Confía en Dios aun cuando te toque sufrir

En la vida no todo es color de rosa, a veces vamos a tener sufrimientos que nos llegan por medio de adversidades. Los hijos de Dios no nos vamos a librar de dolores y problemas, y muchos piensan que estas cosas solo les suceden a los que no son hijos de Dios.  De hecho, se puede decir que nosotros vamos a pasar más pruebas que los demás, pero en un sentido diferente. Hay un buen propósito para ello.

Muchos se creen que porque ahora ya son hijos de Dios, que Él los va a librar de toda adversidad. De hecho, muchos que están sufriendo a consecuencia de sus propios pecados y se arrepienten por medio de la Fe en Cristo, creen que ahora ya se debe terminar todo sufrimiento en sus vidas.

Esto no es cierto. En este mundo de pecado todos vamos a sufrir, pero hay una diferencia grande entre unos y otros. Los incrédulos sufren muchas cosas, pero sus sufrimientos no les aprovechan. No aprenden a temer a Dios ni a cambiar su conducta, sino que  siguen cayendo en pecados que al final terminan destruyéndolos.

 

Cuando somos niños en la Fe nos extrañamos cuando nos llegan las adversidades, y no entendemos. Nos preguntamos: ¿Dónde está Dios en todo esto? ¿Puedo confiar en Él en estos momentos? La Biblia nos recomienda ir al Señor buscando su ayuda porque el amor de Dios rodea a la persona que confía en El.

¿Confías en Dios? ¿Está Dios realmente contigo en los momentos de dolor que pueden ser casi inaguantables a veces? ¿Tienes una relación con Dios tal que aunque no lo veas sabes que está contigo aun cuando estás sufriendo? No es fácil confiar en Dios en tiempos angustiosos. A nadie le gusta sufrir, y cuando sufrimos queremos ser aliviados lo más pronto posible.  El apóstol Pablo le rogó a Dios tres veces que le quitara el aguijón en la carne, (que no sabemos con seguridad qué era), hasta que entendió que no era la voluntad de Dios hacerlo.

A veces es más fácil obedecer a Dios que confiar en Él. Esta es también una prueba que debemos pasar, y demostrar cuan de firme es nuestra Fe, aun cuando puede que no entendamos los caminos de Dios.

 

Cuando desobedecemos a Dios desafiamos su autoridad, pero cuando fallamos en confiar en El dudamos de su Soberanía y cuestionamos Su bondad. En cualquiera de los casos maldecimos Su majestad y Su buen nombre. Para poder confiar en Dios, siempre debemos ver nuestras circunstancias adversas con los ojos de la Fe, no con los de los sentidos. Igual que en el caso de la salvación, la fe que salva viene de oír el mensaje del Evangelio (Romanos 10:17), así la fe para confiar en Dios para la adversidad viene únicamente por la Palabra de Dios.

Es solo en las Escrituras que encontramos la relación que Dios juega en nuestras circunstancias dolorosas y la necesidad de confiar en El. Es solo por medio de las Escrituras, aplicadas a nuestros corazón por el Espíritu Santo, que recibimos la gracia necesaria para confiar en Dios en las adversidades.

Hay tres cosas esenciales que podemos aprender sobre Dios.

  1. Dios es Soberano
  2. Dios es infinito en Sabiduría
  3. Dios es perfecto en Amor

Todo lo que Dios permite en las vidas de Sus hijos va a ser para bien. Puede que nosotros no lo veamos así por un tiempo, pero esta es una de las más grandes verdades de la Biblia. Cualquiera que sea nuestra adversidad, podemos estar seguros que nuestro Padre celestial tiene propósito bueno en ello.

Como dijo el Rey Ezequias:

“Sin duda fue para mí beneficio que he pasado tanta angustia” Isaías 38:17.

Dios no ejecuta su soberanía a capricho, sino que permite solo lo que considere que va a ser bueno para nosotros. Esto, casi siempre se refiere a nuestro bien espiritual, a nuestro crecimiento y santificación.   

Recordemos el pasaje de Isaías 55:

“Vuestros pensamientos no son mís pensamientos, ni vuestros caminos, mís caminos”.

Veamos también Lamentaciones 3:31-33

“Porque el Señor no desecha para siempre, antes si aflige, también se compadece según la multitud de sus misericordias, porque no aflige ni entristece voluntariamente a los hijos de los hombres”.

Santa Biblia, vs. Reina Valera


Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.