¿Cómo Buscar El Rostro de Dios En Oración?

Buscar El Rostro Del Señor
¿Buscar El Rostro de Dios Según La Biblia?

¿Cómo Buscar El Rostro de Dios En Oración?

“…TU ROSTRO BUSCARÉ, SEÑOR” (Salmos 27:8)

Nos podemos hacer una idea muy clara de lo que sucede en la oración al ver la interacción entre un niño pequeño y su padre. Imagínate a un niño de un año que se te queda mirando fijamente. Te cautiva. Primero te mira con timidez, ladea la cabeza y te mira por el rabillo del ojo. Luego tú haces lo mismo. Resulta divertido. Se gira y te mira de forma directa. Lo imitas en el gesto. De repente se produce un ruido detrás de él y se asusta. Copias la misma cara de sobresalto. Se asusta tanto que hace pucheros, así que cambias la expresión por una sonrisa. Él hace lo mismo y pronto balbuceará de alegría. Cuando un niño intercambia miradas así y alguien le hace saber que entiende cómo se siente, su cerebro y su sistema nervioso se conectan de forma especial dentro de su cuerpo y experimenta lo que se llama “integración neural”. Con el juego de hacer muecas, le estás transmitiendo paz al pequeño. Lo sana. Se deleita con tu presencia.

La oración funciona del mismo modo. En el Antiguo Testamento, Dios instruyó a Moisés que diera a los israelitas la siguiente bendición: “El Señor te bendiga y te guarde. El Señor haga resplandecer su rostro sobre ti y tenga de ti misericordia; el Señor alce sobre ti Su rostro y ponga en ti paz” (Números 6:24-26). Cuando hablamos de oración, hablamos de “buscar el rostro de Dios”. Eso significa que unas veces orar consiste en hablar y otras veces en escuchar. Pero hay un tercer ingrediente: la seguridad que nos da el sentir la sonrisa de amor y de aprobación de Dios.

[lightbox full=»https://www.devocionalescristianos.org/wp-content/uploads/2016/01/como-buscar-el-rostro-de-Dios-biblia-4.jpg» title=»Buscar El Rostro de Dios»][/lightbox] Buscar El Rostro de Dios (Imagen) Compártela en tu red social favorita.

“…EL SEÑOR HAGA RESPANDECER SU ROSTRO SOBRE TI…” (Números 6:25)

Al estudiar la vida de Cristo, te das cuenta de que la oración no lo dejaba sin energía, sino que lo revitalizaba. Lo mismo te puede ocurrir cuando te acerques a Dios en oración para ver cómo resplandece Su rostro sobre ti. Cuando estás con alguien polémico con ganas de discutir, gastas energías. Sin embargo, cuando quedas con tu mejor amigo, las renuevas. Jesús nos ha llamado “amigos” (Juan 15:15). ¿Te has fijado en que a veces los enamorados se hablan como si fueran bebés? Es algo muy íntimo y privado y resulta desagradable a un tercero. Pero lo hacemos porque es el lenguaje más tierno que conocemos.

La vida de oración de Jesús demostraba su intimidad. A Dios lo llamaba “Abba”, una palabra aramea equivalente a “papá” o “mamá” (Jesús hablaba en arameo y hay partes del Nuevo Testamento escritas en esta lengua en lugar de en griego). “Abba” era la primera palabra que pronunciaban los niños judíos por su facilidad fonética. En cierto modo, el amor tierno que los adultos ofrecen a los niños es el mismo que Jesús recibía de Su Padre cuando estaba con Él. Tú también puedes experimentar lo mismo. Por eso escribió Pablo: “…No recibisteis un espíritu que de nuevo os esclavice al miedo, sino el Espíritu que os adopta como hijos y os permite clamar: ‘¡Abba! ¡Padre!’. El Espíritu mismo le asegura a nuestro espíritu que somos hijos de Dios. Y si somos hijos, somos… herederos de Dios…” (Romanos 8:15-17 CST). El propósito primordial de la oración debería ser alcanzar la intimidad con Dios.

1 COMENTARIO

  1. gracias por sus correos . me ayudan de mucho Dios es el unico en la tierre el es el rey

    pido oracion por mis hijos mi matrimonio y mi trabajo mi salud , y para que se retire una familia que me molesta mucho levantandome falsos y son cristianos y eso me hace caer mucho Dios los vendiga

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí