La septima trompeta

Pastor: Domingo Arias
La séptima trompeta es la última de siete eventos enviados por Dios a la tierra, los cuales sucederán con advertencia previa.
En los tiempos antiguos las trompetas tenían un uso muy peculiar, y era que servían de aviso o alerta para preparar al ejército contra un peligro inminente: 1Co 14:8 Y si la trompeta diere sonido incierto, ¿quién se preparará para la batalla?

Cada vez que había un evento importante se tocaba la trompeta, era la señal previa de que se aproximaba ese acontecimiento o celebración: Isa 27:13 Acontecerá también en aquel día, que se tocará con gran trompeta, y vendrán los que habían sido esparcidos en la tierra de Asiria, y los que habían sido desterrados a Egipto, y adorarán a Jehová en el monte santo, en Jerusalén.

El uso de la trompeta cuyo toque simbólico representaba un aviso previo de Dios a su pueblo, aunque el profeta no andaba con una trompeta por la calle, sin embargo; su mensaje era considerado como el sonido de Dios para su pueblo: Amo 3:6 ¿Se tocará la trompeta en la ciudad, y no se alborotará el pueblo? ¿Habrá algún mal en la ciudad, el cual Jehová no haya hecho?
Amo 3:7 Porque no hará nada Jehová el Señor, sin que revele su secreto a sus siervos los profetas.
Amo 3:8 Si el león ruge, ¿quién no temerá? Si habla Jehová el Señor, ¿quién no profetizará?

En las ciudades amuralladas había un atalaya, era un hombre cuya misión consistía en ubicarse en una torre edificada sobre el muro, para vigilar día y noche y de esta manera poder advertir al pueblo sobre cualquier peligro que se avecinara, desde luego que no se trataba de una sola persona, porque ese trabajo se realizaba durante las 24 horas del día. El instrumento indispensable para el atalaya desarrollar su trabajo era una trompeta, con ella advertía al pueblo sobre algún acontecimiento inminente para que de esa manera cada ciudadano estuviera preparado, según el sonido de la trompeta el pueblo sabía lo que se avecinaba: Eze 33:6 Pero si el atalaya viere venir la espada y no tocare la trompeta, y el pueblo no se apercibiere, y viniendo la espada, hiriere de él a alguno, éste fue tomado por causa de su pecado, pero demandaré su sangre de mano del atalaya.
Eze 33:7 A ti, pues, hijo de hombre, te he puesto por atalaya a la casa de Israel, y oirás la palabra de mi boca, y los amonestarás de mi parte.

En el Nuevo Testamento se utiliza la palabra trompeta en veinte citas diferentes, veamos esto dividido en dos grupos:

1- Desde mateo hasta Judas: en estos 26 libros aparece mencionada en seis ocasiones (Mateo 6:2, 24:31; I Corintios 14:8, 15:52; I Tesalonicenses 4:16; Hebreos 12:19). En todas estas citas el uso de la trompeta es llamar la atención, advertir o alertar; como se puede notar la aplicación del uso no varía, sino que es el mismo que se le da en el Viejo Testamento.

2- En el libro de Apocalipsis: este es el libro del Nuevo Testamento donde mas se menciona la palabra trompeta, allí aparece en catorce versos; mas del doble del uso que se le da en los otros 26 libros del N T.

¿Qué uso se le da al toque de trompeta en el libro de Apocalipsis?
Dos citas la presentan como un sonido fuerte y con autoridad (1:10 y 4:1), en los dos casos el sonido alegórico de la trompeta es para llamar la atención del apóstol Juan.
Las siguientes doce citas donde se menciona la trompeta (8:2, 6, 7, 8, 10,12, 13; 9:1, 13, 14; 10:7; 11:15), están relacionadas con una serie de eventos llamados “Las siete trompetas”. Son siete ángeles, a los cuales se les dan siete trompetas; bien sabemos que los ángeles son mensajeros, así que esta muy clara su misión, la cual consiste en anunciar la llegada de un evento de gran importancia para el mundo.
Las cuatro primeras trompetas anuncian castigos sobre la tierra y el mar, la quinta trata sobre la aparición de demonios visibles con formas de animales híbridos, para castigar a los moradores de la tierra que no tengan el sello de Dios. La sexta trompeta es el anuncio de una guerra colosal, la cual estará inspirada por cuatro demonios atados en Irak, y que serán desatados para esa ocasión. La séptima trompeta es la que vamos a desarrollar a lo largo del presente tema.

