Versículos Bíblicos

Dos personas estudiando versículos sobre el evangelismo personal

37 Versículos Poderosos Para El Evangelismo Personal

0
Textos Maravillosos de La Biblia Para El Evangelismo Personal Hoy día recordé a un momento en mi vida que marcó un antes y un después...

Árticulos Nuevos

versiculos-biblicos-claves-de-la-biblia-cuadro

66 Versículos Bíblicos Claves Para Cada Libro de la Biblia: Cuadro...

0
Versículos Importantes De Todos Los Libros de La Biblia: Desde Génesis a Apocalipsis (Tabla Informativa) Antes de presentarte el cuadro, dejame contarte una historia: Hace...
Figura en manto azul con texto sobre la traducción de un término asociado con María

María: ¿Una Virgen o Una Mujer Joven? ¿Cuál es la traducción...

0
Hoy quiero hablar e intentar explicar uno de los pasajes más importantes y discutidos de toda la Biblia: Me refiero al versículo de Isaías...


Daniel 2 - Nacar-Colunga

Daniel interpreta el sueño de Nabucodonosor

1. El año doce del reinado de Nabucodonosor tuvo éste un sueño y turbóse en su espíritu, sin que pudiera dormir.

2. Hizo llamar el rey a magos y astrólogos, encantadores y caldeos, para que explicasen al rey su sueño. Vinieron, pues, y se presentaron ante el rey.

3. El rey les dijo: He tenido un sueño y estoy agitado, porque sé ya cuál fue.

4. Entonces hablaron los caldeos al rey en lengua aramea: Vivas para siempre, oh rey! Di a tus siervos el sueño y te daremos su interpretación.

5. Respondió el rey diciendo a los caldeos: Palabra segura de mi parte, si no me mostráis el sueño y su interpretación, seréis descuartizados, y vuestras casas convertidas en muladares,

6. mientras que, si me decís el sueño y su interpretación, recibiréis de mí dones y mercedes y mucha honra; decidme, pues, el sueño y su interpretación."

7. Respondiéronle diciendo por segunda vez: Diga el rey el sueño a sus siervos y le daremos su interpretación.

8. El rey respondió diciendo: Veo claro que ponéis dilaciones, porque veis que la cosa se me ha ido.

9. Si no me decís el sueño, caerá sobre todos vosotros la misma sentencia. De cierto que pretendéis prepararos para decirme falsedades y mentiras mientras pasa el tiempo. Decid, pues, el sueño y conoceré que sois capaces de darme su interpretación.

10. Los caldeos respondieron al rey, diciéndole: No hay hombre sobre la tierra que pueda decir lo que el rey pretende; jamás tampoco rey alguno, por grande y poderoso que fuese, exigió cosa semejante de mago, astrólogo o caldeo."

11. Lo que pide el rey es imposible, y no hay nadie que al rey pueda decírselo, a no ser los dioses, que no moran entre los hombres.

12. El rey, con ira y gran furor, mandó matar a todos los sabios de Babilonia.

13. Publicóse la orden, y ya iban a ser llevados a la muerte los sabios, y buscaban también a Daniel y a sus compañeros para matarlos.

14. Habló entonces Daniel avisada y prudentemente a Arioj, capitán de la guardia del rey, que había salido para matar a los sabios de Babilonia.

15. Habló y dijo a Arioj, capitán del rey: ¿Por qué esta orden del rey tan rigurosa? Entonces explicó Arioj la cosa a Daniel,

16. y Daniel, entrando al rey, le pidió que le diese tiempo y daría al rey la declaración.

17. Fue luego Daniel a su casa y comunicó el asunto a Ananías, Misael y Azarías, sus compañeros,

18. instándoles a pedir al Dios de los cielos que les revelase aquel misterio para que no hiciese perecer a Daniel y a sus compañeros con el resto de los sabios de Babilonia.

19. Entonces el misterio fue revelado a Daniel en visión nocturna, por lo cual Daniel bendijo al Dios de los cielos,

20. diciendo: Bendito sea el nombre de Dios de siglos en siglos, porque suya es la sabiduría y la fuerza.

21. El es quien ordena los tiempos y las circunstancias, depone reyes y los entroniza, da la sabiduría a los sabios, y la ciencia a los entendidos.

22. El revela lo profundo y lo oculto, conoce lo que está en tinieblas, y con El mora la luz.

23. A ti, Dios de mis padres, te confieso y te alabo, que me has dado sabiduría y fortaleza, y me has dado a conocer lo que te hemos pedido, y nos has revelado el secreto del rey.

24. Después de esto fue Daniel a Arioj, a quien había mandado el rey matar a los sabios de Babilonia, y le dijo así: No extermines a los sabios de Babilonia; llévame a la presencia del rey, que yo le daré la explicación."

25. Llevó entonces Arioj prestamente a Daniel a la presencia del rey, y díjole así: He hallado a uno de los deportados de Judá que dará al rey la explicación.

26. Respondió el rey, diciendo a Daniel, a quien llamaban Baltasar: ¿Podrás tú declarar el sueño que vi y su interpretación?

27. Daniel respondió delante del rey diciendo: Lo que pide el rey es un misterio que ni sabios, ni astrólogos, ni magos, ni adivinos son capaces de descubrir al rey; pero hay en los cielos un Dios que revela lo secreto y que ha dado a conocer al rey Nabucodono-sor lo que sucederá en el correr de los tiempos."

28. He aquí tu sueño y la visión que has tenido en el lecho.

29. En tu lecho, ¡oh rey! te vinieron pensamientos de lo que vendrá después de este tiempo, y el que revela los secretos te dio a conocer lo que sucederá.

30. Si este misterio me ha sido revelado, no es porque haya en mí una sabiduría superior a la de todos los vivientes, sino para que yo dé a conocer al rey la explicación y llegues a conocer los pensamientos de tu corazón.

31. Tú, ¡oh rey! mirabas y estabas viendo una gran estatua. Era muy grande la estatua y de un brillo extraordinario. Estaba en pie ante ti, y su aspecto era terrible.

32. La cabeza de la estatua era de oro puro; su pecho y sus brazos, de plata; su vientre y sus caderas, de bronce;"

33. sus piernas, de hierro, y sus pies, parte de hierro y parte de barro.

34. Tú estuviste mirando, hasta que una piedra desprendida, no lanzada por mano, hirió a la estatua en los pies de hierro y de barro, destrozándola.

35. Entonces el hierro, el barro, el bronce, la plata y el oro se desmenuzaron juntamente y fueron como tamo de las eras en verano; se los llevó el viento, sin que de ellos quedara traza alguna, mientras que la piedra que había herido a la estatua se hizo una gran montaña, que llenó toda la tierra."

36. He aquí el sueño. Daremos también al rey su interpretación.

37. Tú, ¡oh rey! eres rey de reyes, porque el Dios de los cielos te ha dado el imperio, el poder, la fuerza y la gloria.

38. El ha puesto en tus manos a los hijos de los hombres, dondequiera que habitasen; a las bestias de los campos, a las aves del cielo, y te ha dado el dominio de todo; tú eres la cabeza, de oro."

39. Después de ti surgirá otro reino menor que el tuyo, y luego un tercero, que será de bronce y dominará sobre toda la tierra.

40. Habrá un cuarto reino, fuerte como el hierro; como todo lo rompe y destroza el hierro, así él romperá todo, igual que el hierro, que todo lo hace pedazos."

41. Lo que viste de los pies y los dedos, parte de barro de alfarero, parte de hierro, es que este reino será dividido, pero tendrá en sí algo de la fortaleza del hierro, aunque viste el hierro mezclado con el barro.

42. Y el ser los dedos parte de hierro, parte de barro, es que este reino será en parte fuerte y en parte frágil.

43. Viste el hierro mezclado con barro porque se mezclarán por alianzas humanas, pero no se pegarán unos con otros, como no se pegan el hierro y el barro.

44. En tiempo de esos reyes, el Dios de los cielos suscitará un reino que no será destruido jamás y que no pasará a poder de otro pueblo; destruirá y desmenuzará a todos esos reinos, mas él permanecerá por siempre."

45. Eso es lo que significa la piedra que viste desprenderse del monte sin ayuda de mano, que desmenuzó el hierro, el bronce, el barro, la plata y el oro. El Dios grande ha dado a conocer al rey lo que ha de suceder después. El sueño es verdadero, y cierta su interpretación.

46. Entonces el rey Nabucodonosor cayó sobre su rostro y se prosternó ante Daniel, y mandó que le dieran ofrendas y perfumes.

47. Dirigió el rey la palabra a Daniel y dijo: En verdad que vuestro Dios es el Dios de los dioses y el Señor de los reyes y que revela los secretos, pues tú has podido descubrir este misterio.

48. En seguida el rey engrandeció a Daniel, y le hizo muchos y grandes dones, y le constituyó gobernador de la provincia de Babilonia, y le hizo jefe supremo de todos los sabios de ésta.

49. Daniel rogó al rey que diese la intendencia de la provincia a Sidraj, Misaj y Abed-Nego. Pero Daniel permaneció en la corte del rey.