Versículos Bíblicos

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Lucas 2 - Serafín de Ausejo 1975

Nacimiento de Jesús

1. Por aquellos días salió un decreto de César Augusto para que se hiciera un censo del mundo entero.

2. Este primer censo tuvo lugar siendo Quirinio gobernador de Siria.

3. Y todos iban a empadronarse, cada cual a su ciudad.

4. También José, por ser de la casa y familia de David, subió desde Galilea, de la ciudad de Nazaret, a Judea, a la ciudad de David, que se llama Belén,

5. para empadronarse con María, su esposa, que estaba encinta.

6. Estando ellos allí, le llegó a ella el tiempo del alumbramiento

7. y dio a luz a su hijo primogénito, lo envolvió en pañales y lo acostó en un pesebre, por no haber sitio para ellos en la posada.

Los ángeles y los pastores

8. Había unos pastores en aquella misma región que pasaban la noche al aire libre, vigilando por turno su rebaño.

9. Se les presentó un ángel del Señor y la gloria del Señor los envolvió en claridad. Ellos sintieron un gran temor.

10. Pero el ángel les dijo: "No tengáis miedo. Porque mirad: os traigo una buena noticia que será de grande alegría para todo el pueblo.

11. Hoy, en la ciudad de David, os ha nacido un Salvador, que es Cristo Señor.

12. Y esto os servirá de señal: encontraréis un niño envuelto en pañales y acostado en un pesebre".

13. Y, de repente, apareció con el ángel una multitud del ejército celestial que alababa a Dios, diciendo:

14. "Gloria a Dios en las alturas, y en la tierra paz entre los hombres, objeto de su amor".

15. Y cuando los ángeles los dejaron y se fueron al cielo, los pastores se decían unos a otros: "Pasemos a Belén, a ver eso que ha sucedido, lo que el Señor nos ha dado a conocer".

16. Fueron corriendo y encontraron a María y a José, y al niño acostado en el pesebre.

17. Al verlo, refirieron lo que se les había dicho acerca de este niño.

18. Y todos los que lo oyeron quedaron admirados de lo que les contaban los pastores.

19. María, por su parte, retenía todas estas cosas repensándolas en su corazón.

20. Los pastores se volvieron, glorificando y alabando a Dios por todo lo que habían visto y oído, tal como se les había anunciado.

Presentación de Jesús en el templo

21. Cuando se cumplieron ocho días y hubo que circuncidar al niño le pusieron por nombre Jesús, como lo había llamado el ángel antes de ser concebido en el seno materno.

22. Cuando se cumplieron los días de su purificación según la ley de Moisés, lo llevaron a Jerusalén para presentarlo al Señor,

23. conforme a lo que está escrito en la ley del Señor: Todo varón primogénito será consagrado al Señor,

24. y para ofrecer un sacrificio, como lo dice también la ley del Señor: Un par de tórtolas o dos pichones.

25. Vivía por entonces en Jerusalén un hombre llamado Simeón; este hombre era realmente recto y piadoso; esperaba el consuelo de Israel y el Espíritu Santo residía en él.

26. El Espíritu Santo le había revelado que no moriría sin ver al ungido del Señor.

27. Movido, pues, por el Espíritu, fue al templo. Al entrar los padres con el niño Jesús para cumplir la disposición de la ley con respecto a él,

28. Simeón lo tomó en sus brazos y bendijo a Dios, diciendo:

29. "Ahora, Señor, según tu promesa, puedes dejar irse en paz a tu siervo,

30. porque vieron mis ojos tu salvación,

31. la que tú preparaste a la vista de todos los pueblos:

32. luz para iluminar a las naciones y gloria de tu pueblo Israel".

33. Su padre y su madre estaban maravillados de las cosas que se decían de él.

34. Simeón los bendijo; luego le dijo a María, su madre: "Mira: éste está puesto para caída y resurgimiento de muchos en Israel, y para señal que será objeto de contradicción -

35. y a ti una espada te atravesará el alma-, para que queden patentes los pensamientos de muchos corazones".

36. También estaba allí una profetisa, Ana, hija de Fanuel, de la tribu de Aser. Tenía ya una edad muy avanzada. Casada cuando era jovencita, había vivido con su marido siete años

37. y ahora era viuda con ochenta y cuatro. No se apartaba del templo, sirviendo a Dios noche y día con ayunos y oraciones.

38. Presentándose en aquel mismo momento, glorificaba a Dios, y hablaba del niño a todos los que esperaban la liberación de Jerusalén.

El regreso a Nazaret

39. Una vez cumplido todo según lo que mandaba la ley del Señor, se volvieron a Galilea, a su ciudad de Nazaret.

40. El niño crecía, se fortalecía y se llenaba de sabiduría. Y la gracia de Dios residía en él.

El niño Jesús en el templo

41. Iban sus padres todos los años a Jerusalén por la fiesta de Pascua.

42. Cuando cumplió los doce años, subieron a la fiesta, según la costumbre.

43. Terminados aquellos días, al regresar ellos, el niño Jesús se quedó en Jerusalén sin que lo notaran sus padres.

44. Creyendo ellos que estaría en la caravana, hicieron una jornada de camino. Luego se pusieron a buscarlo entre los parientes y conocidos;

45. pero, como no lo encontraron, se volvieron a Jerusalén para buscarlo.

46. Y resultó que a los tres días lo encontraron en el templo, sentado ante los doctores, escuchándolos y haciéndoles preguntas.

47. Todos los que lo oían se quedaban asombrados de su talento y de sus respuestas.

48. Al verlo, se quedaron profundamente impresionados. Entonces su madre le dijo: "Pero, hijo: ¿por qué nos has hecho esto? Mira que tu padre y yo, llenos de angustia, te estábamos buscando".

49. Pero él les contestó: "¿Por qué me buscábais? ¿No sabíais que tenía que estar en la casa de mi Padre?".

50. Pero ellos no comprendieron lo que les decía.

51. Bajó con ellos y regresó a Nazaret; y vivía bajo su autoridad. Pero su madre retenía cuidadosamente todas estas cosas en su corazón.

52. Y Jesús iba progresando en sabiduría, estatura y gracia ante Dios y los hombres.