A un paso de su cuarto campeonato Paulista, Neymar, mantiene la emoción del primer día por levantar él, el título regional de Sao Paulo. La estrella del Santos, no pudo contener las lágrimas tras lograr, ante el Mogi Mirim en la tanda de penaltis, su pase a la gran final.
Neymar, no fue al encuentro de sus compañeros para celebrar, sino que se tiró al césped, se arrodilló y llorando, dijo una oración dando gracias a Dios por la victoria.
“Soy un hombre cristiano y doy gracias por todo lo que Dios ha hecho en mi vida. Yo no estaba pidiendo ir a la final o ganar un partido “, dijo a los periodistas después del partido.
Neymar, dijo que hizo una oración para mantener la calma. “Da ansiedad, frío en la barriga, pero le pedí a Dios tranquilidad. Pedí tranquilidad y calma”, dijo el jugador.
“Es una gran felicidad, estoy haciendo historia una vez más en mi vida. Cinco veces en la final. Gracias a Dios, yo no sé lo que va a ocurrir en la final del Campeonato Paulista”, resaltó Neymar.
Traducido y adaptado por DevocionalesCristianos.org de Góspel Prime
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