Cantares 7:10 Explicación | Estudio | Comentario Bíblico de Matthew Henry

Estudio Bíblico | Explicación de Cantares 7:10 | Comentario Bíblico Online

1. Por tercera vez (v. Cnt 7:10; comp. con Cnt 2:16 y Cnt 6:3), la sulamita proclama la exclusiva pertenencia mutua de su amado pastorcillo y de ella. Tras desdeñar olímpicamente todos los halagos del rey, asegura que ella es solamente de su amado y que el deseo (lit.) de su amado es solamente hacia ella. ¿Quién no ve aquí una reminiscencia de Gén 3:16, pero a la inversa? Comenta la Biblia de Jerusalén, en nota a este versículo: «Gén 3:16 contraponía la atracción que empuja a la mujer hacia el hombre a la autoridad discrecional de éste. Distinta es la actitud de Yahvéh para con su esposa mística: los anhelos del amor sustituyen al dominio». ¡Que Cristo sienta deseo hacia nosotros, miserables pecadores, ingratos y rebeldes, es un misterio del infinito, inexplicable, pero adorable, amor del Dios que es Amor! (Jua 3:16; Rom 5:5; Rom 8:39; 1Jn 4:8, 1Jn 4:16).

2. Al dirigir ahora (vv. Cnt 7:11-13) la palabra a su amado, la sulamita le invita (¿Quizás ha reaparecido o se dirige a él imaginariamente?) a salir al campo, lejos de la regia residencia, para pasar la noche tranquilos en las aldeas solitarias (v. Cnt 7:11). Es una invitación a disfrutar de la primavera. Al parecer, ha pasado un año desde la otra primavera (v. Cnt 2:10.) en que él la invitó, pero ahora la invitación procede de ella. También el Señor, lleno de compasión hacia sus fatigados discípulos, les invitaba a recogerse en la soledad con Él, a fin de reposar y tener tranquila comunión con Él (v. Mar 6:31). Entusiasmada con el pensamiento de volver a casa con su amado, ya se representa en su imaginación las escenas familiares de ir a ver si ya brotan las vides, si han florecido los granados (v. Cnt 7:2). Dice Lehrman: «Tan impaciente está por volver a casa que le suplica posponer hasta entonces sus manifestaciones de amor hacia ella» (Ver el final del v.).

3. El capítulo termina (v. Cnt 7:13) con el ofrecimiento de la sulamita a su amado de toda clase de dulces frutas, nuevas y añejas, es decir, de las recién recogidas y de las puestas a secar, que para él ha guardado. ¿Qué frutos tenemos nosotros en reserva para nuestro Amante Salvador? ¿Cómo está la temperatura espiritual de nuestra alma, si ha de entrar a cenar con nosotros, y nosotros con Él? (Apo 3:20). Cita en particular (v. Cnt 7:13) las mandrágoras (hebr. dudaím, relacionado con dodim, amor), fruta del tamaño de una manzana pequeña, de color rojizo y de sabor muy agradable; se las consideraba como excitantes, es decir, afrodisíacas (v. Gén 30:14 y ss. así como el comentario a ese lugar).

Cantares 7:10 explicación
Cantares 7:10 reflexión para meditar
Cantares 7:10 resumen corto para entender
Cantares 7:10 explicación teológica para estudiar
Cantares 7:10 resumen para niños
Cantares 7:10 interpretación bíblica del texto

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí