[Grafica Cristiana] EL OCULTISMO EN NUESTROS DIAS

EL OCULTISMO EN NUESTROS DIAS

Originalmente, la palabra «Ocultismo» viene del latín occultus y se refiere a cosas escondidas, secretas y operaciones que tienen que ver con lo sobrenatural, con la presencia de fuerzas demoníacas.

Actualmente el Ocultismo abarca gran cantidad de formas, tales como: astrología, varita mágica, tabla ouija, adivinación, cirugía psíquica, satanismo, espiritismo, magia blanca y negra, psicometría, parapsicología, hipnotismo, brujería, superstición. Estos son algunos de los métodos que Satanás utiliza en contra del hombre.

Analicemos brevemente los métodos principales y de mayor influencia:

LA ASTROLOGÍA

Para empezar es necesario diferenciar entre Astronomía y Astrología. La primera es la ciencia que estudia las características del universo y sus misterios, mientras que la Astrología da por sentado que las estrellas y los planetas tienen una influencia directa sobre las personas y los hechos. Es decir que el esquema de vida de cualquier persona puede ser trazado de acuerdo a la posición de las estrellas y planetas en el momento de su nacimiento.

No podemos negar que los cuerpos celestes ejercen cierta influencia sobre nuestro planeta. Por ejemplo, el efecto de la luna en las mareas y la innegable importancia del sol en el curso de la vida. Pero de esto a suponer que los astros intervienen en los asuntos humanos, determinando el comportamiento y guiando su destine, hay una distancia abismal y un embuste astrológico.

¿Que pasaría si esta pretensión fuera cierta?. Primero que la influencia de los astros eliminaría las leyes de la herencia, por lo que los hijos en vez de tener características de sus padres, ostentarían las características de quienes nacieron bajo el mismo signo zodiacal y en una misma área geográfica; además, estaríamos bajo un fatalismo irreversible que anularía la responsabilidad de nuestros actos (asesinato, por ejemplo), pudiendo culpar a las estrellas de cualquier hecho. Al fin y al cabo estamos «predeterminados».

TABLA OUIJA

La palabra «ouija» proviene de las palabras para decir «sí'», en francos (oui) y en alemán (ja) respectivamente. El tablero ouija es una tabla que tiene impresos en la superficie del cero al nueve, las letras del alfabeto y las palabras adiós, sí y no. Sobre esta se coloca una ficha plástica en forma de gota. Dos jugadores se ponen frente a frente con el tablero en sus piernas y sus dedos descansan levemente sobre la Ficha, dejando que esta se mueva libremente sobre el tablero.

Cuando se hace una pregunta, la ficha recorre el alfabeto indicando una respuesta determinada. Todas las personas que han estado en contacto con este «juego», afirman haber preguntado al tablero cual es su fuente de información y haber recibido respuestas como: «Satanás, Lucifer, demonios». La ouija es un instrumento de adivinación muy popular en nuestro medio, un instrumento satánico para atrapar a las personas en las garras del ocultismo. El cristiano sabio nunca buscara este «juego», ni siquiera por curiosidad, pues cualquier intento de ponerse en contacto con fuerzas espirituales, cae en los peligros de la actividad demoníaca.

ESPIRITISMO

Viene del latín spiritus (espíritu). Se la conoce también como necromancia (culto a los muertos). Se basa en la idea de que los espíritus de los muertos tienen la facultad de comunicarse con los seres humanos a través de médiums (personas cuyo cuerpo es utilizado como canal de comunicación con los espíritus). Las diferentes formas de espiritismo incluyen además visiones de espíritus, movimientos de mesas y otros objetos, escritura automática, materializaciones (supuestas apariciones de muertos), levitación, aparición y desaparición de objetos en habitaciones cerradas, entre otros…

¡Que diferencia entre esto y la vida que ofrece Jesucristo!. Solo basta ver Juan 10:10: «El ladrón no viene si no para hurtar y matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia»; Mateo 22:32: «Yo soy el Dios de Abraham, el Dios de Isaac y el Dios de Jacob. Dios no es Dios de muertos, sino de vivos». Como cristianos no necesitamos la decepcionante comunicación con los «muertos», teniendo el privilegio de comunicarnos con el Dios vivo. Jesús si nos ofrece una esperanza cierta: «Desecha las fábulas profanas y de viejas. Ejercítate para la piedad porque el ejercicio corporal para poco es provechoso, pero la piedad para todo aprovecha» Timoteo 4:7,8.

