El Exceso de Información En Los Últimos Días

0
Exceso de Información En Los Últimos Tiempos
Exceso de Información En Los Últimos Tiempos

El Exceso de Información En Los Últimos Días

«MUCHOS ANDARÁN DE UN LADO A OTRO EN BUSCA DE CUALQUIER CONOCIMIENTO.» (Daniel 12:4 NVI)

La tecnología nos permite hacer cosas que antes no podíamos hacer, pero puede crear adicción. Puedes quedarte enganchado de tal forma que quedes exhausto. Señala un experto: «Existe una fuerte tendencia en los humanos de querer hacerlo todo. Si a eso se añade el estar siempre conectados, el resultado es que nunca se acaba la jornada laboral. Es fácil contactar con alguien a cualquier hora, y con tanta información disponible en internet, se puede pasar la vida dándole al ratón.? Pablo nos habla de [aprovechar] bien el tiempo» (Efesios 5:16). Decimos: «El tiempo es dinero» pero en realidad, tiene mucho más valor, porque es un recurso no renovable, una vez gastado, ya no vuelve. Manejar el exceso de información requiere volver a establecer los límites que ha destruido la tecnología. Por lo tanto:

Reconoce los síntomas: Si te comunicas con gente todo el día pero sigues sintiéndote solo, es muy probable que la tecnología esté dominando tu vida. Ve adentrándote poco a poco: desconéctate durante cortos periodos de tiempo, y verás que no pasa nada. ¡El engranaje industrial sigue su ritmo! ¡No te tiene en cuenta! Recuerda que tú eliges: las personas que piensan que tienen que estar disponibles las veinticuatro horas del día, o se creen más importantes de lo que son o exageran el control que otros tienen sobre ellos. Márcate unos límites: reduce el número de correos electrónicos y mensajes instantáneos. ¿De verdad necesitas mandar tantos e-mails de información sobre lo mismo? Da instrucciones claras: informa a las personas de que responderás a sus correos en momentos determinados del día y hazles saber cómo contactar contigo si necesitan una respuesta urgente. Haz una lista de tareas. De esa manera, si eres interrumpido volverás a retomar el hilo con más rapidez. Cíñete a un horario. Entrar y salir del ordenador es la típica interrupción que te impones a ti mismo. Haz un balance de situación y antes de seguir navegando por la red, pregúntate: ¿Debería estar haciendo esto ahora?

[lightbox full=»https://www.devocionalescristianos.org/wp-content/uploads/2016/02/Exceso-de-Informacion-biblia-cristianos-3.jpg» title=»El Exceso de Información En Los Últimos Días»][/lightbox] El Exceso de Información En Los Últimos Días (Imagen) Compártela en tu red social favorita.

Cuando estás siempre haciendo varias cosas al mismo tiempo, puedes pasar por alto asuntos importantes. Preguntaron a cierto abogado que negoció un contrato fabuloso a favor de su cliente la clave de su logro. Éste respondió: «Yo era la única persona en esa reunión que no pasé el tiempo mandando mensajes de texto». Un investigador renombrado opina que «hemos entrenado nuestros cerebros para revolotear constantemente alrededor del universo de mensajes y de información, buscando pequeños impulsos de emoción. Picando aquí y allá constantemente, nunca profundizamos demasiado antes de pasar a la próxima distracción» lo que incrementa nuestro grado de tensión de manera que sólo ahora empezamos a entender. Otro experto del tema se expresa así: «Recibimos más información en 72 horas de la que nuestros padres recibían en un mes, y no muchos tienen la capacidad de procesarla. Reciben continuamente nueva información y son incapaces de reciclar la que tienen acumulada, sin decidirse a hacer nada con ella».

¿Cuándo fue la última vez que disfrutaste de un buen momento ininterrumpido de descanso? ¿Lo recuerdas? Estamos tan condicionados por los resultados que a menos que estemos haciendo algo que pueda cuantificarse, pensamos que es una pérdida de tiempo. Pero la realidad es que necesitas tiempo fuera de la avalancha implacable de información para poder poner tus pensamientos en orden, reflexionar y recargar las pilas. Jesús también tenía que cumplir unas obligaciones, gente a la que ministrar, unos discípulos que dependían de Él y poco tiempo para hacerlo. No obstante, «Él se apartaba a lugares desiertos para orar» (Lucas 5:16). Dado que «el siervo no es mayor que su señor», ¿crees que a ti no te afecta lo anterior? ¿Eres más sabio que Él? ¿O más espiritual? Jesús dijo: «Venid» aparte y descansad un poco (Marcos 6.31); porque si no te apartas y descansas, te vendrás abajo.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí