Estudios Biblicos – Orad Sin Cesar


«Orad sin cesar» -1 Tes. 5:17

 
S
iendo este es uno de los versos más cortos de la Biblia, es uno de los más significativos. A primera vista pareciera que fuera imposible que pudiéramos practicar este mandamiento. La mayoría de los creyentes tienen su tiempo muy ocupado para pasar todo el tiempo en sus rodillas. Aun los que nos damos completamente al ministerio no podemos hacerlo. ¿Qué quiso decir Pablo con esta exhortación que parece que sólo es para monjes o para personas que no tienen otra ocupación que la disciplina de la contemplación espiritual?
Me di cuenta leyendo este verso que el mismo se encuentra entre dos versos que son una buena terapia para cualquier persona. El verso 16 dice: » Estad siempre gozosos» y el verso 18 dice: «Dad gracias en todo» He llegado a concluir que es casi imposible cumplir estos dos mandamientos sin tener una vida constante de oración. Es la oración sin cesar la que nos capacita para estar siempre gozosos y dar gracias en todo. No puedo estar siempre gozoso sino oro sin cesar. ¿Por qué? Porque cuando yo oro entro a la presencia del Señor y es ahí donde hay plenitud de gozo.
A la misma vez no puedo dar gracias en todo a menos que primero haya puesto toda mi ansiedad sobre Dios por medio de la oración de acuerdo a Filipenses 4:6. No te dejes asustar por el mandamiento de orar en todo tiempo. Además del tiempo que pasamos con Dios en nuestra cámara secreta o en nuestra devoción diaria, podemos disciplinarnos a pasar todo el día en comunión con Dios. Debo alabarle continuamente por todos sus beneficios para conmigo. En cualquier momento del día puedo pedirle dirección al Espíritu Santo para afrontar los problemas y retos del diario vivir. Todo esto es parte de «orad sin cesar».
Mientras más hacemos esto, más aprendemos a practicar la presencia de Jesús en nuestras vidas. Es esta comunión diaria con Jesús lo que me libra de ansiedad y de preocuparme por las cosas que no puedo resolver. En esta forma mantengo el gozo del Señor que es mucho más poderoso y efectivo que mi propio gozo. Cuando oro sin cesar, de alguna forma mi fe se activa y puedo dar gracias en todo sabiendo que mi Dios es fiel para nunca dejarme y para hacer a favor mío todo aquello que Él ha prometido en su Palabra.

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