INTRODUCCIÓN: Al ofrecer un billete de $20.000, todos lo quieren… después de arrugarlo, todos lo quieren… aunque lo pises, todos lo quieren… el billete sigue teniendo el mismo valor… a veces en la vida, somos tirados, arrugados y pisoteados por diferentes circunstancias, y nos sentimos como si no tuviéramos valor. Pero no importa lo que ha pasado o pasará, nunca perderás tu valor ante los ojos de Dios, él te diseñó para un gran plan…
Desarrollo:
I. TODOS NACEMOS CON UN PROPÓSITO Y SOMOS UBICADOS POR DIOS:
A. Ejemplo: el profeta Jeremías, Jer. 1:4-8.
B. Dios es quien llama y quien coloca.
1. Jer. 1: 15-17…
2. 1 Cor. 12: 27-28…
Nota: “y a unos puso Dios en la iglesia”, dice en otras versiones: LBCastillana
1. “en la iglesia, Dios ha encomendado diferentes funciones” LBC.
2. “según la disposición de Diosen la Iglesia:” (N-C).
3. “En la iglesia, Dios le dio una función a cada una de las partes”.
Entonces es Dios quien dispone todas las cosas, porque es su Iglesia.
II. DIOS UTILIZA DIFERENTES MÉTODOS PARA LLAMARNOS:
A. Las visiones: ocurren cuando Dios le permite al hombre ver en el mundo espiritual. Ej. Hch. 9:8-12.
Nota: el contexto es importante, sin enmarcar a Dios, vemos: ayuno, oración, Propósito de la visión, Dios le hablo a los dos… ya Dios se lo había dicho a Pablo…
Nota: es muy importante el equilibrio, la Biblia también habla de los falsos ministros (el diablo falsifica visiones, revelaciones y profecías). Conocer estos es importante, pues Dios ha prometido un derramar del Espíritu Santo para los postreros días…
B. Las revelaciones: suceden cuando Dios declara lo que nos era desconocido. Ej. 1 Cor. 2:7,9-10.
C. Un impulso divino en tu interior.
Nota: es similar a lo que experimentó Jeremías cuando en medio de dificultades por servir a Dios (burlas, calumnias, menosprecio…), no quería seguir adelante y dijo: “no me acordaré más de él, ni hablaré más en su nombre; no obstante, había en mi corazón como un fuego ardiente metido en mis huesos; traté de sufrirlo (soportarlo, apagarlo, contenerlo, resistirlo) y no pude”. Jer. 20:9.
D. La profecía confirma el llamado ya recibido en el espíritu humano.
Nota: la profecía no da ministerios, los confirma.
III. EL TESTIMONIO DIVINO EN EL LLAMADO:
A. El Espíritu Santo testifica a nuestro espíritu, (intuición interna).
Nota: Rom. 8:16, dice: “el Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu, de que somos hijos de Dios”. Leamos: Hch. 20:22-24…
B. Nada te apasiona más que cumplir lo que Dios ha puesto en tu corazón.
C. Dios imparte una naturaleza y una unción acorde al llamado.
Nota: por ej. el apóstol Pablo, organizaba la persecución contra la Iglesia del Señor en diferentes ciudades, era su naturaleza… luego Dios lo llama y le imparte además una unción apostólica, para establecer iglesias en diferentes ciudades y países…
D. Dios da testimonio a las autoridades de la Iglesia y a la Iglesia misma. Ej. Bernabé, Hch. 11:22-24.
Nota: primero fue miembro de la iglesia de Jerusalén, luego un servidor allí, luego fue enviado (Dios y apóstoles) como pastor a la iglesia de Antioquía y después es enviado (Dios y el cuerpo de profetas y maestros) como apóstol junto con Pablo…
Conclusión: no importa porque momento de tu vida estás pasando, ni cuantas dudas a tu mente han llegado, es necesario escuchar el testimonio del Espíritu Santo, y decirle al Señor “aquí estoy, has como tú quieras” fuiste desinado para un gran propósito… deja que el Espíritu Santo te dé testimonio…
(Ptor Gonzalo Sanabria).
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