Romanos 2 - Pablo Besso (Nuevo Testamento)

El justo juicio de Dios

1. Por eso eres inexcusable, oh hombre, quienquiera que juzgas, porque en lo que juzgas al otro te condenas a ti mismo, porque las mismas cosas cometes tú que juzgas,

2. porque sabemos que el juicio de Dios es según verdad sobre los que cometen tales cosas.

3. ¿Piensas, oh hombre que juzgas al que comete tales cosas y las haces, que tú escaparlas del juicio de Dios?

4. o ¿la riqueza de la bondad, de la tolerancia y de la longanimidad de él menosprecias? desconociendo que si Dios es bueno es para traerte a la conversión,

5. mas según tu dureza y tu corazón impenitente te atesoras a ti mismo ira en día de ira y de revelación del justo juicio de Dios

6. que retribuirá a cada uno según sus obras (Sal. 62:12)

7. a los que con perseverancia en obra buena buscan gloria, honra e incorruptibilidad, vida eterna,

8. pero a los que son pendencieros y desobedecen a la verdad, mas obedecen a la injusticia, ira e indignación.

9. Tribulación y angustia sobre toda alma de hombre que obra lo malo, de judío primeramente y de griego,

10. mas gloria, honra y paz a todo hombre que hace el bien, a judío primeramente y a griego,

11. porque no hay acepción de personas cerca de Dios,

12. porque todos los que sin ley pecaron, sin ley también perecerán, y todos los que en ley pecaron por ley serán juzgados,

13. porque no son los oidores de ley que son justos para Dios, mas los hacedores de ley serán justificados,

14. porque cuando gentiles que no tienen ley hacen naturalmente lo que es de la Ley, éstos que no tienen ley, a sí mismos son ley,

15. los cuales muestran la obra de la Ley escrita en sus corazones, confirmándolo su conciencia y entre sí los pensamientos acusando o también excusando,

16. en el día en que Dios juzgará las cosas escondidas de los hombres según mi evangelio por Jesu-Cristo'.

Los judíos y la ley

17. Si pues tú te apellidas judío y descansas en ley y te jactas en Dios

18. y conoces su voluntad y disciernes lo mejor, instruido por la Ley,

19. persuadido que tú eres guía de ciegos, luz de los que están en tinieblas,

20. doctor de insipientes, maestro de niños, teniendo la forma del conocimiento y de la verdad en la Ley,

21. tú, pues, el que enseñas a otro ¿no te enseñas a ti mismo? ¡el que predicas no hurtar, hurtas!

22. ¡el que dices no adulterar, adulteras! ¡el que abominas los ídolos, saqueas los templos!

23. ¡tú que te jactas en una ley por la trasgresión de la Ley, deshonras a Dios!

24. porque el nombre de Dios, por causa de vosotros, es blasfemado entre los gentiles, como está escrito (Is. 52:5).

25. La circuncisión en verdad aprovecha si cumplieres ley, mas si fueres transgresor de ley, la circuncisión ha venido a ser incircuncisión.

26. Si pues la incircuncisión guardare las ordenanzas de la Ley su incircuncisión ¿no será tenida por circuncisión?

27. y la incircuncisión de naturaleza cumpliendo la Ley te juzgará a ti que por letra y circuncisión eres transgresor de ley,

28. porque no es judío el que lo es en el exterior, tampoco es circuncisión la que lo es en lo exterior, en la carne,

29. mas es judío el que lo es en el secreto, y circuncisión es la del corazón en espíritu, no en letra, cuya alabanza no viene de hombres sino de Dios. ")