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¿Es amor verdadero lo que sientes? ¿O solo una ilusión?

¿Es amor o ilusión? ¿Que es lo que Sientes?

Los vemos por todas partes, es inevitable tener que encontrarse con alguno de ellos. Seguramente tú también te has chocado con alguna de estas parejas, aunque espero que no sea tu caso.

¿A quienes me refiero? A las parejas de enamorados que vemos en la calle o también en su Playa de Estacionamiento: Los parques.

Los hay de todo tipo: enamorados con complejo de «aplanadora», son aquellos que solo quieren estar encima de su enamorada y la andan apretando, arrinconando y apachurrando contra los postes y árboles.

También los hay tipo «siameses», aquellos que andan siempre abrazados o tomados de la mano para todos lados y no se sueltan salvo en el caso que los separe una bomba atómica. ¡Y como pasar desapercibido frente a los novios de marca «ElectroLux» que mandan unos besos tipo aspiradora a sus chicas y las dejan secas hasta que queden sin saliva como si fueran pepa de mango!

¿Y qué tiene que ver todo eso con el tema de Amor o Ilusión?

Simplemente que en muchas oportunidades, me he preguntado ¿Seguirán así cuando ya tengan 5 años de casados o 10?

Cuando veo a una parejita de jóvenes solteros que caminan al mismo nivel, abrazados uno del otro no puedo evitar recordar a aquellos esposos que, ahora ya casados, caminan por la calle con su esposa como si fuera un desfile militar: él adelante y atrás a 5 metros, su amada y querida Teniente ¡Eso les pasa por casarse con un comandante!

¿Y dónde está el amor que algún día se dijeron tener y que los hacía caminar juntos -chicle de por medio- a todos lados sin separarse?

¿Será que ahora tienen vergüenza que alguien los vea con su esposa y no les hagan caso?

Claro que vale la pena preguntar ¿Era amor o ilusión? Porque de esto depende cómo vivan en su futuro. ¿A qué pareja no le gustaría conservar vivo el fuego de su amor y mantener una vida como de enamorados, aún siendo ya casados?

¿Quién podrá decirnos, sin errores ni equivocaciones, cuál es la correcta definición del amor?

Muchos han recurrido a los brujos o a los chamanes para hacerse un amarre eterno, pero si ellos fueran sinceros reconocerían que lo único que saben amarrar son los pasadores de sus zapatos ¿Por qué?

Porque son los primeros que no han sabido conservar el amor de una mujer y la mayoría ya ha tenido más de una esposa. Si fuera cierto lo del «amarre» hubieran comenzado por ellos mismos.

¿Quién nos podrá decir cómo es el verdadero amor? ¿Los horóscopos? ¿Los que leen cartas? ¿Los adivinos de la radio o la televisión? ¿Los psiquiatras o psicólogos? ¡Para poder escucharlos queremos que ellos nos demuestren en sus vidas que han logrado triunfar en esta área, porque un buen ejemplo vale más que mil palabras!

Lamentablemente, no podemos escucharlos porque sus acciones gritan más fuerte que lo que nos dicen.

Para conocer el amor en su expresión más grande, pura, bella, sincera y completa, nos remitiremos a un libro que a muchos les avergüenza leerlo -y francamente no se porqué- pero que contiene grandes enseñanzas y consejos para sus atrevidos y valientes lectores. Este libro es la Santa Biblia, más conocido como la palabra de Dios

¡Quién más indicado que Dios para enseñarnos cómo es el verdadero amor y cuáles son sus características, si sabemos justamente que Dios es amor!

En el libro de 1º de Corintios Capítulo 13, podemos encontrar la definición más exacta sobre lo que es el verdadero amor. Se encuentra entre los versículos 4 al 8 y dice así:

«El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece; no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor; no se goza de la injusticia, más se goza de la verdad. Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta. El amor nunca deja de ser».

Joven y señorita ¿Quieres ser feliz en la vida y gozar hasta la muerte con la persona que amas?

