Nueve semanas y media en el espacio Parte II

Después de completar el entrenamiento en el comando de entrenamiento aéreo naval de los estados unidos y recibir mis alas en 1960, fui asignado a VMA-224, como piloto de ataque. Después serví en Iwakuni, Japón.

Un vuelo en el espacio en 1973 fue una de mis primeras experiencias. Duré once horas caminando en el espacio durante este vuelo. Luego, en Marzo de 1982 yo durè ocho días con C. Gordon Fullerton en el tercer vuelo orbital del transbordador espacial Columbia. En estos dos vuelos yo duré nueve semanas y medias en el espacio.

También estuve en la tripulación de respaldo del proyecto de prueba ruso-estadounidense Apollo-Soyuz en 1975. Yo viví en la Unión Soviética por un par de meses, aprendí su lenguaje y trabajé con ellos por dos años durante 1973-1975. Luego fue enviado a representar a los Estados Unidos en la República popular de China y otras naciones.

Durante todo este tiempo yo fui consciente de la guía de Dios y de su presencia constante. Mientras yo viví en la unión soviética leí los salmos y proverbios para mis devocionales diarios. Busqué todos los versículos relacionados con el universo y la tierra.  Muchos de ellos exaltan el universo de Dios y demuestran que le pertenece. Pero uno de los más grandes pasajes se encuentran en el Salmo 19:1-6 «Los cielos cuentan la gloria de Dios, y el firmamento anuncia la obra de sus manos. Un día emite palabra a otro día, Y una noche a otra noche declara sabiduría. No hay lenguaje, ni palabras, Ni es oída su voz. Por toda la tierra salió su voz, Y hasta el extremo del mundo sus palabras. En ellos puso tabernáculo para el sol; Y éste, como esposo que sale de su tálamo, Se alegra cual gigante para correr el camino. De un extremo de los cielos es su salida, Y su curso hasta el término de ellos; Y nada hay que se esconda de su calor»

Nunca entenderemos todo acerca del universo. Hay suficientes galaxias para que cada persona en el mundo tome dos o tres de ellas personalmente., Aun así el universo completo opera en perfecta armonía y orden, como si fuera un reloj calibrado. Sólo un Dios todopoderoso podría colocar todo junto y permitir que funcione tan perfectamente.

A medida que aprendemos más del universo, comenzamos a conocer más a su creador y a apreciarlo en gran manera. Mira en su palabra, la biblia. Mira como habla a su creación, como se deleita en ella y como le gustaría que nosotros conociéramos más acerca de ella.

Continuará…