Isaías 23:1 Explicación | Estudio | Comentario Bíblico de Matthew Henry

Estudio Bíblico | Explicación de Isaías 23:1 | Comentario Bíblico Online

Al ser Tiro puerto de mar, la profecía de su caída comienza y termina convenientemente con un «¡Aullad, naves de Tarsis!» (vv. Isa 23:1, Isa 23:14), pues todos sus negocios, su riqueza y su prestigio dependían de sus barcos. Si la industria naviera hacía quiebra, todos ellos estaban perdidos.

1. Vemos primero el florecimiento de Tiro. Los mercaderes de Sidón, que traficaban por mar, la habían abastecido anteriormente (v. Isa 23:2). Sidón era la ciudad más antigua de Fenicia, situada también en la costa del Mediterráneo y un poco más al norte. Tiro fue al principio una colonia de Sidón, pero después la hija creció más que la madre. Egipto la había ayudado mucho a crecer (v. Isa 23:3). Shijor es el nombre que se da al Nilo en el versículo Isa 23:3. Desde ese río, y luego por el mar, los egipcios negociaban con Tiro; así que esta ciudad se hizo rica y grande con el comercio, sin otros arados que los que surcan las aguas. Era una ciudad alegre (v. Isa 23:7), conocida por su jolgorio. Esto la hacía muy poco dispuesta a dar oídos a las advertencias que Dios le hacía por medio de los profetas. Su misma antigüedad (v. Isa 23:7) contribuía a que se sintiese segura. Era una ciudad tan ilustre que repartía coronas (v. Isa 23:8), una vez que se había coronado a sí misma. Sus negociantes eran príncipes; sus mercaderes, los honorables de la tierra, respetados por todos, y en todas partes.

2. Vemos después su caída. No parece ser que esto le ocurriese por haber provocado a sus vecinos, sino más bien por haberlos tentado con sus riquezas; pero, si fue esto lo que indujo a Nabucodonosor a caer sobre Tiro, tuvo que salir muy decepcionado, ya que, después de haber aguantado el asedio por trece años, sus habitantes se marcharon por mar, llevándose todos sus bienes, de forma que no le dejaron a Nabucodonosor otra cosa que la ciudad desierta y desnuda. La destrucción fue completa: No quedó casa (v. Isa 23:1). El profeta incita a Sidón a avergonzarse, porque el mar (v. Isa 23:4) se queja de haberse quedado ahora sin naves que lo surquen, como una madre que se queda sin hijos, hasta el punto de olvidársele que en algún tiempo dio a luz (v. Isa 23:4). Egipto mismo se turba ante las nuevas que le llegan de la caída de Tiro (v. Isa 23:5). Ya que tienen el mar al lado, lo mejor que pueden hacer es huir por mar al país más lejano, a España (v. Isa 23:6), pues Tarsis, como sabemos, es el Tartessos que hubo cerca de Cádiz, donde ya tenían por entonces los fenicios una colonia.

3. El profeta les declara luego (vv. Isa 23:9.) quién es el que ha traído sobre ellos este desastre: Lo ha hecho Jehová de las huestes, a fin de castigarla por sus pecados; especialmente, por su soberbia (v. Isa 23:9). Dios trata de convencer a los hombres de cuáles son sus designios: Persuadirles de la vanidad e inseguridad de toda gloria terrenal, y mostrarles cuán pronto se marchita aun cuando parezca algo muy duradero. ¿Para qué se glorían los hombres de su erudición, de su pompa, de su poder y de su gloria? ¡Que contemplen las ruinas de Tiro y vean toda su gloria ensuciada, marchita y enterrada en el polvo! Como los señorones fenicios habrán perdido su poder opresor, los nativos de Tarsis (v. Isa 23:10) habrán quedado libres para surcar el mar en todas direcciones, del mismo modo que el Nilo desborda todos sus bancales. La mano de Dios (v. Isa 23:11) está extendida sobre el mar, de modo que a los fenicios no les valdrá refugiarse en Quitim, es decir, Chipre, porque tampoco allí tendrá reposo. Sidón, en el versículo Isa 23:12, representa a todo el país, pero se la singulariza con el apelativo de virgen «porque nunca anteriormente había sido conquistada» (Slotki). El versículo Isa 23:13 resulta muy oscuro en este contexto. La interpretación más probable es que, aunque Asiria (Senaquerib, el año 702 a. de C.) derrotaría a los caldeos (Babilonia), no habían de pensar los fenicios que el peligro caldeo había pasado. Más tarde, Babilonia había de levantar la cabeza bajo Nabucodonosor y conquistar las ciudades fenicias; en concreto, Tiro, pues, en la segunda parte del versículo Isa 23:13, según Moriarty, «se describe el largo asedio por Nabucodonosor».

Isaías 23:1 explicación
Isaías 23:1 reflexión para meditar
Isaías 23:1 resumen corto para entender
Isaías 23:1 explicación teológica para estudiar
Isaías 23:1 resumen para niños
Isaías 23:1 interpretación bíblica del texto

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí