La Importancia de Formar un Equipo y Cómo Hacerlo

La Importancia de Formar un Equipo y Cómo Hacerlo

Introducción: Como líder que tuvo el privilegio de formar un número de diferentes equipos a través de los años, una de las cosas que he notado que es de suma importancia, es el entendimiento del concepto «equipo de ministerio». Un equipo de ministerio es la convicción de que en cualquier grupo de gente, debe haber un proceso de crecimiento y madurez donde el equipo aprenda cómo trabajar unos con otros y a apreciar la parte del otro para el éxito del conjunto. Como líderes cristianos, debemos entender que el éxito de nuestro ministerio depende de nuestra habilidad de tener a la gente correcta en el lugar correcto, en el tiempo correcto y animarlos a trabajar juntos para alcanzar la visión de Dios.

Si echamos un vistazo a un ejemplo natural de cómo funciona un grupo de palitos podemos ver la importancia del concepto de equipo de ministerio. Un palito, por sí mismo tiene un grado de fuerza y requiere un poco de fuerza para ser roto; podemos romper un palito fácilmente si es uno solo. Pero cuando empezamos a añadir más palos se hace más difícil romperlos en uno. Si juntamos 25 palos y tratamos de romperlos, la fuerza combinada de estos hará extremadamente difícil romperlos por la unidad que existe en grupo. Lo mismo sucede en la formación de nuestro equipo de ministerio. Cuanto más fuerte y unido este el equipo, es más difícil romperlo. Cada vez que añadimos un talento que posee uno de los miembros de nuestro equipo y nos enfocamos en una meta común, estamos añadiendo fuerza a la organización e incrementando las oportunidades de alcanzar las metas de nuestro ministerio.

La Biblia habla de formar un equipo: A medida que estudiamos la palabra de Dios, vemos varios pasajes de las escrituras que hablan de la importancia de formar un equipo.

• Levítico 26:8 Cinco de vosotros perseguirán a ciento, y ciento de vosotros perseguirán a diez mil.

• Salmos 133:1-3 Nos muestra cuán bueno es que los hermanos habiten juntos en unidad y cómo Dios envía su bendición a la gente cuando esta en unidad.

• Eclesiastés 4:9-12 Nos muestra que un nudo de tres cuerdas no es fácil de romper, mostrándonos que hay fuerza cuando la gente esta de acuerdo.

• Génesis 11:1-9 Nos muestra el ejemplo de la torre de Babel. La gente trabajo junta y Dios mismo tuvo que separarlos porque nada era imposible para ellos.

«Trabajo en equipo», según el Diccionario del Patrimonio Americano, se define como:

1. Fuerza cooperativa entre miembros de un grupo o equipo para alcanzar una meta común.

2. Un grupo organizado para trabajar juntos: un grupo de ingenieros

3. Actividad colectiva en la que participan miembros de un equipo.

4. Esfuerzo colectivo y mutua cooperación.

La construcción en equipo puede ser descrita como un grupo de individuos que ponen a un lado sus diferencias y trabajan juntos por una meta común. La idea central es que si los individuos trabajan juntos, serán capaces de alcanzar mucho más de lo que serían capaces si estuvieran separados.

Algunas cosas acerca de formar un equipo: Existen algunos pasos introductorios acerca de la formación de equipos que debemos explorar antes de ir más adelante.

• Por naturaleza, la gente no trabaja bien junta – Una de las razones por las que este concepto de equipo de ministerio ha sido tan difícil de entender para el cuerpo de Cristo es porque no es natural para la gente trabajar juntos en alcanzar un objetivo común. La sociedad en la que todos vivimos anima a los líderes a no depender de nadie sino de sí mismos. El éxito en cualquier organización solo se puede alcanzar cuando los miembros individuales del equipo aprenden a trabajar juntos para alcanzar metas comunes. Es importante que enfaticemos en la palabra «aprender» porque esto no llega de manera natural. Equipo de ministerio es un concepto que se aprende. Así como leer o escribir, se requiere un proceso de aprendizaje de cómo formar un equipo. La llave principal para recordar es que todos pueden trabajar solos, pero esto hace que un verdadero líder aprenda cómo empujar un grupo junto y cómo motivarlos para alcanzar juntos cosas que solos no podrían. Cualquiera puede contratar gente, pero es necesario un verdadero líder para formar y moldear un equipo.

• Formar un equipo es una inversión; no un costo – Muchas veces cuando me encuentro con pastores y les pregunto acerca de sus planes para preparar a sus líderes, ellos comparten conmigo sobre lo llenos que están sus horarios y que no cuentan con un tiempo regular para entrenar a su gente clave. Muchas veces, ellos comparten que están tan ocupados con los quehaceres cotidianos, que deben reconocer que no cuentan con un tiempo separado para entrenar a sus líderes. El problema muchas veces, es que ellos no ven el desarrollo de su equipo como una inversión y lo ven como un gasto. El desarrollo de los líderes que nos rodean es una de las cosas más importantes que como líderes debemos hacer. La gente que lo rodea va a determinar si su ministerio va a ser efectivo o no. Es por eso, que los grandes líderes construyen grandes equipos. Desarrollar a la gente alrededor de nosotros es una inversión no un gasto.

• Hay etapas de formación de un equipo – Una de las razones por las que muchos ministerios no permanecen juntos es porque el miembro individual del equipo no entiende que hay varias etapas por las que un equipo debe pasar antes de convertirse en un equipo sólido. Si podemos entender estas diferentes etapas del proceso de formación de un equipo, estamos listos para prepararnos a nosotros mismos y a nuestro equipo y para sobrellevar esos obstáculos y convertirnos en un equipo sólido. Las etapas del proceso de formación de un equipo son: empezando, formando, madurando y multiplicando.

