La Palabra Inspirada Por Dios – Acercándonos A Dios

 “Acercándonos a Dios”

Introducción: La pasada semana comenzamos nuestra travesía en la Palabra de Dios. Hemos compartido que nuestro propósito como iglesia es que cada uno de nuestros miembros tenga una base firme en la Palabra de Dios y además, que cada miembro comience a practicar las cosas que ha aprendido de la Palabra escrita de Dios. Hoy me gustaría avanzar en nuestro estudio de la Palabra escrita de Dios, examinando más detenidamente el proceso de acercarnos a Jesús por medio de la Palabra escrita de Dios.

¿Cómo nos acercamos a Dios?

En este mundo de tecnología y sociedad acelerada, frecuentemente nos encontramos sin tiempo para Dios. Si nos preguntaran cuán importante es Jesús en nuestra vida, con toda seguridad diríamos que Él es lo más importante. Lo triste es que al mirar nuestros horarios, vemos que éstos comunican un mensaje muy diferente. A menudo estamos muy ocupados para tener tiempo con Dios. De acuerdo a las Escrituras, el tener un tiempo con Dios puede ser desglosado en tres diferentes expresiones:

 “Acerquémonos con corazón sincero,  en plena certidumbre de fe,  purificados los corazones de mala conciencia,  y lavados los cuerpos con agua pura.  Mantengamos firme,  sin fluctuar,  la profesión de nuestra esperanza,  porque fiel es el que prometió.  Y considerémonos unos a otros para estimularnos al amor y a las buenas obras; no dejando de congregarnos,  como algunos tienen por costumbre,  sino exhortándonos;  y tanto más,  cuanto veis que aquel día se acerca”. Hebreos 10:22-25.

1.   Nos acercamos a Dios a través de la oración – Hebreos 10:23.- Existen varios tipos de oración, pero de la que habla en este pasaje, es una oración que tomamos como una profesión. Es una declaración exterior de lo que somos. Al hacer este tipo de oración nos acercamos a Dios, porque el proceso de cambio ha comenzado a operar.

2.   Nos acercamos a Dios por medio del estudio de Su Palabra – Hebreos 10:23.- La otra mitad del proceso de acercamiento tiene que ver con descubrir quiénes somos en Cristo, y comenzar a confesar esas realidades en nuestra vida.  La Palabra de Dios presenta un cuadro claro de quienes somos. La responsabilidad del creyente es abrir las páginas de la Biblia y aprender, cómo quiere Jesús que él sea. Una vez que eso sucede y con la ayuda del Espíritu, puede comenzar a moldearse a esa imagen.

3.   Nos acercamos a Dios pasando tiempo con otros creyentes – Hebreos 7:17-22.- También encuentro interesante, que este pasaje de las Escrituras, resalte la importancia de lograr éstas primeras expresiones de cercanía a otros creyentes. Pareciera que Dios no nos permitiera alcanzar un cierto nivel de devoción a Él, a menos que lo hagamos desde un contexto familiar y colectivo, llamado iglesia.

“Pues se da testimonio de él: Tú eres sacerdote para siempre, según el orden de Melquisedec.  Queda,  pues,  abrogado el mandamiento anterior a causa de su debilidad e ineficacia (pues nada perfeccionó la ley),  y de la introducción de una mejor esperanza,  por la cual nos acercamos a Dios.  Y esto no fue hecho sin juramento; porque los otros ciertamente sin juramento fueron hechos sacerdotes;  pero éste,  con el juramento del que le dijo: Juró el Señor,  y no se arrepentirá: Tú eres sacerdote para siempre, según el orden de Melquisedec.  Por tanto,  Jesús es hecho fiador de un mejor pacto”. Hebreos 7:17-22.