SATANISMO

Es la adoración a Satanás de practicantes que intentan establecer un contacto permanente con él a cambio de poderes mágicos o sobrenaturales temporales. Los que están envueltos en estas practicas niegan rotundamente la fe en Cristo, la confiabilidad de la Biblia y, sin embargo, tienen al Lucifer de las Escrituras como su dios. Quienes están involucrados en el satanismo son personas infelices y vacías, pues al final pierden todo mientras las fuerzas satánicas ganan. Para los simpatizantes de Satán, este es mas un símbolo que una realidad concreta. Su interés se basa en los placeres carnales y mundanos (materialismo y hedonismo). I Juan 4.4 nos había de que Satanás no es todopoderoso y que esta vencido por la sangre de Cristo en la cruz.

HIPNOSIS

Es una técnica que produce en la persona un estado de inconsciencia a través de la concentración mental. Es decir, un estado artificial de sueno o de disminución de la conciencia. En este estado, la memoria y la percepción del yo pueden alterarse por efectos de la sugestión y tener, incluso, consecuencias posteriores (posthipnosis), luego de haber despertado.

Un cristiano debe tener mucho discernimiento en someterse al hipnotismo medico o psiquiátrico, y nunca debe prestarse al ocultista. La mente humana no es un juguete y no debemos permitir que nuestra mente quede al control de otra persona. Un versículo que nos ayuda a ver mejor este tema es 1ª Corintios 6:12: «Todas las cosas me son licitas, mas no todas convienen; todas las cosas me son licitas, mas yo no me dejare dominar de ninguna».

MAGIA NEGRA Y BLANCA

La magia negra tiene como fuente el contacto directo con el diablo y sus demonios. Quienes la practican hacen, en la mayoría de los casos, un pacto de sangre con el diablo. En esta magia se pone de manifiesto la naturaleza humana en odios, venganza, miedo… La magia blanca, dicen sus practicantes, lo hacen con la ayuda de fuerzas benéficas. Incluso se hacen llamar cristianos y nombran la Biblia usando textos equivocadamente.

Dios prohíbe todas las formas de magia porque, a pesar de que estas ofrecen todo lo posible como: amor, venganza, riqueza, sanidad, lluvia, buenas cosechas, protección, etc., es obvio que esta tiene su fuente en el mal y, por tanto, sus consecuencias son igualmente desastrosas.

BRUJERIA

A través de la brujería se pueden manipular diferentes objetos y sustancias para obtener resultados sobrenaturales. También se usa para la buena suerte, salud, fortuna y amor. Para practicar la brujería, los brujos deben conocer y dominar la magia. Una bruja tiene pacto con el diablo y, por medio de este, puede hacer cosas extraordinarias. La Biblia, desde el Antiguo Testamento condena esta practica por todos sus peligros y porque es abominación para nuestro. Señor. Levítico 19:26, 31 dice: «No comeréis cosa alguna con sangre. No seréis agoreros, ni adivinos». Vea también Éxodo 22:18; 2ª Reyes 17:17 y Gálatas 5:19-21.

Lo cierto es que la prohibición bíblica para las practicas antes mencionadas del ocultismo es clara: Deuteronomio 18:10-12: «No sea hallado en ti quien haga pasar a su hijo o a su hija por el fuego, ni quien practique adivinación, ni agorero, ni sortílego, ni hechicero, ni encantador, ni adivino, ni mago, ni quien consulte a los muertos, porque es abominación para con Jehová cualquiera que hace estas cosas, y por estas abominaciones Jehová tu Dios echa estas naciones de delante de ti». Ver también: 1ª Samuel 28; Levítico 19:31; 20:27, 31; 1ª Crónicas 10:13; Jeremías 29:8.

Nosotros, como cristianos, no estamos llamados a involucrarnos en todos estos fenómenos ocultistas. No debemos olvidar que Satanás ya ha sido derrotado por Cristo (2ª Ts. 2:8: «Y entonces se manifestara aquel inicuo, a quien el Señor matara con el espíritu de su boca, y destruirá con el resplandor de su venida») y que tenemos victoria en su nombre. Debemos conocer las estrategias de Satanás sin caer en el engaño de ellas. Es importante también recordar que tenemos una armadura de Dios disponible para contrarrestar las tentaciones y ataques del enemigo (Efesios 6:18-20).

Tomado de la Revista «La Biblia Dice…» Edision Especial Agosto 1997 p. 16, 17, 18