Apocalipsis 22 - Biblia de Jerusalén 19981. Luego me mostró el río de agua de vida, brillante como el cristal, que brotaba del trono de Dios y del Cordero. 2. En medio de la plaza, a una y otra margen del río, hay un árbol de vida, que da fruto doce veces, una vez cada mes; y sus hojas sirven de medicina para los gentiles. 3. Y no habrá ya maldición alguna; el trono de Dios y del Cordero estará en la ciudad y los siervos de Dios le darán culto. 4. Verán su rostro y llevarán su nombre en la frente. 5. Noche ya no habrá; no tienen necesidad de luz de lámpara ni de luz del sol, porque el Señor Dios los alumbrará y reinarán por los siglos de los siglos. La venida de Cristo está cerca6. Luego me dijo: "Estas palabras son ciertas y verdaderas; el Señor Dios, que inspira a los profetas, ha enviado a su ángel para manifestar a sus siervos lo que ha de suceder pronto. 7. Mira, vengo pronto. Dichoso el que guarde las palabras proféticas de este libro." 8. Yo, Juan, fui el que vi y oí esto. Y cuando lo oí y vi, caí a los pies del ángel que me había mostrado todo esto para adorarle. 9. Pero él me dijo: "No, cuidado; yo soy un siervo como tú y tus hermanos los profetas y los que guardan las palabras de este libro. A Dios tienes que adorar." 10. Y me dijo: "No selles las palabras proféticas de este libro, porque el Tiempo está cerca. 11. Que el injusto siga cometiendo injusticias y el manchado siga manchándose; que el justo siga practicando la justicia y el santo siga santificándose. 12. Mira, vengo pronto y traigo mi recompensa conmigo para pagar a cada uno según su trabajo. 13. Yo soy el Alfa y la Omega, el Primero y el Último, el Principio y el Fin. 14. Dichosos los que laven sus vestiduras, así podrán disponer del árbol de la vida y entrarán por las puertas en la ciudad. 15. ¡Fuera los perros, los hechiceros, los impuros, los asesinos, los idólatras, y todo el que ame y practique la mentira!" 16. Yo, Jesús, he enviado a mi ángel para daros testimonio de lo referente a las iglesias. Yo soy el retoño y el descendiente de David, el Lucero radiante del alba. 17. El Espíritu y la Novia dicen: "¡Ven!" Y el que oiga, diga: "¡Ven!" Y el que tenga sed, que se acerque, y el que quiera, reciba gratis agua de vida. 18. Yo advierto a todo el que escuche las palabras proféticas de este libro: "Si alguno añade algo sobre esto, Dios echará sobre él las plagas que se describen en este libro. 19. Y si alguno quita algo a las palabras de este libro profético, Dios le quitará su parte en el árbol de la vida y en la ciudad santa, que se describen en este libro." 20. Dice el que da testimonio de todo esto: "Sí, vengo pronto." ¡Amén! ¡Ven, Señor Jesús! 21. Que la gracia del Señor Jesús sea con todos. ¡Amén! |