La verdad oculta del negocio de las armas

Amnistía Internacional, Oxfam y la Red Internacional de Acción Contra las Armas Ligeras son testigos del costo humano que generan los abusos producidos por las armas, y ellos trabajan en apoyo a un control más preciso del armamento convencional.

Sin un control justo, las armas seguirán acelerando los conflictos violentos, la delincuencia, la represión estatal y la violencia doméstica. A salvo que los gobiernos procedan para detener la propagación de las armas, se derrocharán más vidas, se realizarán más violaciones de los derechos humanos y se le negará a más individuos la oportunidad de una vida digna.

El contexto es crítico. Corresponde que se tomen medidas urgentes. Los gobiernos están obligados a emprender acciones en todos los niveles para así poner fin a la angustia que excita el descontrol en el comercio de armas.

Según Amnistía Internacional, 640 millones de armas circulan por el mundo. Cada año se fabrican 8 millones más y 16.000 millones de balas: 2 por cada hombre, mujer, niña y niño del planeta. Según IntermonOxfam, el comercio de municiones para armas pequeñas alcanza los 4.300 millones de dólares (3.461 millones de euros) por año, mientras que el comercio de armas de fuego y armas ligeras asciende a 2.680 millones de dólares (2.157 millones de euros).

Hasta ahora, las negociaciones en el seno de Naciones Unidas para poner freno legal a esta imparable escalada han resultado infructuosas. Estados Unidos, líder mundial absoluto en exportación de armamento, ha mantenido una postura ambigua respecto a la firma de un tratado internacional, apoyando la iniciativa en un principio para más tarde forzar el aplazamiento de la firma. Otros países que ponen trabas a la aprobación definitiva de la regulación son China e India, que lidera el ranking de importadores.

Mientras los Estados deliberan y la comunidad internacional intenta superar las reticencias de las grandes potencias, la industria armamentística continúa explotando un lucrativo negocio que alimenta la violencia y los conflictos en un planeta con el dedo en el gatillo.


Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.