Entonces, conoceremos paso a paso cada una de las características mencionadas sobre el verdadero amor para que así podamos tomar las decisiones correctas y sea cual fuere la situación actual en la que te encuentras, decídete a poner en práctica lo que aprenderás ahora.

Si estás solo y sin pareja, entonces no te apures en aceptar a alguien hasta que lo conozcas mejor; y si ya estás manteniendo una relación sentimental con alguien y descubres que no es amor, más vale que termines ahora que estás a tiempo antes que después sea demasiado tarde.

Más vale llorar unos días en la vida terminando una relación equivocada, antes que llorar muchos años en la vida, tan solo por haberse dejado llevar por la ilusión, capricho o pasión ¡Lo que aprenderás es solo para valientes que están dispuestos a todo para ser felices, triunfadores y paras todos los Jóvenes de Valor que desean agradar a Dios!

Es muy fácil darse cuenta si lo que sienten por ti es un amor verdadero que los hará felices hasta la muerte y que nadie podrá destruir, o solo es una ilusión que después terminará.

Las ilusiones son como las olas del mar. Un momento vienen, pero después, pronto se van. En cambio el verdadero amor es estable y permanente.

Para poder conocer si te aman de verdad, solo tienes que colocar el nombre de tu pareja en el lugar donde está la palabra «amor» dentro del texto donde hemos leído. Supongamos que eres una señorita y que tu novio se llama «Ricardo». Entonces quedaría de la siguiente manera:

«Ricardo es sufrido, es benigno; Ricardo no tiene envidia, Ricardo no es jactancioso, no se envanece; no hace nada indebido, no busca lo suyo».

O si eres un joven y tu novia se llama Gisela, también podrías remplazarlo y quedaría así:

«Gisela no se irrita, no guarda rencor; no se goza de la injusticia, más se goza de la verdad. Gisela todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta. Gisela nunca deja de ser».

Claro que el mismo ejemplo podrías aplicar si tu novio se llama Pancracio, Filomeno o Tiburcio. O si tu novia se llama Anastasia, Anacleta o Federica. Lo que importa es que reflexiones si será cierto que tu pareja tiene esas cualidades por ti o al contrario, está bien lejos de reflejarlas.

Para saber si te aman de verdad solo pregúntate: ¿Será cierto que Ricardo es sufrido o mas bien le gusta hacerme sufrir? ¿Será cierto que es bondadoso (benigno) conmigo o me trata mal? ¿Será cierto que el no tiene envidia si me ve conversar con alguien o me jalonea y se enoja conmigo? ¿Ricardo no hace nada indebido conmigo o me hace malas proposiciones o insinuaciones faltándome el respeto y haciéndome sentir mal?

Y si eres hombre, solo pregúntate, según el ejemplo: ¿Es verdad que Gisela no se irrita y no se enoja conmigo, o al contrario, se para molestando y pone cara de perro Buldog cada vez que discutimos?

¿Es verdad que ella no guarda rencor o cuando discutimos me deja de hablar un mes? ¿Es verdad que ella se goza de la verdad o me ha mentido muchas veces? ¿Todo lo soporta o es una chica intolerante, irritable, histérica e impaciente? ¿Gisela sigue siendo la misma de antes o ya ha dejado de ser la chica amable, risueña y cariñosa que conocí?

Si al remplazar el nombre de tu pareja en cada una de las cualidades del amor verdadero, descubres que no las tiene ni te las muestra, entonces que no te quepa duda que lo que sienten por ti no es un amor puro y sincero sino tan solo una ilusión que al pasar el tiempo y desvanecerse, sino la cortas hoy, te hará sufrir muchísimo en el futuro y en los días que se acercan para ti.

No importa cuánto te digan «te amo», si no lo demuestran la pura verdad es que te están mintiendo. Decide a quien le creerás ¿A sus acciones o a sus palabras?

Todos los jóvenes que dieron más crédito a las palabras que a las acciones de su pareja, hoy están pagando amargamente su equivocación a través de un aborto, también como madres solteras o como hombres traicionados y enjuiciados por alimentos.

