Mateo 4 - Serafín de Ausejo 1975Tentación de Jesús1. Entonces fue llevado Jesús por el Espíritu al desierto, para ser tentado por el diablo. 2. Y después de ayunar cuarenta días y cuarenta noches, al fin tuvo hambre. 3. El tentador se le acercó y le dijo: "Si eres Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en panes". 4. Pero él le contestó: "Escrito está: No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios". 5. Entonces el diablo lo llevó a la ciudad santa, lo puso sobre el alero del templo 6. y le dijo: "Si eres Hijo de Dios, tírate abajo; pues, escrito está: Mandará en tu favor a sus ángeles, y te llevarán en palmas, no sea que tropiece tu pie con una piedra". 7. Jesús le respondió: "También está escrito: No tentarás al Señor, tu Dios". 8. De nuevo lo llevó el diablo a un monte elevadísimo, le mostró todos los reinos de la tierra y su esplendor, 9. y le dijo: "Todo esto te daré si te postras y me adoras". 10. Entonces le responde Jesús: "Retírate, Satanás, porque escrito está: Al Señor tu Dios adorarás y a él solo darás culto". 11. Entonces lo dejó el diablo, y unos ángeles se acercaron para servirle. Jesús principia su ministerio12. Al enterarse Jesús de que Juan había sido encarcelado, se retiró a Galilea. 13. Y dejando Nazaret, se fue a vivir a Cafarnaún, ciudad marítima, en los confines de Zabulón y Neftalí, 14. para que se cumpliera lo anunciado por el profeta Isaías cuando dijo: 15. ¡Tierra de Zabulón y tierra de Neftalí, camino del mar, más allá del Jordán, Galilea de los gentiles! 16. El pueblo que caminaba en tinieblas vio una gran luz; para aquellos que yacían en región y sombra de muerte una luz amaneció. 17. Desde entonces comenzó Jesús a predicar: "Convertíos; porque el reino de los cielos está cerca". 18. Caminando junto al mar de Galilea, vio a dos hermanos: a Simón, llamado Pedro, y a su hermano Andrés, que estaban echando al mar una red, pues eran pescadores. 19. Y les dijo: "Venid conmigo y os haré pescadores de hombres". 20. Ellos al instante dejaron las redes y lo siguieron. 21. Pasando más adelante, vio a otros dos hermanos: Santiago, el de Zebedeo, y su hermano Juan, que remendaban sus redes en la barca, con Zebedeo, su padre; y los llamó. 22. Ellos al momento dejaron la barca y a su padre y lo siguieron. 23. Recorría toda Galilea, enseñando en las sinagogas, predicando el evangelio del reino y curando en el pueblo toda enfermedad y toda dolencia. 24. Su fama se extendió por toda Siria. Le traían a todos los que se sentían mal, aquejados de diversas enfermedades y dolores: endemoniados, epilépticos y paralíticos; y él los curaba. 25. Le seguía una gran muchedumbre de Galilea, Decápolis, Jerusalén, Judea y del otro lado del Jordán. |