Deuteronomio 2 - Reina Valera 2004Los años en el desierto1. LUEGO volvimos y nos fuimos al desierto, camino del Mar Rojo, como Jehová me había dicho; y rodeamos el monte de Seir por muchos días. 2. Y Jehová me habló, diciendo: 3. Bastante habéis rodeado este monte; volveos al norte. 4. Y manda al pueblo, diciendo: Pasando vosotros por el territorio de vuestros hermanos los hijos de Esaú, que habitan en Seir, ellos tendrán miedo de vosotros; mas vosotros guardaos mucho: 5. No os metáis con ellos; que no os daré de su tierra ni aun el ancho de la planta de un pie; porque yo he dado por heredad a Esaú el monte de Seir. 6. Compraréis de ellos por dinero las viandas, y comeréis; y también compraréis de ellos el agua, y beberéis: 7. Pues Jehová tu Dios te ha bendecido en toda la obra de tus manos; Él conoce tu caminar por este gran desierto; estos cuarenta años Jehová tu Dios ha sido contigo; y ninguna cosa te ha faltado. 8. Y pasamos de nuestros hermanos los hijos de Esaú, que habitaban en Seir, por el camino de la llanura de Elat y de Esiongeber. Y volvimos, y pasamos camino del desierto de Moab. 9. Y Jehová me dijo: No molestes a Moab, ni te empeñes con ellos en guerra, que no te daré posesión de su tierra; porque yo he dado a Ar por heredad a los hijos de Lot. 10. (Los emimeos habitaron en ella antes, pueblo grande, y numeroso, y alto como numeroso, y alto como gigantes: 11. Por gigantes eran ellos también contados, como los anaceos; y los moabitas los llaman emimeos. 12. Y en Seir habitaron antes los horeos, a los cuales echaron los hijos de Esaú; y los destruyeron de delante de sí, y moraron en lugar de ellos; como hizo Israel en la tierra de su posesión que les dio Jehová.) 13. Levantaos ahora, y pasad el arroyo de Zered. Y pasamos el arroyo de Zered. 14. Y los días que anduvimos de Cades-barnea hasta que pasamos el arroyo de Zered, fueron treinta y ocho años; hasta que se acabó toda la generación de los hombres de guerra de en medio del campo, como Jehová les había jurado. 15. Y también la mano de Jehová fue sobre ellos para destruirlos de en medio del campo, hasta acabarlos. 16. Y aconteció que cuando se hubieron acabado de morir todos los hombres de guerra de entre el pueblo, 17. Jehová me habló, diciendo: 18. Tú pasarás hoy el término de Moab, a Ar, 19. Y te acercarás delante de los hijos de Amón: no los molestes, ni te metas con ellos; porque no te he de dar posesión de la tierra de los hijos de Amón; que a los hijos de Lot la he dado por heredad. 20. (Por tierra de gigantes fue también ella tenida: habitaron en ella gigantes en otro tiempo, a los cuales los amonitas llamaban zomzomeos; 21. Pueblo grande, y numeroso, y alto, como los anaceos; a los cuales Jehová destruyó de delante de los amonitas, quienes les sucedieron, y habitaron en su lugar: 22. Como hizo con los hijos de Esaú, que habitaban en Seir, de delante de los cuales destruyó a los horeos; y ellos les sucedieron, y habitaron en su lugar hasta hoy. 23. Y a los heveos que habitaban en Haserin hasta Gaza, los caftoreos que salieron de Caftor los destruyeron, y habitaron en su lugar.) 24. Levantaos, partid, y pasad el arroyo de Arnón: he aquí he dado en tu mano a Sehón rey de Hesbón, amorreo, y a su tierra: comienza a tomar posesión, y contiende con él en guerra. 25. Hoy comenzaré a poner tu miedo y tu espanto sobre los pueblos debajo de todo el cielo, los cuales oirán tu fama, y temblarán, y se angustiarán delante de ti. Israel derrota a Sehón26. Y envié mensajeros desde el desierto de Cademot a Sehón rey de Hesbón, con palabras de paz, diciendo: 27. Pasaré por tu tierra por el camino: por el camino iré, sin apartarme a izquierda ni a derecha. 28. La comida me venderás por dinero, y comeré; el agua también me darás por dinero, y beberé: solamente pasaré a pie; 29. como lo hicieron conmigo los hijos de Esaú que habitaban en Seir, y los moabitas que habitaban en Ar; hasta que pase el Jordán a la tierra que nos da Jehová nuestro Dios. 30. Mas Sehón rey de Hesbón no quiso que pasásemos por el territorio suyo; porque Jehová tu Dios había endurecido su espíritu, y obstinado su corazón para entregarlo en tu mano, como hoy. 31. Y me dijo Jehová: He aquí yo he comenzado a dar delante de ti a Sehón y a su tierra; comienza a tomar posesión, para que heredes su tierra. 32. Y nos salió Sehón al encuentro, él y todo su pueblo, para pelear en Jaas. 33. Mas Jehová nuestro Dios lo entregó delante de nosotros; y herimos a él y a sus hijos, y a todo su pueblo. 34. Y tomamos entonces todas sus ciudades, y destruimos todas las ciudades, hombres, y mujeres, y niños; no dejamos ninguno: 35. Solamente tomamos para nosotros las bestias y el despojo de las ciudades que habíamos tomado. 36. Desde Aroer, que está junto a la ribera del arroyo de Arnón, y la ciudad que está en el arroyo, hasta Galaad, no hubo ciudad que escapase de nosotros: todas las entregó Jehová nuestro Dios en nuestro poder. 37. Solamente a la tierra de los hijos de Amón no llegaste, ni a todo lo que está a la orilla del arroyo de Jaboc ni a las ciudades del monte, ni a lugar alguno que Jehová nuestro Dios había prohibido. |