Curso para Ujieres – Detalles prácticos para formar un cuerpo de ujieres
El ujier que sinceramente sonríe le está diciendo al visitante o miembro de la iglesia: “me siento muy feliz. ¿Lo está usted?” De la misma forma, un saludo de mano amistoso y una palabra de bienvenida alegra el corazón de la persona. Así como el campesino prepara la tierra para sembrar, el ujier prepara el ambiente propicio que motiva una experiencia genuina de adoración. El ujier es un obrero de Dios, un colaborador del pastor y de la congregación.