A la edad de 7 años, el pequeño Jordan Ford, de la ciudad de Milwaukee, Wisconsin (EE.UU.), publicó un libro sobre la fe y la perseverancia. Autor de “The Plane Who Couldn’t Fly” (El avión que no podía volar), experimentó una extraordinario sanidad.
Jordan tuvo problemas de habla y lenguaje hasta los cuatro años de edad. “Cuando Jordan nació, tenía muchos desafíos en términos de habla y lenguaje. La gente quería etiquetarlo y decirle que no podría hablar”, dijo el padre de Jordan, Raphael Ford, a CBN News.
Cristianos, los padres del pequeño se aferraron a Dios y ocurrió un milagro. “Mi esposa y yo lo pusimos en terapia del habla, terapia ocupacional, y nunca renunciamos a nuestra fe en Dios”.
Cuando habla del libro que escribió, Jordan dice que quiere llevar esperanza e inspiración a otros niños. “Escribí porque quería que la gente supiera que puede ser lo que quiera”, dijo, quien tiene el sueño de ser un científico, un ingeniero robótico y un filántropo.
El padre del pequeño autor dijo que el libro “se trata de no rendirse nunca, se trata de arraigarse y cimentarse en la fe para que no tengas miedo de las circunstancias cada vez que los desafíos se te presenten”.
Y reafirmó la fe de la familia que siempre creyó que Dios revertiría su condición.
“Pero, por supuesto, Dios ha mostrado al mundo que no sólo habla, sino que es muy inteligente. Y doy gracias a Dios por ello, porque la fe lo es todo”, concluyó Rafael.