Estudio Bíblico | Explicación de Génesis 3:9 | Comentario Bíblico Online
El emplazamiento de estos desertores delante del justo Juez.
I. La alarmante pregunta con que Dios acosó a Adán y le detuvo: ¿Dónde estás tú? No, en qué lugar, sino en qué condición. «¿Es esto todo lo que has conseguido por comer del fruto prohibido?»
Nota: 1. Esta demanda hecha a Adán podría considerarse como una benévola persecución, como una fineza, a fin de restaurarle.
Nota: 2. Si los pecadores considerasen bien dónde se encuentran no descansarían hasta volverse a Dios.
II. La temblorosa respuesta que Adán dio a dicha pregunta: Oí tu voz en el huerto, y tuve miedo (v. Gén 3:10). No se responsabiliza de su culpa, pero, sin embargo, la confiesa de algún modo al expresar su miedo y su vergüenza.