Cuando estás por la mitad te queda la otra mitad. Es un punto raro, porque has llegado hasta el medio, pero el medio no es el final, y muchas veces estar en el medio, ni siquiera es estar a la mitad. Y una mitad sin la otra no está completa. La cosa es que estoy en la mitad de muchas cosas, y todas ellas deben ser completadas, con responsabilidad. Pardon mi enredo signore…
Tengo también preguntas sobre la mitad:
– ¿Existe tal cosa como estar en la mitad de la vida, si uno no sabe si lo que queda es exactamente «la mitad», es decir: igual cantidad de años que lo que ha vivido?
– ¿Existe alguna cosa como estar en la mitad de la «vida cristiana»? Si el cristiano es participante de la vida eterna entonces su vida como cristiano es para siempre, ¿cuál sería la mitad si la eternidad para el hombre tiene principio pero no fin?
– ¿Existe tal cosa como la mitad del camino si uno no sabe si podrá terminar?
– ¿O la mitad de la carrera?
– ¿O la mitad de una amistad?
¡CARAJOS! ¿EXISTIRÁ LA MITAD?
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