El Hospital Incondicional: Mateo 25:31-46

HOSPITALIDAD INCONDICIONAL: Léase Mateo 25.31 – 46

Recíbanse unos a otros en sus casas, sin murmurar de nadie. 1ra. Pedro 4.9

Cuando nuestro equipo realizó un viaje misionero de cinco días a México, las personas cristianas del área local combinaron sus recursos limitados y nos alimentaron con arroz y frijoles. Para sorpresa nuestra, nuestros anfitriones no comían con nosotros. Después supimos que ellos estaban ofreciendo todo lo que tenían, al punto de que ellos y sus familias sólo estaban comiendo lo que sobraba de nuestra comida.

El amor sacrificial es la expresión más grande de nuestro amor por Dios. Jesús dijo que los que entrarían al reino de Dios, serían los que le ayudaron cuando estuvo hambriento, sediento, forastero, desnudo, enfermo y en la cárcel. Cuando los justos le preguntaron cuándo le ayudaron, Jesús dijo que lo hicieron por él cuando lo hicieron por otras personas.

Nuestra iglesia anfitriona en México demostró la hospitalidad más maravillosa que he experimentado. Me hicieron preguntarme qué estaría dispuesta a dar a Jesucristo. ¿Daría sólo lo que fuese conveniente al que dio su vida por mí? ¿O estaría dispuesta a darlo todo sin importar el precio?

Oración:
Amado Dios, gracias por darnos abundantemente. Abre nuestros ojos a las necesidades a nuestro alrededor. Ayúdanos a dar nuestro amor a alguien hoy. Amén.

Pensamiento Del Día:
¿Doy solamente donde y cuando es conveniente?

Sa. Christy Bower
(Washington, EE. UU.)

Oremos:
Por quienes carecen de alimento y albergue.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí