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7 Tremendos Versículos Bíblicos Sobre Crisis Financieras

Poderosos Versículos de la Biblia Para tiempos de crisis

La reciente pandemia de Covid-19 ha causado que muchas familias y solteros estén al borde de la ruina financiera, así que ¿a qué versículos de bíblicos podemos recurrir en estos difíciles momentos de grandes problemas?

Mateo 6:31-32

«No os angustiéis, pues, diciendo: “¿Qué comeremos, o qué beberemos, o qué vestiremos?”, porque los gentiles se angustian por todas estas cosas, pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas ellas»

Podemos mirar nuestras billeteras y decir, «No, ¿qué voy a hacer?», pero en vez de eso, por qué no oramos, «Bueno mi Dios… no puedo esperar a ver lo que vas a hacer».

El Padre conoce cada uno de los problemas de tu vida, y especialmente aquellos que te presionan. Cosas como las finanzas. Entonces, ¿cómo aprender a no estar ansiosos? Reconociendo la verdad de que «vuestro Padre celestial sabe todo lo que necesitas», lo que sea que «todo» signifique para ti y tu familia. Cómo dejar de preocuparse.

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Filipenses 4:19

«Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús»

Después de leer este verso, pregúntese esto: ¿Cuáles son las riquezas en Cristo Jesús? Ya que Cristo es el Creador, ¡Él es dueño de todo! No solo es dueño del ganado en mil colinas… también es dueño de las colinas, pero esa promesa es para suplir todas nuestras necesidades, y no todos nuestros deseos, pero puedes descansar en la promesa de que «Dios suplirá todas tus necesidades».

Dios no suplirá todas las necesidades según las riquezas de otros, sino las de Jesucristo. Él puede usar a otros como medio para hacerlo, pero el mayor tesoro que recibimos es el de nuestra salvación.

Salmo 37:25

«Joven fui y he envejecido, y no he visto justo desamparado ni a su descendencia que mendigue pan»

El rey David pudo haber escrito este salmo cuando estaba huyendo del rey Saúl, que intentaba matarlo, y con frecuencia la comida y el agua eran escasas, pero aun así, David sabía que el Señor no lo abandonaría, ni permitiría que sus propios hijos pidieran pan. Esto es significativo porque es una promesa de Dios de que Él, como su Padre, cuidará de sus hijos. Por experiencia, ya deberíamos saber que «En todo tiempo tiene misericordia y presta» (Salmo 37:26a).

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Proverbios 3:9-10

«Honra a Jehová con tus bienes y con las primicias de todos tus frutos; entonces tus graneros estarán colmados con abundancia y tus lagares rebosarán de mosto»

He aconsejado a algunas personas sobre sus finanzas, tratando de ayudarles a establecer un presupuesto, pero parece que los que están en las mayores crisis financieras son a menudo los que menos dan o no dan nada en absoluto a su iglesia o a cualquier organización de ayuda.

No podemos esperar que Dios derrame bendiciones en nuestros regazos si nunca damos al Señor o a nadie más. Si damos, debemos dar de acuerdo a lo que tenemos; para algunos, puede ser poco, pero para otros, puede ser más, pero nunca debe ser nada. Cosechamos lo que sembramos, y si no sembramos nada, no podemos esperar cosechar mucho de la nada.

Mateo 6:26

«Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros; y, sin embargo, vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valéis vosotros mucho más que ellas?»

Al hacer Jesús la pregunta: ¿No valéis vosotros más que ellos? Básicamente nos dice que Dios cuida de las aves del aire, y que no tienen que preocuparse de dónde va a venir su próxima comida, así que ¿por qué estamos tan preocupados por el día de hoy o el de mañana?

Dios nos valora mucho más que cualquier ave del aire, y ya que Él provee para ellos, ¿realmente haría menos por ti, su propio hijo? Nunca he visto un pájaro tratando de construir un granero más grande para almacenar su semilla, ¿y tú? No tienes que hacerlo. ¡Dios tiene el control!

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Salmo 23:1

«El Señor es mi pastor; nada me faltará»

El Salmo 23 es uno de los capítulos más conocidos y amados de la Biblia, y no es de extrañar porque está lleno de las promesas de Dios.

Tal vez ni siquiera te hayas dado cuenta de que hay promesas de Dios para nosotros en este Salmo. La promesa de que «nada nos faltará», y que Él proveerá el alimento necesario (Salmo 23:2). No hay razón para temer ningún mal, ya que Él siempre está contigo (Salmo 23:4), sin embargo, esto será real para ti si has sido salvo.

Si el Señor no es tu pastor, te enfrentarás a la miseria en este mundo, pero para el creyente que clama al Señor como su pastor, puede decir: «Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida» (Salmo 23:6).

Isaías 41:10

«No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia»

Cuando nos enfrentamos a serias crisis financieras, a menudo el único lugar al que podemos acudir es a Dios. Debemos siempre en toda circunstancia pedirle ayuda al Padre. Su respuesta a nuestra oración se encuentra parcialmente en los escritos del Profeta Isaías.

Isaías habla de la emoción humana y miedo. Seguramente has experimentado miedo en tu vida; miedo a la salud, a las finanzas o a una relación arruinada, así que ¿cómo podemos evitar que todos estos miedos nos inmovilicen? Corre a Dios; ora a Él y «te fortalecerá» y «te ayudará», pero más que eso; cuando ya no puedas aguantar más, Dios «te sostendrá con [su] diestra de justicia».

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El miedo es el enemigo de la fe, pero la confianza en Dios y las promesas que se encuentran en su Palabra matarán al dragón del miedo y extinguirán los dardos de la duda.

Sé de muchas de personas que están pasando por crisis financieras en sus vidas. La buena noticia es que algunas personas que se enfrentan a problemas financieros han venido a Jesucristo por primera vez.

Cuando se dieron cuenta de que no había nada más que pudieran hacer, sintieron que solo Dios podía ayudarles. Y Dios ciertamente ha ayudado a muchos.

Esta reciente pandemia, que ha causado un desempleo desmesurado y ha aumentado el número de personas que viven en la pobreza o sin hogar, también ha traído muchos hijos e hijas al reino. Hijos e hijas de Dios que de otra manera nunca llegarían a la salvación que está en Cristo.

Hemos escuchado de tantos que se han puesto en contacto con nosotros y han conocido a Jesucristo por primera vez en sus vidas. Ahora, déjame preguntarte: ¿Te has arrepentido y confiado en Cristo? Espero que sí, pero si actualmente enfrentas una crisis financiera… y una muy seria, corre hacia Dios.

Dios puede usar el mal para que termine en bien. Él tiene experiencia en hacer esto (Gen 50:20; Juan 3:16), y está listo, dispuesto y capaz para ayudarte en estos momentos. Ven a Él (Mateo 11:28-30).

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