Pero también te quiero animar a poner tu propio nombre en la palabra amor y analízate si lo que sientes por tu pareja es un verdadero amor o si solo estás ilusionado.

Si quieres un cambio y mejora en tu vida debe empezar por ti, y no debes esperar que sea tu pareja la que de el primer paso porque de lo contrario mientras te dediques a ver sus fallas y no las tuyas propias, jamás podrás superar y crecer en tus relaciones sentimentales y en tus relaciones hacia los demás en general.

Aquella persona que vive culpando a otros de sus fracasos, siempre vivirá fracasada. Es cierto que tu novio o novia también tiene fallas pero mientras no seas tu el que se decide a ser el primero en cambiar, tu vida nunca será feliz.

Ahora veremos con ejemplos claros, que significa cada una de las características del amor que nos enseña la Biblia como palabra de Dios.

EL AMOR ES SUFRIDO

Sufrido significa «que sufre con resignación». Se refiere a la paciencia, conformidad y tolerancia con que se sufre algo. El verdadero amor, es sufrido, en cambio la ilusión no está dispuesta a sufrir, a esperar, a ser paciente y a ser tolerante.

Pongamos un ejemplo; algo que siempre ha hecho sufrir a una pareja es la separación. Si una pareja tiene que separarse debido a la distancia o al tiempo, tendrán que sufrir hasta que se vuelvan a reencontrar. ¡Aquí es donde se puede comprobar si es amor verdadero lo que sienten el uno al otro o si solo están ilusionados!

Claro que es fácil soportar separarse una semana o a lo mucho un mes; pero separarse dos años o cinco por motivo de estudios, trabajo o viajes sí que es muy difícil. Es justamente en estos casos en los que el verdadero amor prevalecerá sobre cualquier circunstancia o adversidad porque el verdadero amor, es sufrido.

Supongamos que una señorita le dice a su enamorado: «Acabo de ingresar a una Universidad en otra ciudad y voy a tener que estar fuera de aquí por 5 años estudiando, lejos de ti y sin verte, pero quiero que sigamos siendo enamorados porque yo te amo de verdad».

Cuando un joven solo está ilusionado, no estará dispuesto a esperar tanto tiempo para continuar con su pareja. Tan solo a la semana de estar alejado de su novia, el famoso picaflor «florero» estará buscando otra chica a quien declararse y empezará a recorrer todas las flores que conozca: se declarará a Rosa, si no acepta buscará a Margarita; si tampoco quiere irá donde Azucena, luego a Jazmín, también donde Chabela ¡Hasta que haya alguien que lo acepte y le crea la mentira de «Te amo y quiero estar contigo»!

Al hacer eso, estaría demostrando claramente que no era amor lo que sentía sino solo una ilusión, ya que, no está dispuesto a esperar y sufrir el tiempo que sea necesario hasta que ella regrese.

Otros, peor ilusionados, ni siquiera esperarán que su pareja esté lejos de ellos para dar por terminada su relación. Más bien se enteren que tendrá que partir, le dirán:

«Sabes, sé que vas a viajar un largo tiempo y quizás conocerás a donde vas a ir, una persona que te guste y te ame más que yo. Prefiero terminar contigo ahora y liberarte de nuestra relación para que tengas toda la libertad de estar con alguien que te guste»

¡Ni siquiera viaja su pareja y ya está terminando! ¿Por qué?

Porque no es amor lo que siente, solo está ilusionado y por eso no está dispuesto a sufrir el tiempo que sea necesario. Además, todo lo que le dice a su enamorada, es para él, pero trata de encubrirlo haciendo parecer que le deja la libertad a ella cuando en realidad es él el que quiere la libertad. Si amara de verdad a su pareja le hubiera dicho:

«Nadie te amará como yo y te esperaré todo el tiempo. Si es necesario hasta que termines tu carrera, luego tu maestría, y también tu doctorado».

Recuerda que el verdadero amor es sufrido. Otros peor aún, así no viaje su enamorada o enamorado estarán dando cabida a otros chicos y chicas para iniciar una relación con ellos. ¿Puede funcionar un amor a distancia? ¡Claro que sí!