Como ha sucedido desde antaño, cada trompeta lleva un mensaje de alerta, sino, no tiene sentido el uso de la trompeta.
Un detalle importantísimo sobre las trompetas es que en ninguna se hace una alusión directa o indirecta a la bestia o anticristo final, ¿por qué no se menciona?, creo que la razón es que la bestia no estará gobernando cuando la gran mayoría de ellas estén en ejecución.

Tan solo de la séptima trompeta se hace un señalamiento antes de que se cumpla, ninguna otra es mencionada con anterioridad.
Rev 10:5 Y el ángel que vi en pie sobre el mar y sobre la tierra, levantó su mano al cielo,
Rev 10:6 y juró por el que vive por los siglos de los siglos, que creó el cielo y las cosas que están en él, y la tierra y las cosas que están en ella, y el mar y las cosas que están en él, que el tiempo no sería más,
Rev 10:7 sino que en los días de la voz del séptimo ángel, cuando él comience a tocar la trompeta, el misterio de Dios se consumará, como él lo anunció a sus siervos los profetas.
Todo parece indicar que este ángel es el mismo que le había aparecido a Daniel, unos seiscientos años antes de que el apóstol Juan recibiera la revelación (Daniel 12:7). En aquella ocasión mencionó el final de un periodo que abarcaría tres años y medio, aquí, en el Apocalipsis en el segundo verso citado, señala por juramento de Dios, “que el tiempo no sería mas” ¿Qué significa esto? No se trata de la culminación del tiempo físico, sino de un acontecimiento sumamente importante que concluye para dar lugar a un cambio extraordinario. El verso siguiente nos aclara lo que parece difícil de entender en el verso seis, cuando señala que es el toque de la séptima trompeta lo que pone final a ese periodo para dar lugar a lo eterno, entendiendo que si el tiempo se termina; entonces solo queda lo eterno.
Bien sabemos que después del toque de la séptima trompeta, serán derramadas sobre la tierra las siete copas de la ira de Dios, lo que quiere decir: que después de la séptima trompeta las naciones de la tierra continuaran existiendo y rebelándose contra el Eterno Dios, y que después de derramadas las siete copas vendrá Jesús a la tierra con los millones de arrebatados, para así establecer su reino de mil años, ese milenio como se le conoce, estará limitado por el tiempo porque durará mil años; así que la terminación del tiempo en el toque de la séptima trompeta, esta relacionada con la consumación del misterio de Dios, y ¿Qué consumación mayor del misterio de Dios, que aquella donde el mundo puede ver a Dios con sus propios ojos en la persona de Jesús? En I Timoteo 3:16, el apóstol Pablo habla del misterio de la piedad, y uno de los detalles de ese misterio es que Dios “fue manifestado en carne”, Dios se convirtió en hombre, ahora la humanidad tendrá la oportunidad de ver a Dios hecho hombre viniendo en las nubes a arrebatar a su pueblo.
Hemos estado predicando sobre la venida de Jesús, los escépticos y los ateos se burlan, la gente sin fe dice ¿cuándo viene?. Creo que la manera en que el misterio de Dios se consuma es con la aparición visible de Jesús, cuando venga a arrebatar a su pueblo, allí se terminará el tiempo de la espera en que durante estos siglos la iglesia se ha mantenido, nadie podrá negar la realidad de la existencia de Jesús, que es Dios hecho hombre. También el tiempo como tal se terminará para los arrebatados, porque todos entrarán inmediatamente a la eternidad, porque como ya vimos con anterioridad, después de la segunda venida de Jesús, en el planeta tierra se seguirá contando el paso del tiempo, sólo el tiempo se termina para los que van al cielo.
Ya el apóstol Pablo muchos años antes que Juan escribiera la revelación en la isla de Patmos, había hablado de un misterio, veamos el pasaje:
1Co 15:51 He aquí, os digo un misterio: No todos dormiremos; pero todos seremos transformados,
1Co 15:52 en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta; porque se tocará la trompeta, y los muertos serán resucitados incorruptibles, y nosotros seremos transformados.
1Co 15:53 Porque es necesario que esto corruptible se vista de incorrupción, y esto mortal se vista de inmortalidad.
Pablo inspirado por el Espíritu Santo, no encuentra otra palabra para describir la transformación que sufriremos los santos a raíz de la venida de Jesús, y utiliza la palabra misterio, hay un misterio de Dios que se consumó en la persona de Cristo al manifestarse visiblemente a la humanidad, pero ese misterio al extenderse al pueblo de Dios se convierte en inmortalidad y eternidad en el ser humano que ya ha sido redimido. Eso ocurrirá en un lapso de tiempo tan rápido que es comparado como “un abrir y cerrar de ojos”, es el ultimo evento de participación de los santos en el tiempo. Todos los santos de todas las épocas que hayan dormido en el Señor serán resucitados con cuerpos glorificados, y los millones vivos que esperen su venida serán transformados y glorificados también, esto ocurrirá en la frontera del tiempo y lo eterno (un abrir y cerrar de ojos). Pablo establece cuando sucederá o se producirá el misterio que venimos analizando, él dice “a la final trompeta”, y ¿cuál es la final trompeta? La escatología es como un rompecabezas, hay que armarla con paciencia y cuidado; en esto tenemos la ventaja de que aunque la piezas muchas veces se hallan en diferentes libros, de diferentes escritores, sin embargo; cada uno de ellos tuvo la misma inspiración a través de la revelación del Espíritu Santo; así sin duda alguna podemos confiar que existe una armonía perfecta.
La final trompeta es la séptima
La única manera de ver si esto es cierto, es analizando lo que se desarrolla como consecuencia de la séptima trompeta del Apocalipsis. Ya vimos en párrafos atrás el uso de las trompetas a través de toda la Biblia, haciendo un énfasis en todos los casos del Nuevo Testamento, recordando esto debemos decir que; el toque de una trompeta representa a la advertencia de un evento de mucha importancia para la humanidad.
Rev 11:15 El séptimo ángel tocó la trompeta, y hubo grandes voces en el cielo, que decían: Los reinos del mundo han venido a ser de nuestro Señor y de su Cristo; y él reinará por los siglos de los siglos.
Lo primero que sucede al toque de la séptima trompeta se produce en el cielo y no en la tierra, allí se proclamará a viva voz la coronación de Jesús como el rey sobre todas las naciones y para siempre.
Creo que es necesario aclarar aquí que Jesús tiene poder en cielo y tierra, pero sin embargo; tal y como dice Pablo todavía no todas las cosas les son sujetas (I Corintios 15:24-28), sino que eso ira ocurriendo poco a poco, hasta la victoria final sobre Satanás, el pecado y la muerte.
Así que debemos mirar el orden de las cosas:

