¡Oh, si rompieses los cielos, y descendieras, y a tu
presencia se escurriesen los montes, como fuego abrasador
de fundiciones, fuego que hace hervir las
aguas, para que hicieras notorio tu nombre a tus enemigos, y las
naciones temblasen a tu presencia! (ISAÍAS 64:1, 2
RVR60)
¿Como podemos cultivar el fuego de Dios en nuestro corazón? ¿Como
podemos reiniciar el fuego de Dios en nuestra vida? Dios pedía
que el fuego siempre estuviera encendido en el tabernáculo de
Dios. Ese era el oficio más importante de un sacerdote. ¿Acaso
esta olvidado el altar del holocausto en nuestras vidas? ¿Sera
que esta olvidado este oficio?
Si pudiéramos tomar una foto de nuestro altar tal vez seria una
hoguera humeante ya sin fuego, tal vez las cenizas de algo que
fue pero que ahora solo humea. Tal vez solo hay cenizas o ya no
queda nada. ¿Como esta tu altar del holocausto?
Oficio
Levítico
Habló aún Jehová a Moisés, diciendo: Manda a
Aarón y a sus hijos, y diles: Ésta es la ley del holocausto: el
holocausto estará sobre el fuego encendido sobre el altar toda la
noche, hasta la mañana; el fuego del altar arderá en él. Y
el sacerdote se pondrá su vestidura de lino, y vestirá
calzoncillos de lino sobre su cuerpo; y cuando el fuego hubiere
consumido el holocausto, apartará él las cenizas de sobre el
altar, y las pondrá junto al altar. Después se quitará sus
vestiduras y se pondrá otras ropas, y sacará las cenizas fuera
del campamento a un lugar limpio. Y el fuego encendido
sobre el altar no se apagará, sino que el sacerdote pondrá en él
leña cada mañana, y acomodará el holocausto sobre él, y quemará
sobre él las grosuras de los sacrificios de paz. (LEVÍTICO 6:8-12
RVR60)
El oficio levítico era un oficio muy privilegiado, hoy en día
gracias a Jesucristo todo podemos ofrecer sacrificios de
alabanza, frutos de labios que bendigan su nombre. Aquello que
nos impedía llegar a la viva presencia de Dios fue quitado
gracias al sacrificio de Cristo. Aun el pecado fue quitado, el
pecado nos impedía llegar a Jesús y al Padre.
Ahora el pecado solo puede atacar la mente y lograr su objetivo,
pero la palabra de Dios ha venido a liberarnos de la mente
pecaminosa. Ahora podemos llegar con libertad a la presencia de
Dios aplicando la verdad de la palabra de Dios a nuestra vida. Es
por su fidelidad a su palabra y la justicia que el logro por
nosotros en la cruz.
“Y el fuego encendido sobre el altar no se
apagará”
El fuego no se
apagará
Cristo es el fuego, nuestro corazón es el altar y el la leña no
debe faltar. Esa es la responsabilidad del sacerdote o levita.
¿Que tienes que quemar en el altar? ¿Pecados no confesados,
falta de perdón, lujuria, maldición, vicios, infidelidad, falta
de amor? O simplemente rendir todo a él. Decirle esta es mi vida
tómala, es tuya Señor has de ella lo que quieras.
!!Ay de mí! que soy muerto; porque siendo hombre
inmundo de labios, y habitando en medio de pueblo que tiene
labios inmundos, han visto mis ojos al Rey, Jehová de los
ejércitos. Isaías 6:5
Isaías ofreció sus labios inmundos ¿y tu que le puedes ofrecer?
Mi pecado te declaré, y no encubrí mi
iniquidad.
Dije: Confesaré mis transgresiones a Jehová;
Y tú perdonaste la maldad de mi pecado. Salmo 32:5
David ofreció sus pecados, iniquidades y toda maldad, ¿Tu que le
estas ofreciendo?
Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo
para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad. 1
Juan 1:9
¿Y tú que le vas a ofrecer este día?
Dios recibe todo, gratitud, amor, pecados, maldiciones,
bendiciones. No hay impedimento para llegar a el. No hay
impedimento para que llegues hoy a el.
Bendiciones
Abdiel Salas
Leer Mi blog de Mensajes Cristianos en Blog Cristiano de Abdiel Salas
Deja una respuesta