¿Eres Un Creyente o Un Discípulo de Jesús?

Creer, Crecer Y Obedecer ¿Qué Dice La Biblia Sobre El Discipulado?

Existe una gran diferencia entre creer en Cristo y ser un discípulo de Cristo, en la Palabra podemos ver claramente que Jesús no solamente se interesó en que el pueblo creyera en Dios y su gran amor por la humanidad, sino también en formar discípulos. Con solo 12 hombres hizo maravillas y cuando Él murió, ese equipo continuó haciendo la obra en su nombre.

En Mateo 28:18-20, leemos claramente que nuestra misión, como iglesia e hijos de Dios, es hacer discípulos. Pablo nos presenta claramente ese fin en Colosenses 1:28-29. Él trabajaba con toda sabiduría “a fin de poder presentar a todo hombre perfecto en Cristo”. Porque no estamos formando creyentes, sino personas que se parezcan a Cristo; es decir, verdaderos discípulos. 

Para dejar de ser creyentes y convertirnos en discípulos es importante una transformación a través de la llenura del Espíritu Santo y poder de la Palabra de Dios, que es como un espejo, porque nos muestra cómo somos, con el propósito de que cambiemos nuestro corazón (2 Corintios 3:18).

Un verdadero discípulo de Jesús no solamente es alguien que cree en Él, sino que además crece en su Palabra y la obedece. Esta es la clave, son tres elementos necesarios para seguir transformándonos. 

1. Un Verdadero Discípulo Cree en Jesús

Es la persona que se ha arrepentido de sus pecados y ha recibido a Jesucristo como Salvador, para iniciar una vida juntamente con  Él. Esto debe ser seguido por el bautismo, ya que es la señal pública de que se identifica con Cristo

2. Un Verdadero De Discípulo Crece En Jesús

Después de haber creído en Jesús, el discípulo entra a un proceso de formación que lo llevará a experimentar crecimiento. Se trata de una relación más profunda con Cristo, dando fruto de arrepentimiento. 

3. Un Verdadero Discípulo Obedece a Jesús

El resultado de pasar tiempo con Jesús y sujetarnos a Él será obedecerlo. A medida que el amor hacia Él crece, obedeceremos sus mandamientos, porque Él sabe cómo ordenar nuestra vida mejor que nosotros. Quiere decir que debemos saber lo que la Biblia nos pide, practicándolo hasta el fin y sin descanso.

En el evangelio de Mateo 28:18-20 se encuentran los versículos por excelencia que nos explican la Gran Comisión. Aquí el Señor Jesús nos dice que nuestra responsabilidad en formar a otros discípulos, enseñándoles a guardar sus mandamientos.

El obedecer a Jesús es una tremenda marca del discipulado, así que, si deseas ser un verdadero discípulo de Jesús, obedécelo. El discípulo es el que realmente escucha y aprende, y pone en práctica lo aprendido. Como discípulos de Cristo, debemos tener comunión los unos con los otros; porque sí decimos que estamos en comunión con Dios y no lo estamos con nuestros hermanos, entonces nos estamos engañando a nosotros mismos.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí