¿Cómo Mover La Montaña Según La Palabra de Dios?

0
Mueve Montañas Bíblicamente
¿Cómo Mover Montañas Según La Biblia?

¿Cómo mover la montaña versión Jesús?

«QUE DIGA A ESTE MONTE: QUÍTATE» (Marcos 11:23)

¿Cómo puedes mover las montañas de tu vida?:

1) Usando la Palabra de Dios.

Satanás tentó a Jesús en el desierto de tres maneras:

a) pon tus necesidades temporales por encima de las espirituales. «Di que estas piedras se conviertan en pan»;
b) usa tu poder por motivos equivocados: «Échate abajo [del pináculo del templo]»;
c) toma el camino fácil, no la cruz: «Todo esto te daré [los reinos del mundo] si «me adorares». En cada tentación, Jesús venció a satanás diciendo: «Escrito está» (Mateo 4:1-11). Tu arma más potente es la Palabra de Dios: ¡aprende a usarla!

2) Siendo persistente.

Jeremías dijo que la Palabra de Dios es «…como martillo que quebranta la piedra». (Jeremías 23:29). ¿Nunca te has preguntado porque el martillo puede golpear la roca noventa y nueve veces pero no se hace pedazos hasta el golpe cien? Porque los golpes anteriores la estaban debilitando. Vive en la Palabra de Dios; sigue hablándola sobre tu situación y surtirá efecto.

[lightbox full=»https://www.devocionalescristianos.org/wp-content/uploads/2016/02/Moviendo-montanas-biblia-Jesus-3.jpg» title=»¿Cómo Mover La Montaña Según La Palabra de Dios?»][/lightbox] ¿Cómo Mover La Montaña Según La Palabra de Dios?(Imagen) Compártela en tu red social favorita.

3) Perdonando.

Se cuenta de un pastor que preguntó a la congregación:
¿Cuántos aquí están dispuestos a perdonar a vuestros enemigos? Todos levantaron la mano excepto un señor ya de edad. ¿Y usted por qué no? le preguntó el pastor. A lo que el anciano contestó: Porque no tengo ninguno; todos se han muerto. Después de hablar Jesús de la fe que mueve montañas y de la oración eficaz, dijo: «Y cuando estéis orando, perdonad, si tenéis algo contra alguno, para que también vuestro Padre que está en los cielos os perdone a vosotros vuestras ofensas».(Marcos 11:25).

Tus montañas no pueden moverse ni tus oraciones ser respondidas si dentro de ti albergas falta de perdón. Pregúntate ¿vale la pena seguir así? Ya sea que pienses que el ofensor merece ser perdonado o no, por tu propio bien, perdónalo y suéltalo.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí