Ayúdanos a entender, Señor, que en la Familia de Dios no hay judío ni griego, esclavo ni libre, VARÓN NI MUJER.
Noemí y Rut; Ana, madre de Samuel, Julda, profetisa, Judit y Ester…
mujeres ilustres del pueblo al que perteneciste, Señor.
Isabel, madre del Bautista;
las que te acompañaron al pie de la cruz
y fueron las primeras en dar testimonio de tu resurrección.
Priscila, Junia y Febe, que tanto colaboraron con Pablo;
y sobre todas ellas, ¡María!, tu madre y nuestra madre…
Y con estos precedentes, ¡en tantos países cristianos
la mujer es un Lázaro esperando las migajas caídas
de la mesa del varón!
Ayúdanos a entender, Señor, que en la Familia de Dios no hay judío ni griego, esclavo ni libre, VARÓN NI MUJER.
Que la imagen y semejanza de tu Padre no es solo el varón, Si no el ser humano en su doble faceta de varón y mujer.
José Manuel Valverde.