanzaron por lucro en el error de Balaam, y perecieron en la contradicción de Coré. Estos son manchas en vuestros ágapes, que comiendo impúdicamente con vosotros se apacientan a sí mismos; nubes sin agua, llevadas de acá para allá por los vientos; árboles otoñales, sin fruto, dos veces muertos y desarraigados; fieras ondas del mar, que espuman su propia vergüenza; estrellas errantes, para las cuales está reservada eternamente la oscuridad de las tinieblas. De éstos también profetizó Enoc, séptimo desde Adán, diciendo: He aquí, vino el Señor con sus santas decenas de millares, para hacer juicio contra todos, y dejar convictos a todos los impíos de todas sus obras impías que han hecho impíamente, y de todas las cosas duras que los pecadores impíos han hablado contra él. Estos son murmuradores, querellosos, que andan según sus propios deseos, cuya boca habla cosas infladas, adulando a las personas para sacar provecho” (Judas:1:11-16)
“Pero vosotros, amados, tened memoria de las palabras que antes fueron dichas por los apóstoles de nuestro Señor Jesucristo; los que os decían: En el postrer tiempo habrá burladores, que andarán según sus malvados deseos. Estos son los que causan divisiones; los sensuales, que no tienen al Espíritu. Pero vosotros, amados, edificándoos sobre vuestra santísima fe, orando en el Espíritu Santo, conservaos en el amor de Dios, esperando la misericordia de nuestro Señor Jesucristo para vida eterna” (Judas 1:17-21)
Mas, no temamos, sino que recordemos a nuestro Señor y Salvador Jesucristo que dice de sí mismo: “sobre esta roca edificaré mi iglesia; y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella” (Mt. 16:18)
Amados hermanos, es necesarios que contendamos ardientemente por la fe que ha sido dada una vez a los santos, “no temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia. He aquí que todos los que se enojan contra ti serán avergonzados y confundidos; serán como nada y perecerán los que contienden contigo” (Isaías 41:10-11)
PREPARADO POR LOS JÓVENES DE LA IGLESIA CENTRAL DIOS PROVEERÁ UBICADA EN LA CALLE OBISPO CARLOS SAN MARTÍN PULGAR #1671, SANTIAGO DE CHILE
http://soloporgracia.wordpress.com/2009/01/03/el-ataque-final-a-la-iglesia-del-senor/
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