Estudio Bíblico | Explicación de Isaías 16:6 | Comentario Bíblico Online
La petición de Moab es rechazada.
1. En un rápido giro, vemos ahora los pecados de que se acusa a Moab (v. Isa 16:6): El orgullo, con sus múltiples facetas: soberbia, arrogancia, altivez y falsas jactancias. «Hemos oído, dice el profeta, la soberbia de Moab.» Como si dijese: «Todo el mundo la conoce». Y, como suele ocurrir con los orgullosos, eran también altivos, de mal genio y quisquillosos, y falsamente jactanciosos, es decir, mentirosos, pues se jactaban de lo que no eran ni tenían. Es probable que el orgullo haya llevado a la ruina mayor número de almas que ninguna otra pasión.
2. A continuación vemos los castigos con que Moab es amenazado (v. Isa 16:7): «Por tanto, en castigo de su gran orgullo, aullará Moab (los moabitas) por Moab (por su país)». «Gemiréis, dice a continuación, dirigiéndose directamente a ellos en segunda persona, por las tortas de pasas de Quirjaréset» (v. Isa 16:7). Se hacían con pasas y harina y eran consideradas como la confitura más delicada (v. Cnt 2:5). Comenta Moriarty que «se consumían en las fiestas paganas y tal vez se ofrecían a la diosa cananea Aserá (Ose 3:1)». Dichas deliciosas tortas no estarán ya más al alcance de los moabitas, porque habrán desaparecido tanto las viñas de donde salían las pasas como los campos de cereal de donde salía la flor de harina. En efecto:
(A) «Los campos de Jesbón (v. Isa 16:8) se han marchitado, la vid de Sibmá» (lit). Eran unas vides tan escogidas que se habían extendido por todo el país, llegando a Yazer por el norte, al desierto por el este, y hasta el otro lado del mar (del mar Muerto) por el oeste.
(B) Desaparecidos los campos fértiles y las viñas de escogidas vides, no cabe sino llanto y lamentación (v. Isa 16:9). «Quitado es el gozo y la alegría del campo fértil» (v. Isa 16:10). Cesan los cánticos de los que vendimiaban, así como de los que pisaban las uvas en el lagar. Si se destruyen las viñas y las higueras, se acaba la alegría de todo corazón carnal (Ose 2:11, Ose 2:12). Pero una persona espiritual puede regocijarse en el Señor como en el Dios de su salvación incluso cuando no florece la higuera ni hay fruto en la vid (Hab 3:17, Hab 3:18).
(C) El profeta mismo se siente conmovido por esta desolación (v. Isa 16:11): «Por eso, mis entrañas vibran como un arpa por Moab, y mi interior por Quir-jares (es el mismo Quir-jaréset del v. Isa 16:7)». Todo creyente sincero debe lamentarse, no sólo por las aflicciones de sus hermanos en la fe, sino también por las del mundo en general (v. Isa 15:5).
3. En los versículos Isa 16:12-14, vemos la insuficiencia de los dioses de Moab para proteger a los moabitas: Cuando fatigados, ya sea por la guerra, ya sea por llegar pronto a los lugares altos donde celebraban sus cultos paganos (comp. con Isa 15:2), acudan allá a orar a sus ídolos, no les valdrá (lit. no prevalecerá). Comenta Slotki: «Ni la defensa física (o adoración) en el lugar alto, ni la oración a sus ídolos en su santuario salvarán a un pueblo al que el Señor ha condenado». Dios ha determinado (v. Isa 16:13) la destrucción de Moab dentro de tres años (v. Isa 16:14) y tal destrucción se llevará a cabo puntualmente, como los años de un jornalero (comp. con Isa 21:16), es decir, tan puntualmente como se termina el tiempo en que se ha concertado el alquiler de un jornalero, el cual no es como el esclavo que trabaja a tiempo completo.
