Mateo 14 - Reina Valera 1995Muerte de Juan el Bautista1. En aquel tiempo Herodes,[1] el tetrarca, oyó la fama de Jesús, 2. y dijo a sus criados: "Este es Juan el Bautista; ha resucitado de los muertos y por eso actúan en él estos poderes". 3. Herodes había prendido a Juan, lo había encadenado y metido en la cárcel, por causa de Herodías, mujer de su hermano Felipe,[2] 4. porque Juan le decía: "No te está permitido tenerla".[3] [4] 5. Y Herodes quería matarlo, pero temía al pueblo, porque tenían a Juan por profeta. 6. Pero cuando se celebraba el cumpleaños de Herodes, la hija de Herodías danzó en medio[5] y agradó a Herodes, 7. por lo cual este le prometió con juramento darle todo lo que pidiera. 8. Ella, instruida primero por su madre, dijo: "Dame aquí en un plato la cabeza de Juan el Bautista". 9. Entonces el rey se entristeció, pero a causa del juramento y de los que estaban con él a la mesa, mandó que se la dieran, 10. y ordenó decapitar a Juan en la cárcel. 11. Trajeron su cabeza en un plato, se la dieron a la muchacha y ella se la entregó a su madre. 12. Entonces llegaron sus discípulos, tomaron el cuerpo, lo enterraron y fueron a dar la noticia a Jesús. Alimentación de los cinco mil13. [6] Al oírlo Jesús, se apartó de allí, él solo, en una barca a un lugar desierto. Cuando la gente lo supo, lo siguió a pie desde las ciudades. 14. Al salir Jesús, vio una gran multitud, tuvo compasión de ellos y sanó a los que de ellos estaban enfermos. 15. Cuando anochecía, se acercaron a él sus discípulos, diciendo: --El lugar es desierto y la hora ya avanzada. Despide a la multitud para que vayan por las aldeas y compren algo de comer. 16. Jesús les dijo: --No tienen necesidad de irse; dadles vosotros de comer. 17. Ellos dijeron: --No tenemos aquí sino cinco panes y dos peces. 18. Él les dijo: --Traédmelos acá. 19. Entonces mandó a la gente recostarse sobre la hierba; y tomando los cinco panes y los dos peces, y levantando los ojos al cielo, bendijo,[7] y partió y dio los panes a los discípulos, y los discípulos a la multitud. 20. Comieron todos y se saciaron; y recogieron lo que sobró de los pedazos, doce cestas llenas.[8] 21. Los que comieron fueron como cinco mil hombres, sin contar las mujeres y los niños. Jesús anda sobre el mar22. En seguida Jesús hizo a sus discípulos entrar en la barca e ir delante de él a la otra ribera,[9] entre tanto que él despedía a la multitud. 23. Después de despedir a la multitud, subió al monte a orar aparte;[10] y cuando llegó la noche, estaba allí solo. 24. Ya la barca estaba en medio del mar, azotada por las olas, porque el viento era contrario. 25. Pero a la cuarta vigilia[11] de la noche, Jesús fue a ellos andando sobre el mar. 26. Los discípulos, viéndolo andar sobre el mar, se turbaron, diciendo: --¡Un fantasma! Y gritaron de miedo. 27. Pero en seguida Jesús les habló, diciendo: --¡Tened ánimo! Soy yo, no temáis. 28. Entonces le respondió Pedro, y dijo: --Señor, si eres tú, manda que yo vaya a ti sobre las aguas. 29. Y él dijo: --Ven. Y descendiendo Pedro de la barca, andaba sobre las aguas para ir a Jesús. 30. Pero al ver el fuerte viento, tuvo miedo y comenzó a hundirse. Entonces gritó: --¡Señor, sálvame! 31. Al momento Jesús, extendiendo la mano, lo sostuvo y le dijo: --¡Hombre de poca fe! ¿Por qué dudaste? 32. En cuanto ellos subieron a la barca, se calmó el viento. 33. Entonces los que estaban en la barca se acercaron y lo adoraron, diciendo: --Verdaderamente eres Hijo de Dios. Jesús sana a los enfermos en Genesaret34. Terminada la travesía, llegaron a tierra de Genesaret.[12] 35. Cuando lo reconocieron los hombres de aquel lugar, enviaron noticia por toda aquella tierra alrededor, y trajeron a él todos los enfermos; Jesús explica la parábola de la cizaña36. y le rogaban que los dejara tocar solamente el borde de su manto. Y todos los que lo tocaron, quedaron sanos. |