Justamente es en la separación a través del tiempo y la distancia en la que uno puede comprobar si ama de verdad a una persona o si solo está ilusionado. Si se alejan y terminan olvidándose, es porque nunca fue un amor verdadero, solo fue una ilusión pasajera de aquellas que pronto se acaban al pasar los días.

Una vez escuché la historia de una pareja de esposos jóvenes, ya casados y con hijos. Él es médico y dijo mas o menos lo siguiente:

«Cuando era un adolescente, yo tenía mi enamorada. Ambos amábamos a Dios y asistíamos a la iglesia. Sucede que yo postulé a la Facultad de medicina de una universidad que quedaba en otra ciudad de la que vivíamos e ingresé. Así que le dije a mi enamorada «He ingresado a medicina y voy a tener que estudiar 7 años para terminar mi carrera, más un año de práctica y uno de SERUM (Servicio Rural Médico). Pero yo te amo mucho y te prometo que si tu me esperas, cuando yo termine mi carrera, me caso contigo».

Ella dijo: «Yo también te amo de verdad y estoy dispuesta a esperarte todos estos años para casarme contigo. Te esperaré y seré fiel a ti».

Luego el estudió su carrera de medicina, hizo sus años de práctica y de servicio ¡Y se casaron! Esta es una historia real; cuando yo la escuché de sus mismos labios, ellos ya eran esposos y tenían sus dos pequeños y hermosos hijos a su lado ¡Esto si es amor verdadero!

Si hubiera sido solo una ilusión ninguno de los dos hubiera querido sufrir la separación. El amor a distancia si funciona pero solo cuando lo que sienten es amor y no ilusión. Recuerda joven que el amor es sufrido.

Otra cosa que hace sufrir a la persona que ama de verdad es ver a su ser amado enfermo físicamente. Cuando uno ama sinceramente estará dispuesto a luchar por su salud y también a ayudarla en todo lo que sea posible. Pero si solo es ilusión lo que siente pronto se aburrirá de ver enferma a su pareja y decidirá que mejor es cambiarla por otra que esté mas sana.

Se cuenta que una vez, un joven se enamoró de una chica que tenía dificultades para caminar y andaba cojeando. Cuando se encontró con uno de sus amigos, la presentó como su enamorada y él notó que ella no podía caminar bien. Así que luego, cuando encontró a su amigo, le dijo:

– Oye, tu enamorada es cojita, no está sana y creo que no te conviene.
– Si ya sé que no puede caminar pero yo la amo.
– ¡Pero es coja! No te va a servir.
– No importa -le dice el joven enamorado- Si no la quiero para competencia de carreras.

No hace mucho tiempo, un esposo que tenía una mujer que continuamente se enfermaba y casi nunca estaba sana, me dijo:

«Te doy un consejo. Cuando te cases escoge bien con quien lo harás porque si te toca una mujer enferma te vas a arrepentir. Vas a gastar un montón y encima no va a haber quién te ayude en los quehaceres de la casa.

Si yo estuviera soltero, francamente que no me casaría con la que ahora es mi esposa, porque se para enfermando a cada rato y sinceramente ¡Ya me tiene harto y cansado, no se qué hacer con ella!.

Bueno, yo pregunto ¿Es amor lo que el sentía por ella?

Por supuesto que no, porque si la amara no hubiera hablado así. Si fuera amor lo que siente hubiera dicho:

«Estoy muy triste porque mi esposa se anda enfermando ¡Cuánto diera por verla sana! Sería capaz de vender todas mis cosas y quedarme sin un solo centavo con tal de verla alegre, saludable y feliz. No importa cuanto tenga que sufrir, lucharé hasta el final para verla totalmente sana».

El amor verdadero es sufrido. La ilusión no está dispuesta a sufrir sino que evitará el sufrimiento buscando las salidas más fáciles y menos dificultosas. Si quieres ser feliz toda tu vida, decídete a sufrir y luchar por la persona que amas y recibirás el premio del éxito en tu relación como pareja ¡Adelante joven de valor!

Escrito por: Ps. Victor Zafra

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