a- Jesús vino a morir por nuestros pecados, todo el que cree en el es salvo.

b- Hoy está a la diestra del Padre como nuestro intercesor, el libro a los Hebreos lo presenta como sumo sacerdote. Y continuará en su función intercesora hasta que tenga que venir a buscar a su pueblo, para llevarlo a las mansiones celestiales.

c- Su función cambiará a la de rey, al concluir su obra intercesora.
La séptima trompeta anuncia antes que nada, la coronación de Jesús como rey en el cielo, al solo analizar un poco cuándo esto debe pasar, por orden lógico tenemos que arribar a la conclusión de que no puede ser después del arrebatamiento sino inmediatamente antes. Ya todos los que van a ser arrebatados están listos, en breve Jesús estará descendiendo a la tierra, entonces se proclama en el cielo su coronación, al terminar su obra intercesora nosotros seremos recibido en las nubes, no por un sumo sacerdote sino por un rey, lleno de gloria y majestad.
Sería contraproducente pensar que Jesús será coronado un poco antes de venir a establecer el reino milenial, después que la iglesia ya tiene cierto tiempo en las mansiones celestiales, creo que se ve claro el hecho de que (como no existe el tiempo en el cielo) Jesús es coronado en el cielo y de inmediato desciende a arrebatar a los santos; así nos vamos a celebrar su coronación en lo que se conoce como las bodas del Codero (Apocalipsis 19:6-8).
Rev 11:16 Y los veinticuatro ancianos que estaban sentados delante de Dios en sus tronos, se postraron sobre sus rostros, y adoraron a Dios,
Rev 11:17 diciendo: Te damos gracias, Señor Dios Todopoderoso, el que eres y que eras y que has de venir, porque has tomado tu gran poder, y has reinado.

De los que aparecen en el cielo hasta ese momento solo los veinticuatro ancianos se ven directamente afectados por la coronación de Jesús para reinar sobre la tierra.
Estos dos versos vienen a recalcar el hecho de la proclamación de Jesús como el rey, y a través de Jesús también el mismo Padre, tal y como aparece explicado en el anterior verso 15.
Bien sabemos que Dios es soberano sobre todo el universo, sin embargo; puso al hombre como el rey de su creación aquí en la tierra, fue un derecho otorgado por Dios a Adán y a Eva ¿y que paso con ese derecho? Pues la primera pareja traspasó por medio del pecado ese poder a Satanás (Lucas 4:6). Es cierto que Jesús venció a Satanás en la cruz, su derrota representó la pérdida de su derecho de entrar con libertad al cielo (Juan 12:31); pero mientras exista el pecado en la tierra el diablo tiene derecho sobre nuestro planeta, así que Jesús será juramentado en el cielo como rey del mundo después que la obra de los redimidos esté completada aquí en la tierra. Es a partir de ese momento que el diablo deja de ser el rey de la tierra; esto provoca adoración en los cielos, en reconocimiento de la grandeza y majestad del Señor.
Rev 11:18 Y se airaron las naciones, y tu ira ha venido, y el tiempo de juzgar a los muertos, y de dar el galardón a tus siervos los profetas, a los santos, y a los que temen tu nombre, a los pequeños y a los grandes, y de destruir a los que destruyen la tierra.

Este verso debe ser visto parte por parte, para poder comprender a cabalidad los otros detalles que comprenden el toque de la séptima trompeta.
“Y se airaron las naciones” antes del toque de la séptima trompeta las naciones estarán enojadas contra el evangelio y los creyentes en Jesús. Y el motivo es claro, solo los creyentes en Jesús se resistirán al nuevo sistema encabezado por la bestia (que muy pronto ha de regir al mundo) por otro lado; solo los cristianos fieles serán librados de los cuatro castigos de los toques de trompetas; así que de una manera ilógica (porque no tendrán pruebas) acusarán a los creyentes de ser los causantes de las cosas que estarán pasando sobre el planeta. Esto es lo que provocará lo que se conoce como la gran tribulación, la cual no es otra cosa que una persecución mundial contra todos los que mantengan su fe en Cristo, será una persecución corta pero la más densa de toda la historia de la iglesia cristiana; por eso es el nombre de “gran tribulación”. Esa es la ira de las naciones que menciona el verso 18 sobre la séptima trompeta, ira que será alentada por el mismo diablo y su enviado la bestia.
¿Qué es lo que pone fin a la gran tribulación o ira de las naciones?
Mat 24:29 E inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, el sol se oscurecerá, y la luna no dará su resplandor, y las estrellas caerán del cielo, y las potencias de los cielos serán conmovidas.

Al comparar lo que dice este verso notamos que hace referencia al sexto sello (Apocalipsis 6:12-17). Todos estos eventos cósmicos son los que ponen fin a la ira de las naciones o gran tribulación, después de estos acontecimientos se les hace imposible seguir persiguiendo a los creyentes fieles. El sexto sello concluye con el anuncio de la llegada del día de la ira de Dios, ¡que coordinación mas maravillosa tiene la Biblia!, y es que antes de que llegue el día de la ira; el Señor vendrá a arrebatar a su pueblo (Mateo 24:30).
Seguimos con el verso en análisis de la séptima trompeta: “y tu ira ha venido”.
Después de la ira de las naciones viene la ira de Dios, el Señor sacará a su pueblo de la tierra y enviará todo el ardor de su ira sobre los que no quisieron obedecer a la verdad. La séptima trompeta así como el sexto sello anuncia la llegada del día de la ira, solo que el radio de acción de los eventos que abarca esta última trompeta es más amplio que lo que implica el sexto sello. La séptima trompeta enumera las cosas que suceden en el instante mismo de la venida de Jesús y sus ramificaciones inmediatas, mientras que el sexto sello destaca las señales de lo que sucederá inmediatamente antes de la gloriosa venida del Señor.
Apocalipsis 11:18 nos continúa diciendo: “y el tiempo de juzgar a los muertos, y de dar el galardón a tus siervos los profetas, a los santos, y a los que temen tu nombre, a los pequeños y a los grandes, ¿Qué juicio es este? Tenemos que comprender que la llegada de la ira de Dios, no producirá juicios o castigos sobre los muertos, porque los muertos en pecado tendrán que esperar los mil años del reino de Cristo para luego ser juzgados. Estos muertos no pueden ser otros que los santos que son resucitados para pasar por el tribunal de Cristo o juicio de los galardones; mientras en el planeta tierra los juicios puros de Dios el Padre caen sobre los rebeldes; en el cielo los muertos en Cristo (que son los primeros en resucitar) son juzgados por el Señor según las obras de cada uno, no para ser salvados (no somos salvos por obras), sino para ser premiados o galardonados. Pero ese galardón no es solo para los que hayan muertos y resucitados sino para profetas (antiguo pacto) y para los santos (nuevo pacto); para todos, los que en todas las épocas incluyendo los que estén con vida al momento del arrebatamiento hayan sido fieles a Dios, adultos, jóvenes y niños (pequeños y grandes).
La séptima trompeta anuncia la premiación que Jesús le dará a su pueblo en las bodas del Cordero, es por esa razón que la séptima trompeta es la “final trompeta” que menciona Pablo. Sería incongruente decir que la séptima trompeta se tocará mucho tiempo después de los santos estar en el cielo, porque ¿qué estarán haciendo los santos en el cielo mientras tanto llegan las premiaciones? El verso dice con toda claridad que los santos serán galardonados al sonido de la séptima trompeta.
El verso 18 concluye con la siguiente expresión: “y de destruir a los que destruyen la tierra” Mientras en el cielo los santos disfrutan de las premiaciones, en la tierra los destructores del planeta con sus políticas y formas de vivir, serán castigados como nunca ha sucedido en la historia de la humanidad; será derramado sobre la tierra juicio sin misericordia (Sofonías 1:14-18)
El verso 19 nos dice: Rev 11:19 Y el templo de Dios fue abierto en el cielo, y el arca de su pacto se veía en el templo. Y hubo relámpagos, voces, truenos, un terremoto y grande granizo.
Lo primero que vemos aquí es la apertura del templo de Dios en el cielo, y nos podemos preguntar ¿para qué es abierto el templo de Dios en el cielo? Creo que la respuesta mas adecuada es que el templo es abierto para recibir a alguien, no puede ser a los ángeles porque ellos tienen acceso al lugar; entonces solo nos queda una opción y es la llegada de los redimidos. El templo de los cielos será abierto para recibir a los santos del Altísimo, los mismos que por el toque de la ultima trompeta serán transformados e inmediatamente arrebatados con Jesús, para ser trasladados a las mansiones celestiales.
La iglesia gloriosa estará llegando al cielo, y en ese mismo instante sobre la tierra habrán: relámpagos, voces, truenos, un terremoto y grande granizo. Ese es el inicio del día de la ira de Dios sobre todo el planeta.
Para que la interpretación de un pasaje sea correcta, debe estar apoyado por otro pasaje paralelo, de esta manera podemos comparar la séptima trompeta con lo que dice Apocalipsis 19:4-9.
Rev 11:15 El séptimo ángel tocó la trompeta, y hubo grandes voces en el cielo, que decían: Los reinos del mundo han venido a ser de nuestro Señor y de su Cristo; y él reinará por los siglos de los siglos.
Verso paralelo: Rev 19:6 Y oí como la voz de una gran multitud, como el estruendo de muchas aguas, y como la voz de grandes truenos, que decía: !!Aleluya, porque el Señor nuestro Dios Todopoderoso reina!

