DEVOCIONAL DIARIO – SALMO 1-5

DEVOCIONAL – Salmos 1-5

«Dichoso el hombre que no sigue el consejo de los malvados, ni se detiene en la senda de los pecadores…» (Salmo 1:1)

Los Salmos eran el himnario de Israel y expresan el sentimiento humano. Los Salmos cubren mil años de historia desde Moisés hasta lo postexílico. Fueron escritos, entre 1030 y 930 AC según Benware.

El malvado, puede que disfrute de la vida, pero le dura poco, pues su felicidad es efímera, porque no está basada en la Palabra de Dios; un día dará cuenta a Dios de sus actos para perderse eternamente. En contraste la persona justa, es justificada por Dios, por la obra de Cristo; obedece al Señor y muestra su fe con frutos.

En el Salmo 2, vemos al mundo en rebeldía contra el Señor en deliberada oposición a su gobierno; señala el contraste fútil de los pueblos malos, al oponerse a los propósitos inmutables de Dios. Matthew dice: «La oposición que había de hacerse al Reino del Mesías. La reprensión y el castigo de tal oposición. La erección del reino de Cristo a pesar de dicha oposición. La confirmación y el establecimiento del reino mesiánico. La promesa de su ampliación y éxito. Un llamamiento y una exhortación a los reyes y príncipes a que se sometan voluntariamente a ser súbditos de este reino».

El Salmo 3, el Rey David huía delante de su malvado hijo Absalón. Es allí cuando David clama a Dios expresando que sus adversarios son muchos que tiene oposición y que no le dan esperanza. Cuando te deleitas en el Señor, no hay problema, El contesta. Solamente espere en Dios.

En el Salmo 4, Testifico, el otro día, pasaba por un lugar oscuro y solitario, y allí oré «Señor líbrame del peligro», de pronto, aparecen dos hombres de color, uno con un gran puñal me dijo que era un asalto, me pidió el reloj; pero ventajosamente hable del Señor y que era Pastor y los ladrones corrieron como ratón asustado. El Señor me libró de los malvados. Cuando no pueda dormir, es hora de buscar a Dios y adorarle.

En el Salmo 5, Los israelitas oraban mirando hacia el Lugar santísimo del templo de Jerusalén (cf. 1 R 6.16), sea que estuvieran dentro del santuario o en sus atrios (Sal 134.1-2; 138.2), o en algún sitio más o menos alejado de él (1 R 8.48; Dn 6.10) El gesto de extender las manos hacia el templo solía acompañar a la oración (Sal. 28.2) (RV95)

Mi confianza está en Dios, por tanto, le alabo y le sirvo, con el único interés que su Nombre sea EXALTADO. ..

OREMOS:

Padre, te alabo y te sirvo, úsame para edificar a tu Iglesia…

2 COMENTARIOS

  1. Señor Pastor:
    Le agradezco mucho por su mensaje y espero que DIOS le siga usando, pero en la parte donde ondesscribe a los ladrones al decir que de color, sutilmente esta mostrando prejuicios hacia una etnia en la que no todos son ladrones.
    ¿Si los ladrones no fueran de color hubiera especificado si eran blancos,meztizos o de otra etnia?
    Yo soy afro y tambien soy cristianoy le agradezco a DIOS mi tono de piel y aunque en el mundo es un obstaculo para alcanzar muchos sueños para DIOS eso no lo ha sido.
    Con respeto DIOS le bendiga.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí