El Primer Amor

Hay veces q cuando descubres algo que te apasiona, te asombra, te satisface… tu corazón estalla por dentro y algo nuevo empieza a nacer en ti. Pensad en aquellas personas, aquellas cosas o experiencias que os hayan hecho sentiros alguna vez así. Ahora pensad en la que ha sido más importante para vosotros de todas las que hayáis vivido.

Yo lo pienso… y ojalá vuelva algún día. Desearía vivir siempre como en aquel tiempo.

Después de haber salido de un estado depresivo, confuso y lleno de dudas, Dios me levantó de una forma increíble. Nunca hubiese entendido nada si Él no me lo hubiese enseñado, y para eso tuve que pasar por ese periodo, que al principio parecía que sería interminable, ya que nadie, absolutamente nadie pudo ayudarme: ni mis padres, hermanos, ancianos, hermanos, psicólogos(mi abuelo)… solamente Él. Un día explicaré con más detalle esa experiencia.

La cuestión es que después de esa experiencia vivida, con unos 18 años, el Señor me sacó de aquella vida aparentemente buena, pero que no daba fruto, ese fruto que viene de Él. El hambre y la sed que tenía por YHVH era inmensa. No sólo era consciente de que Dios me había salvado, sino que estaba aquí, siempre conmigo, y tenía grandes planes para mí en esta vida terrenal; no tenía que esperar a estar en el cielo para sentir su presencia, tenía su Espíritu Santo morando en mi. Entendí que el Espíritu Santo no es solamente una ‘marca’ que Elohim te pone cuando le aceptas, es Él viviendo en ti, y te utiliza, te instruye, te manda, te consuela, te habla… ¡Maravilloso!

Pero para que Su Espíritu se mueva con libertad debemos dejarle, debemos de tener fe y no debemos limitarlo. En el momento que le pedí que quería conocerlo más, que no me importaba el precio, tuve que renunciar a muchas cosas, borrar muchos prejuicios y tuve que dejar de depender de los hombres para depender de Dios. Lamentablemente, no todo hijo Dios está dispuesto a ‘lanzarse a la piscina y sumergirse en Él por completo’. Sí, podemos estar dispuestos a hacer muchas cosas por Él, pero a Él no le agradan los sacrificios y holocaustos si no tiene tu corazón quebrantado- salmo 51-, tu vida entera en sus manos, y repito, sin importar el precio.

Poco a poco Dios fue moldeando mi corazón, mi fe iba en aumento, había cosas que no entendía, pero las experiencias con Él eran más fuertes y había muchísimas más razones para lanzarme en sus brazos que para dejar que las dudas me ahogaran… Ese tiempo fue maravilloso. Cuando acepté a Jesús como mi único Salvador (con 6 años aproximadamente) también fue maravilloso, sentí paz, pero me faltaba algo y era entregarme a Él por completo. Pero eso no fue algo que me enseñaron en aquel entonces, fue algo que tuve que descubrir yo con Dios.

Un día, empecé a dudar, pensé si todo esto que estaba viviendo era real o era una emoción. Y poco a poco me fui apagando… ¿una emoción? ¡Como pude pensar eso¡ Aún no me lo explico. Ahora estoy segura que eso no fue una emoción solamente, es verdad, vivía entusiasmada por Elohim, pero ese entusiasmo era una consecuencia de vivir sumergida en Él. Que ingenua fui. ‘Emoción’… ¿¿que malo hay en sentir?? ¿Acaso las emociones no las ha creado Dios? Un hombre de Dios llamado Norman Bowman me dijo que nuestro cerebro se divide en dos: una parte corresponde a las emociones, sentimientos, imaginación… y la otra a la razón, la lógica… Eso me demuestra que el Señor da la misma importancia tanto a una cosa como a la otra. Simplemente debemos buscar un equilibrio. Una persona sana muestra visiblemente sus sentimientos… no los oculta, si está gozosa, ríe, si está triste, llora… Me he criado en un ambiente cristiano en el que la mayoría de la gente teme expresar públicamente sus sentimientos, sus sentimientos por Él. Qué fácil puede resultar a veces saltar de alegría o dar un grito de júbilo porque el equipo de fútbol tal ha marcado un gol, o fulanito cumple años, etc. y tan difícil saltar de alegría o dar un grito de júbilo por Adonai. En las iglesias hay mucha influencia de la ‘mentalidad griega’ Se separa el cuerpo del alma y del espíritu. Pero Elohim nos enseña que somos un solo ser y cada parte que Él ha creado es importante. Además, Él no nos pide sólo nuestro cuerpo, o nuestra mente, o nuestro corazón. Nos pide absolutamente todo. Y en ese momento todo mi ser estaba en sus manos.- Deuteronomio 6:4-

La duda me hizo alejarme de Él. Y me resultó difícil volver al ‘Primer Amor’. Pero cada día Él me llama, y te llama a que nos lancemos a sus brazos, a que nos sumerjamos en su Espíritu, sin importar el precio. Él nos ama y nos conoce más que nadie y tiene preparado lo mejor para ti y para mi. ¡Amén! 😀

Salmo 42:
1. Como el ciervo brama por las corrientes de agua, así, oh Elohim, te anhela el alma mía.
2. Mi alma tiene sed de Dios, del Dios vivo. ¿Cuándo entraré y veré el rostro de Dios?
3. Mis lágrimas fueron mi pan de de día y de noche, mientras todo el día me dicen: ¿Dónde está tu Dios?
4. Me acuerdo de estas cosas, y derramo mi alma dentro de mí: De cómo marchaba con la multitud y los conducía hasta la casa de Dios, entre voces de júbilo y de acción de gracias de la multitud en fiesta solemne.
5. ¿Por qué te abates, oh alma mía, y te turbas dentro de mí? Espera en Elohim, porque aún he de alabarlo: ¡Salvación mía y Dios mío!
6. Mi alma está abatida dentro de mí, por tanto me acordaré de ti desde la tierra del Jordán, y de los hermonitas, del monte Mitsar.
7. Un abismo llama a otro abismo con el rumor de sus cascadas, todas tus ondas y olas pasaron sobre mí.
8. De día YHVH enviará su misericordia, y de noche su cántico estará conmigo. Oración al Dios de mi vida:
9. Digo a ‘El: Roca mía, ¿por qué te has olvidado de mi? ¿Por qué ando enlutado por la opresión del enemigo?
10. Como quien quebranta mis huesos, mis enemigos me afrentan, cada día: ¿Dónde está tu Dios?
11. ¿Por qué te abates alma mía, y te turbas dentro de mí? Espera en Elohim, porque aún he de alabarlo: ¡Salvación mía y Dios mío!

Selah


Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.