Es la misma gran multitud que proclama la llegada del reino de Dios a través de Jesús.
Rev 11:16 Y los veinticuatro ancianos que estaban sentados delante de Dios en sus tronos, se postraron sobre sus rostros, y adoraron a Dios,
Rev 11:17 diciendo: Te damos gracias, Señor Dios Todopoderoso, el que eres y que eras y que has de venir, porque has tomado tu gran poder, y has reinado.

Versos paralelos: Rev 19:4 Y los veinticuatro ancianos y los cuatro seres vivientes se postraron en tierra y adoraron a Dios, que estaba sentado en el trono, y decían: !!Amén! !!Aleluya!
Rev 19:5 Y salió del trono una voz que decía: Alabad a nuestro Dios todos sus siervos, y los que le teméis, así pequeños como grandes.

Es la misma acción en los dos pasajes.

Rev 11:18 Y se airaron las naciones, y tu ira ha venido, y el tiempo de juzgar a los muertos, y de dar el galardón a tus siervos los profetas, a los santos, y a los que temen tu nombre, a los pequeños y a los grandes, y de destruir a los que destruyen la tierra.
Rev 11:19 Y el templo de Dios fue abierto en el cielo, y el arca de su pacto se veía en el templo. Y hubo relámpagos, voces, truenos, un terremoto y grande granizo.

Versos paralelos: Rev 19:7 Gocémonos y alegrémonos y démosle gloria; porque han llegado las bodas del Cordero, y su esposa se ha preparado.
Rev 19:8 Y a ella se le ha concedido que se vista de lino fino, limpio y resplandeciente; porque el lino fino es las acciones justas de los santos.
Rev 19:9 Y el ángel me dijo: Escribe: Bienaventurados los que son llamados a la cena de las bodas del Cordero. Y me dijo: Estas son palabras verdaderas de Dios.

Los elementos o frases que aparecen aquí en estos versos de la séptima trompeta, y que no se mencionan en los versos paralelos de Apocalipsis 19, es porque son eventos relacionados con la ira de Dios que ocurrirá aquí en la tierra; mientras que la celebración de las bodas del Cordero será un acontecimiento de premiación y celebración totalmente celestial.