COMO DEMOLER LAS TENTACIONES EN 3 MINUTOS CON 2 VERDADES BÍBLICAS
“Y YO ROGARÉ AL PADRE, Y OS DARÁ OTRO CONSOLADOR, PARA QUE ESTÉ CON VOSOTROS PARA SIEMPRE.” (Juan 14:16)
Bruce Wilkinson escribe en su excelente libro Spiritual Breakthroughs (Victorias Espirituales): “Fue un avance decisivo cuando descubrí que antes de cada tentación mis emociones estaban conmocionadas (internamente agitadas) y que en realidad estaba buscando alivio. Entonces recordé la promesa: ‘Y Yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre.” (Juan 14:16).
Increíble; Jesús nos mandó al Espíritu Santo para que sea nuestra fuente continua de consuelo y alivio. Y me pregunté qué pasaría si le pedía específicamente que me reconfortara a la hora de la tentación. Decidí intentarlo. Oré así: ‘Querido Espíritu Santo, Te necesito desesperadamente. No quiero pecar. Por favor, confórtame ahora.’ Al principio no pasó nada, y me sentí muy desanimado.
Pero, poco a poco fui consciente de algo, de que estaba siendo confortado. No sé exactamente cuándo me sentí reconfortado, pero sabía que había sucedido, que mi espíritu se sentía aliviado y ya no había dolor. Cuando volví a pensar en la tentación, ésta se había deslizado milagrosamente de nuevo a las tinieblas, muy lejos de mis sentidos. Era libre. He orado a mi Consolador muchas veces desde entonces y he descubierto dos verdades inmutables:
(1) El Espíritu Santo siempre, absolutamente siempre, cumple su responsabilidad en mi corazón;
(2) Siempre me da su alivio y consuelo en menos de tres minutos, aunque no podría decir en qué momento exacto lo hace. Yo llamo a esta oración de consuelo mi “demoledor de tentaciones en tres minutos”.
¿Por qué no la pruebas tú?
Deja una respuesta