• Las iniciativas vienen de muchas diferentes áreas – La iniciativa solo viene de un lugar y ese lugar es de nosotros mismos, pero construimos nuestra iniciativa propia de distintos lugares. Por ejemplo en el caso de una fogata. El fuego en si es el que crea la energía pero la leña que pongamos en ella determina el tamaño y la duración del fuego. La misma verdad se aplica a nuestra iniciativa propia. Debemos ser buenos alumnos y saber que es lo que nos motiva como líderes y dónde podemos recibir buena motivación para lograr nuestros objetivos como líderes

• Para formar un gran equipo, debe ser selectivo – Una de las claves para construir un equipo de liderazgo sólido es conocer las cualidades que tiene un gran miembro del equipo. Una vez que tengamos en mente como es un gran miembro del equipo, podremos empezar a buscar ese tipo de cualidades en nuestro equipo y empezar a desarrollar esas características en nuestros miembros de equipo.

• Para formar un gran equipo debe poner a la gente correcta en el lugar correcto – Cada vez que tengo la oportunidad de dirigir a pastores y líderes de las Iglesias, una de las áreas en las que me gusta enfocarme es en la necesidad de ubicar a la gente en el lugar correcto. Como líderes cristianos una de las cosas en las que debemos ser exitosos es encontrando los talentos de los miembros de nuestro equipo y ubicarlos dónde producirán los mejores resultados. Muchas veces los líderes tratan de que los miembros de su equipo realicen roles en los cuales no tienen un don natural. Esto está bien cuando se está empezando, pero para tener éxito verdadero a largo plazo, se debe encontrar cuáles son los talentos que el equipo de trabajo tiene y se debe situarlos en los lugares correctos.

Hay varios componentes, que como líderes debemos conocer, para formar un equipo exitoso. Para formar un equipo exitoso debemos observar lo siguiente:

Entender qué cualidades está buscando en los miembros de su equipo. Escoger la gente correcta Hacer las inversiones necesarias en su equipo Poner la gente correcta en el lugar correcto. Entender las etapas del proceso de formación de un equipo. Entender la importancia del trabajo en equipo.

Entender qué cualidades está buscando en los miembros de su equipo

Es importante que entienda qué tipo de gente quiere en su equipo. Cuando un miembro entra a su equipo, se debe considerar como un matrimonio, no importa lo que suceda usted está comprometido con esa persona.

• Un gran miembro del equipo tiene una actitud positiva – La actitud es uno de los ingredientes claves para un exitoso miembro del equipo. Como mencioné anteriormente, las actitudes son contagiosas y usted quiere en su equipo a gente que ayude a la moral del equipo y no que la dañe. Los grandes miembros son gente que dirigen al equipo en dirección de una actitud positiva. Esto está basado usualmente, en la percepción de la vida de los miembros del equipo. La gente positiva ve la vida como una aventura y ve a Dios en cada situación.

• Un gran miembro del equipo tiene un corazón para servir – Los grandes miembros de un equipo ponen la necesidad de otros antes que sus propias necesidades. Ellos tienen una actitud de pensar en lo demás. Ellos no están ahí para ver cómo el equipo los beneficiará, sino que están ahí para ser una ventaja para la gente que los rodea. La mentalidad no es lo que ellos pueden recibir como resultado de su relación con el equipo, sino lo que pueden aportar al equipo.

• Un gran miembro del equipo tiene un buen potencial para crecer – Los grandes miembros de un equipo buscan el crecimiento personal y el del equipo. Es esencial que un miembro exitoso del equipo tenga el potencial y la actitud para crecer. Ellos deben tener el deseo, el plan y las acciones para asegurar que están alcanzando su potencial. Cada día ellos están incrementando su valor para el equipo, incrementando sus destrezas de liderazgo.

• Un gran miembro del equipo tiene integridad – Los grandes miembros de un equipo terminan lo que han empezado. Ellos hacen las cosas acorde con lo que dijeron que iban a hacer y nunca dan su palabra si es que no tienen el tiempo, recursos y la motivación para hacerlo. Su palabra es una garantía de sus acciones. No hay diferencia entre sus palabras y sus acciones.

• Un gran miembro del equipo tiene lealtad – Los grandes miembros de un equipo son leales con la visión y la visión de la organización. Ellos entienden la visión general del equipo y están dispuestos a sacrificar el confort personal para el progreso del equipo. No se comprometen fácilmente con los objetivos de todo el equipo por su ganancia personal.

• Un gran miembro del equipo tiene disciplina – Los grandes miembros de un equipo pagan el precio por su autodisciplina para cumplir con los objetivos del equipo. Ellos hacen elecciones sabias respecto a las palabras que utilizan, cosas que hacen y tienen en mente, en relación al esfuerzo para que el equipo entero avance.

• Un gran miembro del equipo tiene gratitud – Los grandes miembros de un equipo tienen la actitud de gratitud. Ellos siempre dan el crédito de haber cumplido las cosas, como resultado de los esfuerzos de todo el equipo. Ellos comparten el crédito con los otros miembros del equipo cuando son personalmente alabados. Ellos viven con el razonamiento de que todos los éxitos son el resultado de cada miembro del equipo que ha hecho su parte. Ellos buscan oportunidades para compartir el crédito.