Ahora existe una mejor ley y un mejor testamento. Por definición, un testamento es una carta que explica cómo deben ser distribuidas las posesiones de una persona después de que ha fallecido. Es un libro de propiedad que muestra quién tiene qué.  No quiero dar la idea de que la Biblia sólo esta para mostrarnos lo que podemos conseguir de Dios, al contrario, la Biblia es un testamento que nos muestra claramente cómo podemos acercarnos a Dios en una relación próspera y de constante crecimiento. Estudiamos la Palabra de Dios para acercarnos a Él y para saber quiénes somos.

El grado de tu relación con Cristo se expresa a través de la cantidad de tiempo que pasas en la Biblia

En otras ocasiones he compartido acerca de la recomendación que doy a los jóvenes cuando me piden consejo para su futuro. Parece que siempre tienen conflicto en cuanto a la dirección que deben seguir para el futuro. Generalmente piensan que sus errores fueron resultado de no haber podido escuchar a Dios, creen que si sólo pudieran escuchar a Dios y saber qué es lo que Él quiere que hagan, podrían hacer lo que Él quiere para su futuro.  Normalmente, puedo ver que en parte tienen razón, y en parte están equivocados. La verdad es que si fueran capaces de escuchar a Dios, podrían conocer Su voluntad más claramente, pero se equivocan al pensar que la voz de Dios y Su voluntad son difíciles de encontrar. A continuación se indican algunas claves para ayudar a que te mantengas en la senda correcta, con respecto a conocer la voluntad del Padre:

  • Dios está hablando todo el tiempo – Proverbios 8:1-11.- Las Escrituras nos muestran que la sabiduría habla en voz alta constantemente. Podemos decir que la sabiduría, es Dios hablando. Él no es mudo y no se ha olvidado cómo hablar. Lo cierto es que Él quiere y está dispuesto a hablarnos todo el tiempo, simplemente necesitamos comprender cómo habla.
  • Muchas veces no nos damos cuenta que Él está hablando, porque estamos fuera de Su frecuencia.- Estamos tan ocupados, que no escuchamos la voz de Dios, a pesar de que Él está hablando todo el tiempo. Una de las principales razones, por las que la gente no escucha a Dios, es porque no comprende la manera principal en la que desea hablarnos. La manera principal en la que Él desea hablarnos, es a través de la Palabra escrita de Dios, la Biblia. Él revela Sus planes, deseos y voluntad a través de la Biblia, esa es la manera en que prefiere comunicarse con nosotros. No le escuchamos hablar porque estamos fuera de su frecuencia.
  • Mientras más leemos, meditamos y estudiamos la Palabra escrita de Dios, más sincronizamos nuestros oídos a Su frecuencia.-  No es la responsabilidad de Dios cambiar, para que podamos entenderle más claramente; es nuestra responsabilidad hacer lo que sea necesario para cambiar, de modo que nos pongamos en Su frecuencia. Esto se logra por medio de la lectura, estudio, meditación y práctica de la Palabra de Dios. Estas cuatro aplicaciones nos ayudan a sincronizarnos a la frecuencia del Padre.
  • La Palabra escrita de Dios, es la voluntad de Dios.-  Dios no tiene un deseo o un plan más alto para nosotros, que no haya sido ya revelado en las Escrituras. Éste es el plan de Dios para nuestra vida. Mientras más nos transformamos en aquellas personas que se revelan en las páginas de la Biblia, más complacido estará Jesús con nosotros.

La Biblia es el cordón umbilical que te conecta con Dios. Mientras más tiempo emplees leyéndola, estudiándola, meditando en ella y haciendo lo que dice, más cercana será la relación que tengas con el Padre, y más conocerás a Jesús. Así que, más tiempo en la Palabra de Dios equivale a una relación más firme con Dios. Aquellos que conocen a Dios ponen Su Palabra como una prioridad.

La pregunta es: ¿Quieres acercarte a Jesús?

El mensaje que comparto contigo este día es uno peligroso porque asume algo. Asume que tienes un deseo apasionado de acercarte a Dios.  Es peligroso también, porque te pone en una posición que casi con seguridad, te exige que cambies.

