Enoc vivió de acuerdo con la voluntad de Dios.
El capítulo cinco del libro de Génesis plasma una lista de los descendientes de Abraham. Dicen los estudiosos que la misma no es exhaustiva, simplemente descriptiva, y pone de manifiesto la continuidad de la historia humana desde la creación hasta el diluvio.
En la lista aparecen un buen número de personajes de los cuales se da una información escasa, quiénes eran, cuántos años vivieron y cuántos hijos tuvieron, nada acerca de sus logros, su vida, su impacto positivo o negativo ¡Nada, absolutamente nada! a excepción de uno de ellos, Enoc.
Es el único de los nombrados en la lista del cual se menciona algo más y en este caso aquello que se dice es bien significativo que vivió de acuerdo con la voluntad de Dios. La versión Reina-Valera de la Escritura dice que caminó Enoc con Dios. Caminar, en el contexto de la Biblia, es una manera de expresar el vivir cotidiano. De ello puedo deducir que Enoc era un hombre que tenía integrado al Señor en su forma cotidiana de vivir.
Entre todos los nombrados en este capítulo sólo él destacó por su forma de vivir conforme, tal y como Dios esperaba. Esto me ha hecho pensar en mi propia vida persona y si puedo afirmar lo mismo acerca de mi vida ¿destaco por tener integrado al Señor en mi vida cotidiana? ¿Destaco por vivir en conformidad con su voluntad?
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