El culto más corto de la historia eclesiástica.


El pastor Tim Christensen, de una Iglesia Luterana en Montana, Estados Unidos, realizó un culto en solo un minuto para no perder el partido de fútbol americano de su equipo favorito.


Hincha del equipo de San Francisco 49ers, el religioso resolvió anunciar a los fieles que el sermón de ese día sería diferente, porque no podía llegar tarde para ver el partido de fútbol.

«Tal vez ustedes no saben, pero un partido de fútbol comenzará en unos instantes. No es que tenga algún interés en el juego, pero creo que podemos tener una especie de servicio abreviado«, dijo con ironía.

Christensen dijo entonces que todos fueron perdonados de sus pecados y que había pan y vino en la mesa invitando a los fieles a servir la Santa Cena por su cuenta.

Después de explicar todo, el pastor abrió su vestimenta y mostró la camisa de su equipo diciendo «Me voy». El pequeño culto fue filmado y fue noticia en el diario «The Guardian».



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