Por la gracia de Dios, ¡tú también puedes!

«…SACARON FUERZAS DE DEBILIDAD…» (Hebreos 11:34b)

Por la gracia de Dios, ¡tú también puedes!

Escucha: «…el tiempo me faltaría contando de Gedeón, de Barac, de Sansón, de Jefté, de David, así como de Samuel y de los profetas; que por fe conquistaron reinos, hicieron justicia, alcanzaron promesas, taparon bocas de leones, apagaron fuegos impetuosos, evitaron filo de espada, sacaron fuerzas de debilidad, se hicieron fuertes en batallas…» (Hebreos 11:34).

¿Quiénes eran estas personasí Gente como Sansón, moralmente débil,como Samuel, que falló como padre, como Jefté, un marginado que nació de madre soltera. Considera las palabras «…sacaron fuerzas de debilidad…» (Hebreos 11:34). No comenzaron fuertes, ¡se hicieron fuertes! Su valentía se forjó en los fuegos de la adversidad. Y si ellos pudieron hacerlo, por la gracia de Dios, ¡tú también puedes!

Por motivos que Él nunca explica, elige trabajar por medio de gente normal y corriente como nosotros. Así que: (a) Nos coloca en situaciones que desatan nuestra compasión y creatividad; (b) Nos conecta con los que nos pueden abrir la puerta adecuada en el momento adecuado; (c) Hace de nosotros una «solución» allá donde vamos.

¿Significa eso que ya no te vas a enfrentar al temor? No; muchos de los logros más grandes que se han hecho en el mundo fueron llevados a cabo por personas que, sencillamente, decidieron realizarlos aunque sintieran temor al hacerlo. Sabían que la oportunidad y la seguridad no se daban la mano. Entendieron que si lo que hacían no requería fe,¡entonces no agradaba al Eterno, ni tampoco lo involucraba! ¡La verdad es que nunca vas a descubrir lo que tu vida puede llegar a ser hasta que no te pongas en sus manos!