  • Te exige que digas no a las cosas que te distraen, de modo que puedas ir más profundo, en la Palabra escrita de Dios.  La Biblia exige devoción absoluta.
  • Te pone en la posición de aprendiz y no de maestro. Estarás constantemente sorprendido acerca de cuán poco conoces realmente sobre Dios.
  • Te pone en una posición de minoría. No todos siguen esta senda debido a su dificultad.
  • Te coloca en un proceso constante de crucifixión, al tratar de acomodarte a la imagen que la Biblia describe. Nos pone en una posición de “incomodidad” constante.
  • Te coloca en una travesía para toda la vida, que no tiene un final aparente.  Siempre estarás en el proceso de adaptación.

¿Tu deseo de acercarte a Dios es más grande, que el constante estado de incomodidad que exige de ti, la sujeción a la Biblia? Si el deseo es mayor, entonces un día podrás decir verdaderamente que conoces a Dios.

Mis consejos para ayudarte a estar más cerca de Dios, por medio de la Palabra escrita de Dios

Para concluir este mensaje me gustaría darte algunos consejos míos, para ayudar a que te acerques a Dios por medio de su Palabra escrita.

  1. Asegúrate de darle a Dios una oportunidad para hablar. Recuerda que no es la responsabilidad de Dios hacer que le escuchemos, sino que es nuestra responsabilidad ajustarnos a Su frecuencia.  Dios habla a través de la Biblia, así que mientras más leamos la Palabra de Dios, más oportunidad le daremos para hablarnos. Haz una cita con Él cada día por medio de un tiempo dedicado a la lectura bíblica.
  1. Encuentra un lugar donde no hayan distracciones. Un encuentro con Dios siempre requiere tiempo y lugar. Generalmente, cuando recordamos alguna ocasión, en la que hemos escuchado a Dios, recordamos un cierto lugar. Mi sugerencia es que acomodes o encuentres un lugar donde puedas tener tu lectura bíblica, podría ser un determinado lugar en tu casa o en cierto restaurante, en el lugar que sea, asegúrate que sea un lugar en el que puedas entrar fácilmente en un estudio bíblico sin tener distracciones.
  1. Ten un plan. Una de las más grandes maneras de perder tu tiempo durante la lectura bíblica, es no teniendo un plan. Mi sugerencia es que tengas algún devocional que te ayude a enfocarte en tu lectura bíblica diaria. No seas tan religioso con el plan, hasta llegar al punto en que Dios no pueda cambiarlo, pero asegúrate de tener un plan.  Las cosas fluirán mejor si tienes uno.
  1. Prepárate para que Dios te hable.  Muchas veces Dios no nos habla en los tiempos de meditación en la Palabra, porque no consideramos como alta prioridad, que Él nos hable.  Lo que quiero decir es que si tenemos una Biblia, un cuaderno y un bolígrafo para escribir, las probabilidades de que nos hable, aumentarán. Durante tu tiempo de devocional bíblico, debes estar preparado para escribir cosas. Ten la expectativa de que Dios hablará, y Él va a satisfacer esa expectativa.

Conclusión: Jesús está dispuesto a revelar las cosas más profundas de Dios, siempre que pongamos prioridad a la Palabra escrita de Dios. De esa manera nos acercaremos a Él.

PREGUNTAS DE APLICACIÓN

La parte más importante del estudio bíblico es ponerlo en práctica. Lee las siguientes aplicaciones, responde las preguntas y aplícalas a tu vida.

1.    ¿Que maneras has utilizado, anteriormente, para acercarte a Dios? ¿Qué piensas acerca de esas maneras, con respecto a las mencionadas en la lección?

2.    Examínate y escribe de qué manera, puedes aplicar estas tres formas para acercarte a Dios.

3.    Durante la semana, aplica los cuatro consejos mencionados en la lección y escribe que resultados obtuviste de cada uno.


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